Viejos Relatos -Hwtober [Tododeku]

Circo

ADVERTENCIA: Fuertes escenas de violencia y muerte detalladas, no recomendada para personas sensibles a esto.

A Shouto nunca le habían gustado para nada los circos. Simplemente le causaban miedo, y muchas dudas, odiaba los circos en sí.

¿Qué tal que se robaban los niños para reclutarlos?

O bien, los mismos integrantes de "Los divertidos circos" se comían a los bebés indefensos.

No entendía como sus hermanos, sean niños, adolescentes, adultos siempre estén emocionados de ir, era algo que debían temer y no ir. 

Aún si siempre le invitaban, no iría. Ni de loco, estaban en el mes de Octubre, donde las cosas paranormales pasaban y quien sabe, si iba y lo secuestraban las autoridades no lo buscarían por que estaban muy ajetreados con otras cosas. ¡Ja! ¡Él no iría ni por que su vida dependiera de ello!

Ciertamente era distraído y dejaba pasar muchas cosas importantes, pero que esos malditos circos se queden como un mes en los lugares, ¡Oh, por supuesto que no se le olvidaría!

Y en esas épocas, sus hermanos estaban insistiendo mucho para que fuera, y no encontraba la razón, no es como si desde hace quince años negando el ir, ahora iba a querer disfrutar de esos espectáculos. Era tonto pensar eso.

Momo e Iida a cada rato estaban organizándose para planificar una salida e ir al circo, y no es como si estuviera de entrometido, pero siempre que estaba él cerca, ellos elegían ese momento para imaginarse "Las cosas fantásticas que pasaban allí" . Le hartaba, demasiado.

Ese día, Jirou, Yaoyorozu y él fueron a sentarse en la misma mesa donde estaban el grupo de Midoriya y platicar entre sí, o al menos ellas, por que él solo iba a algo.

Estaba enamorado de Midoriya desde que recuerda. 

Lo conocía desde que eran unos niños, y la amistad que tenían era muy cercana. Aunque descubrió que estaba perdidamente enamorado de él cuando tuvo dieciséis, y desde esa edad, no podía dejar de fantasear con toda una vida juntos y más.

Pero eso iba a ser imposible, por que Midoriya quizá era el hombre más hetero de todo su grupo después de Kaminari y Mineta, tenía de novia a Uraraka Ochako y eran asquerosamente melosos.

—Que mal que Ochako-chan no podrá ir. —comentó Asui con la mirada decaída y la castaña la animó.

—¿No irás, Uraraka? —preguntó Todoroki.

La castaña negó con una sonrisa y un sonrojo en sus mejillas.

—No me gustan, me dan miedo.

—Pero habrá también una feria, podemos ir y yo tampoco entro. Hay que divertirnos todos, Uraraka-san. —dijo comprensivo el pecoso e intentando convencer a la de ojos chocolate, quien negó.