Déjate llevar

19. ¿Donde estaba él?

Es viernes y mis hormonas están menos revolucionadas que en toda la semana, he estado saturada por varios exámenes, que me han salido ... regular, por el simple hecho de estar pensando en que he echo mal en esta vida.

La verdad es que nunca suelo contar mi infancia a la gente, además, pienso que no es de su incumbencia. Nunca he sido la Sara feliz que todos conocen, aquella que llora solo cuando suspende un examen o su "novio" la deja... ojalá ser esa Sara.

De pequeña siempre se han metido conmigo, ¿ me afectaba?, pues la verdad es que no tanto como algunos piensan. Estar gordita no es necesariamente estar con una enfermedad.
Lo que me afectaba, era mi familia, concretamente mi madre. Ella cuando estaba con mi padre no era la misma que ahora, juzgaba a cada persona por cómo hacía las cosas, como vestía, con quien salía...
Además también se metía con mi físico, a lo mejor lo hacía involuntariamente pero han habido veces en las que no lo he soportado y me he venido abajo.

Nadie ha sabido sobre mis problemas nunca, ni nadie lo sabrá, no me hace fuerte que ellos sepan mis puntos débiles. Cuando alguien me conoce por dentro me atemoriza saber que me van a juzgar igual que ella y que me van a hacer tanto daño...

Piensa en positivo Sara " perspectiva rosa"

Cambiando de tema.
Esther está a punto de venir del gimnasio para vestirse en mi casa. Como no quiero que mi madre se entere de que voy a salir esta noche, le he dicho que iba a ir a dormir a casa de Esther.

Acaba de sonar el timbre y me disipo de mis pensamientos, de manera que bajo a abrir la puerta.

- Holaa!- me dice Esther súper contenta.

- ¡Hola pasa! , vamos a mi habitación- subimos ambas a mi habitación y empezamos a arreglarnos para ir a cenar.
Yo elijo unos vaqueros y una blusa sencilla, mientras que Esther parece que va a una boda con un mono largo. Estamos preparadas y Esther llama a Ryan para decirle que estamos enseguida en su casa.

Bajamos las escaleras y veo un poco de la planta de abajo, esta no está desocupada, mi madre se encuentra con un apuesto señor, de unos 40 años y con ligera barba.
La verdad es que es realmente guapo y varonil para su edad.

No esperaba verla abajo, porque los viernes por la tarde va a visitar a mi abuela. Intento evadir mis especulaciones sobre el hombre que está junto a mi madre y nos dirigimos a la puerta trasera del jardín.

Salimos en dirección hacia "la casa de las tentaciones"
(Nombre inventado por Esther, ya que las dos nos mostramos algo nerviosas cada vez que vamos a esa casa)

Toco el timbre y espero unos minutos hasta que aparece Ryan- Hola chicas, que bien que habéis venido- nos sonríe y se hace para el lado - Pasad- entramos en la enorme y reluciente mansión y nos lleva hacia el porche de atrás.

Son las 11 de la noche y ya está oscureciendo, me doy cuenta de que Ryan va en bañador y tiene el pelo mojado, pero no se porque será.
Hasta que recuerdo la sutil mención de mi amiga diciéndome que vendrían más personas.

Llegamos a la parte del exterior de la casa y mis ojos recorren todo el entorno en busca de Dylan.
Mis falsas esperanzas de que apareciese no fructifican ya que, han pasado dos horas y no lo veo.

Una parte de mi está aliviada porque no tengo que enfrentar a Dylan, pero la otra está desilusionada y decaída porque no lo voy a ver.

Gracias a esa parte desilusionada y decaída, me encuentro tumbada en una hamaca con una botella de Larios. He perdido el contacto con Esther hace una hora, la última vez que la he visto ha sido en la barra improvisada que han puesto después de hacer una enorme barbacoa.
Este lugar está repleto de jugadores de fútbol, animadoras y la popular clase de Ryan y su hermanito polla grande.

Mmm si, tiene un miembro enorme.

Todo el alcohol ingerido en la última hora se resume a media botella de Larios y un par de margaritas.
La Sara controladora y obstinada desapareció.
Nunca bebo hasta emborracharme pero hoy no hay nadie que pueda castigarme, regañarme, echarme cosas en cara... ¡porque no conozco a nadie!

Me dirijo a la barra e intento buscar a Esther... estará con Ryan en algún cuarto.
¿ Vas a interrumpirlos? .... Si, es mi amiga, que se joda por dejarme sola.

Subo las escaleras torpemente y voy abriendo puertas al azar. La mayoría de las personas son precavidas y cierran la puerta con llave, pero recuerdo que Sara me comentó que, una cosa que le ponía a Ryan, era hacerlo corriendo el peligro de que lo pillaran.

¿Soy la única que lo ve extraño?

Me queda una habitación por revisar, los huéspedes de las otras habitaciones me han lanzado unos cuantos insultos por no llamar a la puerta. Pero mi contestación era la misma: Ups, buscaba el baño.

Estoy preparada para encontrarme a mi amiga, abro la puerta y efectivamente es Ryan con....

Esa, esa no es Esther.
Ryan está desnudo con una chica que no es Esther.

Alertaaaaaaaaaa , alerta rojaaaaa.

Yo se que ambos decidieron no tener algo serio , no se el porqué, pero no pensaba que la utilizase a ella también.
Ryan se veía tan noble y tan dulce que...

Ryan se tapa con la manta sus partes, al reconocer mi cara- No es lo que parece.

No se que decir y me quedo atónita mirando el suelo pero la respiración exaltada de la chica me hace reaccionar y salgo corriendo hacia la planta de abajo.

No se donde ubicarme para que no haya tanta gente,  de manera que me voy a la cocina y me siento en una silla para reflexionar sobre lo sucedido.
¿ Se lo cuento a mi mejor amiga? ¿Y si le hace mucho daño? ¿Que pensará Dylan de lo sucedido? ...
¿Dylan me hace lo mismo?

Y ahí es cuando me doy cuenta ... he vuelto a pensar en él.
En el reloj de la cocina pone que son las 02:00 de la madrugada y no estoy haciendo nada interesante.
Pero de repente una voz me saca de mis pensamientos.

El chico hace que achine los ojos ya que me tapa la poca luz que hay en la cocina- Hola .- a simple vista no parece mal chico.

- Hola- el chico sigue de pie y me tiende un vaso con bebida.
No se si tomar el vaso, mi mente me aconseja que no lo haga de ningún modo. Es un desconocido y estamos en una fiesta en la cual, creo que ya he bebido demasiado.

No es lo mismo lo que pienso que lo que hago. Tomo el vaso y bebo el contenido, sabe algo raro pero aún así, lo saboreo.
El chico se sienta a mi lado y noto como poco a poco mi alrededor se va moviendo, como mi mente no puede pensar con claridad y ahí, justo en ese momento es cuando noto que el chico de delante mía me acaricia la parte que hay superior al muslo, al borde de la entrepierna.
Intento reaccionar pero no puedo.

Intento llorar pero no puedo gesticular, intento gritar pero estoy muda, intento andar pero ya mis pies no tocan el suelo....

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Sorpresaaaa!!!

Aunque no es Miércoles, subo este capítulo porque estoy súper contenta con todo el apoyo mostrado últimamente.

Me gusta ver que mi bebe crece poco a poco, sois increíbles.

...¿Que pensáis que sucederá con Sara?
... ¿Donde estará Dylan?

Un saludo y hasta el miércoles❤️