Capítulo 26

1.4K 116 28
                                    

—No.

—Por favor Hermione, es lo único que te pido.

—No quiero verle, no importa que tengas que decir, no pienso participar en nada donde él este.

—¡Por Merlín Hermione!, Esto no es sobre ti y tu trágica relación, te estoy pidiendo un maldito favor, ¿Cuántas veces te he pedido uno?— Theodore Nott me miraba impaciente esperando mi respuesta, vacile un poco, sabia que era egoísta de mi parte pero es que esto parecía absurdo, ¿Por qué precisamente nosotros debíamos hacer el trabajo sucio?

—Ninguna.

—¿Y cuantas veces te he hecho un favor?

—Muchas... pero ese no es-

—Tu y Draco son las personas en las que Colin más confía últimamente.

—¿Y que hay de Harry?

—El admira a Harry, así como yo admiro a Victor Krum, pero no por eso iré a buscarlo para contarle todos mis problemas.

—Pero si lo escucharías.

—Mírame a los ojos y dime que Harry Potter es capaz de lograr convencer a Colin de perdonarme.

—¡Oye! Harry es perfectamente capaz de hacer muchas cosas, puede ser un estúpido a veces pero tiene sus cualidades en alguna parte.

—Harry Potter es muy bueno en salvarse de la muerte y en el quidditch tiene sus dotes, pero, ¿Crees que tenga dotes de casamentero? Tiene la capacidad de aconsejar igual que la de una piedra.

—Puede que tengas razón, pero lo que me pides es mucho.

—Hermione, te lo ruego, ¿Quieres que me ponga de rodillas? Lo hare, pero ayúdame, no quiero perderlo.

—¿Porqué no se lo pides a Ginny?

—Me odia casi tanto como odia a Pansy.

Mire a mi al rededor, el pasillo estaba casi vacío, fue el mismo pasillo en el que terminé con Draco. Joder, yo se lo que se siente perder a tu destinado, pero ¿Ir con Draco a hablar con Colin? La herida aun era reciente, apenas había pasado una semana.

Pero ver a Theodore con esa cara larga me rompía el corazón casi tanto como Draco.

—Bien.

—¡Sí! ¡Gracias Hermione!—Me abrazo fuertemente mientras soltaba sus feromonas azorrillandome un poco en el proceso.

—Maldita sea, contrólate Theodore, me vas a impregnar con tu olor y ahí si que no podre ayudarte.

—Sí, lo siento.— Me soltó para volver a controlarse, pero aun seguía con su sonrisa boba.

—¿Cuándo y donde veré a Draco para esta locura?

—Mañana, después de clases, todavía tengo que convencer a Draco.

—¿Por qué viniste primero a por mi?—Theo alzo una ceja divertido.

—¿Es una broma? Si te tengo a ti Draco me va a decir sí a todo.— El alfa me miro burlón y no pude evitar sonrojarme.

—Bien.

—¿Hasta cuando van a fingir que nosotros estamos escuchando?—Oí a un incomodo Harry susurrarle a Ron a unos cuantos pasos de nosotros y junto con Theo nos soltamos a reír.

[...]

—Así que aceptaste.

—¿Qué podía hacer? Yo sé lo que se siente estar lejos de tu destinado.—Serví un tazón lleno de uvas frente a nosotras mientras Ginny seguía mirándome reprobatoriamente.—¿Puedes dejar de mirarme así?

Tú eres mi destinadaWhere stories live. Discover now