"Heridas"

Tarde libre

[Capítulo corregido]

- ¿Por qué nos haces esto? – pregunte

-Amor dime que estamos pagando- dijo mi madre entre lágrimas

Me levanté del piso con intención de hablarle más cerca de lo habitual y me puse enfrente de él su pecho subía y bajaba con fuerza.

-Papá por favor, dime porqué eres así con nosotras que cambió en ti- solloce

- ...

-Por favor- dije llorando- yo te amo eres mi padre, pero dime, ¿por qué haces esto?

Con sus grandes manos acuno mi rostro y con sus pulgares limpió los caminos de agua salada que se alojaban en mis mejillas, podía ver a través de sus ojos una pizca de amor hacía nosotras, pero era tan pequeña aquella pizca. Se levanto del piso con dificultad debido a que se encontraba ebrio aun y cuando logro ponerse de pie salió de la casa sin contestar a mi pregunta.

Llevé a mi madre a su cama para que descansara, traté sus heridas con lo que había en el botiquín.

- ¿Hija? - dijo mi madre mientras yo guardaba todo

-Dime

- ¿Por qué eres así con tu amigo ese que vino a verte? – pregunto con curiosidad

- Mamá yo no puedo tener amigos y lo sabes

-Pero querida eso ya paso- dijo tomando mi mejilla

-Aunque eso ya haya pasado mamá, mira la vida que tenemos no puedo convivir con alguien cuando mi vida es esto sabes que tengo muchos problemas los cuales no me dejen convivir con los demás

-Lamento la vida que te estoy dando hija- dijo llorando

-Mamá por favor, no te pongas así no es tu culpa

-Es que he permitido que ese hombre te pusiera una mano encima

-Mamá yo lo hice porque no iba a permitir que te golpeara y prefiero que me golpee a mí que a ti- dije tocando su cabello- yo te amo madre y prometo sacarte de esto

-Te amo hija

Mi madre se había quedado dormida en su cama así que me quede a la espera de Josh para servirle la cena, después de una media hora llego.

- ¿Y tu madre? - dijo mirando el lugar

-Está en cama descansando, ¿quieres cenar papá?

-Es extraño que me digas así

-Eres mi padre y aunque hagas lo que hagas... sé que mi papá sigue adentro solo necesito encontrarlo- dije abrazándolo

Sus manos se posicionaron en mi espalda me ha correspondido el abrazo no pude evitar llorar ante aquel acto, él era mi padre a pesar de todo y el necesita ayuda, necesita cambiar y veré como ayudarlo, pero, aunque estemos teniendo este momento tan lindo sé que mañana volverá a ser el padre violento.

[...]

Me desperté temprano como todos los días solo que hoy es sábado, decidí salir temprano de casa buscare algún trabajo para ganar dinero y poder ayudar en casa a mamá. Estaba sentada en una banca enfrente de un parque tomando un poco de mi limonada que había comprado en un pequeño puesto a mi lado se encontraba una señora de más o menos 30 años, se giró a mí y dijo.

- ¿Estas bien? - dijo mirando mi rostro

- ¿Me dice a mí? - pregunte confundida

- Si a ti pequeña

- ¿Si todo está bien conmigo, por qué lo pregunta?

- Tienes tu rostro lleno de golpes

- ¡Oh! eso... fue una pelea- mentí

Me levante del lugar y me fui, los golpes aun eran visibles ahora están de un tono verdoso espero se quiten pronto, iba caminando por la calle escuchando música con mis audífonos en un momento una chica golpea mi hombro provocando que mi limonada se regara.

- Ten cuidado por donde caminas- dije gritándole a la persona

- Oh lo siento mucho querida Jess- dijo sarcástica

- Madison

- Que haces por aquí, ya te dan dinero para salir- menciono riendo

- Siempre me lo han dado, otra cosa es que no me lo gaste en cosas que no necesito, por ejemplo, como la cantidad de ropa que llevas en aquellas bolsas

- Eso es envidia cariño

- No te tengo envidia, solo recuerda que dentro de algunos meses esa ropa ya no te quedara- dije obvia

- ¿Como sabes eso? - dijo asustada

- Es una ventaja ser una persona invisible- dije guiñando el ojo- bueno Madison espero te alivies pronto y que encuentres al padre de tu hijo

- Oh ya lo encontré

- ¡Me alegra! - dije sonriendo falsamente

- Es Derek

- Jajaja, es ¿en serio, Derek? él es nuevo nadie te va a creer, ay, Madison te deseo suerte

Dije dando media vuelta, ella aún se quedó parada y Derek venía de frente nuestras miradas conectaron un pequeño nerviosismo recorrió mi cuerpo, esta vez no me dijo nada y lo agradezco cuanto más se aleje de mi será mejor.

Eran las 11:30 y no sabía muy bien que hacer así que decidí ir a un pequeño café para leer un rato o realizar algunos bocetos. Llegue minutos después, pedí el café que quería y me senté en una mesa en la esquina del lugar saque mi libreta con algunos de mis lápices y empecé a dibujar cosas que me vinieran a la mente como personajes, escenas de alguna película, etc.

[...]

Terminé de pagar todo lo que había consumido y pensé que ya era hora de volver a casa eran las 2:30 de la tarde tampoco quiero dejarle todo el trabajo a mamá, subí las escaleras para llegar al apartamento metí la llave en la cerradura y entre al lugar.