XX|| Sin respuestas ni palabras

584 28 6
                                    

Camine hasta mi auto y me cruce de brazos apoyándome en el beetle blanco que me pertenecía. Zayn me siguió en todo momento y cuando llegamos a mi auto miro alrededor. Estábamos solos, ningún estudiante estaba por esa área del estacionamiento y era relativamente silencioso, perfecto para discutir algo como esto.
Ninguno de los dos se atrevía a hablar, solamente nos veíamos a los ojos esperando algo del otro. Él me miraba con miedo, como si me lanzaría a tirarle la mierda que merecía encima, mientras yo lo miraba severa, esperando que él se disculpara… Pero realmente mi subconsciente me gritaba que me lanzara a sus brazos y le rogara que me dijera que todo era real, que sus palabras no eran efecto del alcohol y besarlo.

-Mónica-hablo en un suspiro y paso una mano por su perfecto copete que empezaba a deformarse por la cantidad de cabello que tenía, necesitaba un corte. Sus ojos vagaron desde el suelo hasta mis ojos pero no se mantenían, estaba arrepentido y avergonzado, lo podía notar en su mirada y en el movimiento nervioso de sus manos- Lo siento, en verdad siento haber hecho ese show en tu casa el viernes. ¡Dios! En verdad no se qué sucedió, estaba en casa con mi novia… Pasamos un rato juntos pero luego ella se fue algo enojada-suspiro como si le doliera el recuerdo. Yo sabía el porque y dolía como la mierda, no quería volver a pensar en Vanessa y Zayn desnudos o semi desnudos a punto de tener un encuentro sexual- Luego solo recuerdo abrir las vitrinas donde guardo mis vinos y vodkas… Lo demás ya parece tan confuso e irreal. El sábado al despertar tenía un jodido dolor de cabeza y algunos vagos recuerdos de ti, de tu padre… Incluso de un perro, pero nada es claro y por eso creía que había sido un estúpido sueño-exhalo cansado de hablar dejando de mover sus manos y manteniendo su triste mirada sobre mí, pidiendo perdón con ese brillo en sus ojos y un puchero amenazando en formarse en sus labios-
-¿No sabes que me dijiste ni que hiciste?-arquee una ceja, manteniéndome firme y dura. Estaba tan entrenada ya para no tener lastima por un hombre, preparada para esos ojos llenos de arrepentimiento y lagrimas falsas amenazar con salir. No había mejor pañuelo que un perdón y mentira más grande que el dolor en sus palabras, eso había aprendido y seguía firme que así eran los hombres-
-Yo…-liberaba algo de aire pero retenía buscando las palabras. Sus manos se movieron como tratando de encontrar los recuerdos- No le respondía a tu padre, tenía miedo… Él estaba muy enojado y asombrado, y no quería alterarlo, espero no haber abierto mi maldita boca-suspiro y se cruzo de brazos para dejar de moverlos por el nerviosismo. Su mirada estaba en el vacío mientras recordaba- Me acuerdo que llorabas en el auto, solo… Solo sé que llorabas pero no sé porque-sonaba tan dolido al decirlo, joder, mi cuerpo empezaba a fallar en mantenerse firme y mis ojos adquirían brillo por lagrimas- lo último que recuerdo es dormirme en el sofá, estaba llorando… Sí, me dormí llorando y no sé porque, no sé que dije o dijiste pero-rasco su cabeza liberando sus brazos pero sus músculos estaban tensos. No parecía tener vergüenza al decirme que había llorado, tal vez simplemente porque no sabía que había sido causa de mi rechazo-
-¿Solo eso?-interrogue, apretando mis manos en un puño mientras sentía mis uñas incrustarse en mi propia piel. <<Debes ser fuerte>> me amenace-
-Solo eso-aseguro y me miro a los ojos, su mirada cambio a terror entendiendo mi indirecta y dio un paso hacia atrás- ¿Qué he dicho, Mónica?¿Qué hice?...  ¿Tu padre sabe quién soy?-pude presenciar su piel pálida y como tragaba con esperanza de tragar el nudo que se formaba en mi garganta-
-Mi padre cree que eres un amigo de Louis…-aparte la mirada y suspire, vacile en si decirle o no. Tenía dos opciones pero ninguna me parecía la correcta, ambas me perjudicaban y estaba harta de salir lastimada por culpa de un hombre, estaba harta de que un par de ojos bonitos me traicionaran siempre… Sería la segunda vez y con la primera vez había aprendido la lección, Matt había destruido todo en mi y cada fibra de mi cuerpo aun se sentía patética al recordar cómo me deje de él y sufrí por él- Solo hablaste de porque se enojo Vanessa contigo y en tu casa me pedías que me quedara contigo-suspire y relaje todo mi cuerpo, tratando de retener las malditas lágrimas que empezaban a ser mis fieles acompañantes-
-¿E… En verdad? ¿Solo eso?-bajo un poco la mirada para encontrar la mía y tuve la sospecha que él tenía la “certeza” incierta de lo que había dicho. Solo asentí y saque mis llaves- No espera, no te vayas… Mónica, por favor, necesito saber y también necesito tu perdón, en verdad lo necesito-me persiguió al otro lado del auto mientras caminaba a paso firme al lado del conductor. Justo antes que mi mano abriera la puerta la suya tomo mi antebrazo y lo levanto haciendo que quedara junto a mi rostro y nuestras miradas se encontraran. ¿Por qué todo tenía que ser tan de película, tan dramático y doloroso para mí? Podía simplemente mandarlo a la mierda e irme, podría haber hecho eso desde un inicio y no hubiera drama. Empezaba a pensar cuanto me quejaba de mis decisiones, cuanto me quejaba de mi pasado y deseaba cambiarlo-
-¿Sabes? debo empezar a aceptar las cosas y vivir con ello, me lo propuse y no lo estoy cumpliendo-hice que soltara mi mano y me quede quieta, dejando que la poca distancia que nos separaba fuera hielo entre nosotros, frio y transparente- Me has dicho que me amas, que ya no quieres a Vanessa… Me has dicho lo idiota que has sido y que me querías contigo. Has intentado besarme, me pegabas a tu cuerpo besando mi cuello y yo te he rechazado porque estabas ebrio, Zayn-di un paso más hacia él y pude sentir una electrizante furia cubrir mi cuerpo junto a un calor incontrolable a causa de la cercanía que tenía a él- Tal vez tú te estés preguntando porque demonios no me acosté contigo, claro, tú me crees una puta y una atrevida pero no me acostaría con alguien ebrio, mucho menos mi profesor 10 años mayor ebrio-puse mi dedo índice en su pecho- tú, Sr. Malik, debes empezar a aprender que no siempre tendrás el perdón solo por ser tú, que te has equivocado, porque que no eres perfecto y hoy cruzaste una línea importante… Tu gracia se ha vuelto un problema con mi padre y ahora has dejado a mis amigos preguntándose qué demonios pasa entre nosotros. Estaba llorando en el auto por todo lo que me decías, yo sabía que eran solo mentiras y mentiras, y si al caso eran la verdad eran nada más que palabras-suspire y me aleje finalmente de él. Sus ojos estaban bien abiertos pero llenos de sentimientos horribles, sus cejas se arqueaban en su frente y sus labios estaban semi abiertos, totalmente paralizado por lo que decía- Eso paso el viernes y por ello estoy tan enojada contigo. No te perdonare Zayn, no pretendo hacerlo hoy ni nunca. No mentiré, quiero hacerlo, quiero decirte que no hay problema y largarme a casa tranquila, dejando todo bien entre nosotros… Pero no lo mereces porque solo has traído problemas a mi vida, directa o indirectamente, y te has comportado como un idiota conmigo. Yo tampoco merezco tu perdón. Ten dignidad y lárgate con tu novia-Lo aparte simplemente, asombrada de mi misma. No habían lagrimas ni temblores nervioso, no estaba caliente de la rabia ni tenía comezón en la cabeza como cuando tenía esas sensaciones tan mierda controlándome-
-¿Tu qué sientes por mi?-fue lo único que salió de sus labios. Lo mire por unos segundos y negué-
-¿Es lo único que me dirás?-inhale una buena bocanada de aire y entre a mi auto, encendiendo el motor-

Sr. Malik Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon