Capítulo 14

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— Lo siento -dijo el doctor-, pero voy a declarar la hora de muerte a las…

Blip

La habitación se congeló. Harry se mantuvo en silencio.

Blip

Muy lentamente, cada una de las cabezas se giró hacia el monitor cardiaco.

Blip.

Cinco mandíbulas cayeron abiertas mientras que la línea verde se elevó en un salto para volver a caer. Eso era imposible. ¿No lo era? pensó Harry débilmente. El corazón de Louis no podía solo comenzar a latir por su propia cuenta ¿Podría? Debía estar alucinando… demasiado desesperado para pensar lógicamente. Él sabía que estaba sacudiéndose y  llorando pero eso no le importó… solo se quedó mirando hacia el monitor, acercándose, desafiándolo a hacer beep de nuevo.

Blip

— De ninguna puta manera -soltó finalmente el doctor mientras que Harry caía sobre sus rodillas, como si alguien lo hubiera dejado caer desde una gran altura.

Las cabezas de los tres ayudantes giraron hacia el doctor, pero él los ignoró, andando alrededor de la cama hacia el monitor. Lo miró duramente, su nariz casi estrujándose contra la pantalla.

— ¡Esto es malditamente imposible! -dijo nuevamente, sacudiendo su cabeza vehementemente.

Blip.

— El paciente ha recuperado un ritmo sinusal normal -anunció la enfermera innecesariamente.

— Eso no es posible -dijo el doctor nuevamente, negándose a creer lo que podía oír y ver- Aquello no es médicamente posible. ¡Tiene que ser una broma!

Harry quiso decirle algo estúpido como

— No suene tan sorprendido. Incluso en su lecho de muerte a Louis le gusta jugar bromas.

Inmediatamente lo que salió de su boca fue un sonido asfixiante, la que pudo haber sido una risa, un llanto o incluso un grito. La siguiente cosa que supo fue que su visión se fue a negro.

 

~*~

 

— ¿Louis? ¿Louis, puedes oirme?

Louis gruñó, intentando pelear y sacar lejos el deseo de volver a caer. Se sentía perezoso, como si estuviese drogado hasta los globos oculares con morfina, y entonces sus párpados estuvieran atascados cerrados, porque él realmente no los podía mover.

— Louis -la voz familiar lo mimó de nuevo- ¿puedes abrir tus ojos?

Oh, así que no se encontraban atascados… Con cada onza de sí mismo como pudo, Louis aleteó sus ojos abiertos, solo logrando entrever luz blanca y sombras oscuras. Sus párpados se sentían como plomo. Dios, su abdomen dolía tanto y había un horrible ruido sordo en la cabeza.

— ¡Louis, eso es! Abre tus ojos -Louis gruñó, ¿Liam no podía bajar un poco el volumen de su voz? Ésta rugía a través de sus oídos, sonando deformada y dolorosa.

— Muy fuerte… -se quejó. Escuchó una risa en respuesta, esta sonaba aliviada y feliz. El sueño lo estaba llevando hacia abajo de nuevo-... y cansado -él murmuró antes de volver a caer inconsciente.

La siguiente vez que despertó, el peso contra sus ojos se sentía más ligero.

— ¿Louis? -Liam preguntó, su voz bendecidamente más tranquila esta vez.

Louis parpadeo y lentamente abrió sus ojos. La luz fue tan fuerte como la última vez, y le tomó un par de intentos acostumbrarse a esta. Le tomó incluso más tiempo notar las manchas de color que realmente habían.

Room 317 / Habitación 317 (Traducción Oficial)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant