Capítulo 11

2.7K 210 21
                                    

No debería observarla, sé que no es bueno y que probablemente sí despierta y me ve así pensará que estoy demente, yo no había visto a ninguna chica mientras dormía porque usualmente yo desaparecía en cuanto ellas caían rendidas y si me quedaba ellas eran las que me veían dormir porque, admitamoslo, soy hermoso. Pero ese no es el punto, el verdadero conflicto es que estoy en su cama contando cada una de sus pecas y memorizando la forma de estas como si fueran lo más hermoso que haya visto.

Su nariz es pequeña y respingada, sus pestañas son alargadas, debes verlas muy de cerca para darte cuenta que las puntas de estas son tan claras que a simple vista no se ven, pero están ahí, tan alargadas que la hacen ver tierna. Y ni empecemos a hablar de sus labios, el superior es delgado, apenas lo notas pero su labio inferior es tan carnoso que dan ganas de morderlo mientras la beso. Maldita sea, ¿A quien le importa cuántas pecas tiene Hermione Granger en el rostro? A nadie. Por cierto, tiene 33 pecas.

Acerqué mi mano para acariciar un poco su cabello, algunos mechones le caían en la cara de forma desordenada haciéndola lucir mucho más bonita, a pesar de realmente ser un desastre, es más suave de lo que imaginé.

—¿Cuánto tiempo más vas a seguir observandome?— Habló adormilada aún sin abrir los ojos.

—¿De qué hablas? Acabo de despertar.

—Hace media hora.

—¿Y tú cómo sabes a qué hora desperté?—Abrió los ojos nerviosa.—¡No!—Esto sí que va a estar bueno.—¡Estabas observandome mientras dormía!

—¡Claro que no!

—¡Ah, claro que sí!

—¡Eres un idiota!—Se sentó lista para irse.

—¿Eso qué rayos tiene que ver?

—¡Nada! Pero siempre lo eres.

—¡Qué madura!— Bromee pero ella en cambio solo me sacó la lengua.—Ya, ya, entiendo, es fabuloso amanecer conmigo a tu lado.—La abracé de la cintura para atraerla a mi.

—Eres un tonto.—Aun así se dejó apapachar por mi, y entre arrumacos se nos fueron las horas.

—Creo que puedo acostumbrarme a esto.—Susurro jugando con mi mano izquierda pues la derecha la tenía fuertemente abrazada.

—Es extraño.

—Lo sé.—Volvio a susurrar mientras dejaba caer mi mano.

—Extraño bueno, ¿Sabes? Es muy pronto para decir algo así pero es como si todo este tiempo debía de haber sido así.—Giro un poco para verme con su magnífica sonrisa y yo aproveché para acariciar su mejilla.

—Nosotros ponemos la reglas, ¿Está bien? Nosotros decidimos que es muy pronto y que no, y en verdad siento que escucharte decirlo era lo que yo necesitaba.—Me dió un corto pero tierno beso y se levantó caminando hacia su baño, aunque antes de llegar Se giró sobre sus talones risueña.— Tomaré una ducha, si quieres puedes bajar a desayunar, en unos momentos te alcanzaré.— Y sin más entró en el baño dejándome extrañamente feliz.

POV Hermione

El agua corría por mi piel relajando notablemente mis músculos, habia pasado gran parte de la noche tensa al saber que Draco Malfoy estaba durmiendo junto a mi, en mi cama. Aunque al amanecer no pude evitar empezar a sentirme extrañamente tranquila, verlo así, durmiendo profundamente era de lo más tentador, parecía que en serio estaba disfrutando su sueño.

No llevamos tanto tiempo y aún así me siento atraída hacia él. Seguramente la Hermione de hace 5 años estaría brincando de la alegría pero ciertamente aún debo tantear el terreno antes de preguntar a dónde nos estamos dirigiendo.

Tú eres mi destinadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora