Aquestas plumas de otoño ©

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Los colores de este espectro de plata
brillan para aquellos entendidos en alianzas,
en verdades, en caminos,
en grilletes, quizás, mas rotos ya.
Como he dicho alguna vez, en otro tiempo:
Vencidos.
No es su sino el de los que se ahogan
para siempre en el desdén.
Ni borregos ni mudos aquí,
solo almas de fuego crepitando,
almas, llamas, flamas...
Para ellos estos colores brillan,
ellos y nadie más los entienden,
ningún otro es digno de verlos sin herirse.
Lumbre de plata,
plateada circunferencia con cráter,
que ven en ti aquellos sino su propio fervor
de vacilante cordura,
qué sino una aureola de pureza en la cual lavarse,
qué, sino alma donde la llaga se vuelve arte.
Sin víctima, sin índices, sin humilladeros.

Lunares colores los de mis plumas,
cuentan leyendas antes desoídas,
ora casi escuchadas, casi queridas.