"Heridas"

Extra 2: Confortar

[Capítulo Corregido]

Arrojo los papeles a un lado de mí mientras masajeo mi sien con algo de rudeza, el trabajo me ha mantenido sometido a una gran presión que me causa dolores de cabeza insoportables, tengo cuidado cuando el malestar comienza a hacerme molestar porque ante todo debo mantener la calma y respetar a quien quiera que este frente a mí.

-Hanna se ha dormido- aviso mi esposa entrando a mi oficina sosteniendo una taza de café la cual deposito en mi escritorio

- ¿Estás bien? - pregunto preocupada

-Solo estoy cansado- respondí, hundiendo mi rostro en el espacio entre su mandíbula y hombro

-Iré a preparar la tina, necesitas relajarte- opino decidida

-Muy buena idea- sonreí para después besar sus rojos belfos

Se levanto de mis piernas, acomodo su vestido y acto seguido salió de mi oficina a preparar el baño. Una vez que me encuentro solo doy un largo suspiro y sujeto mi cabeza con ambas manos mientras realizo ejercicios de respiración para relajarme.

Una pequeña gota de agua estalla en el cristal que protege la fotografía que ahora mismo sostengo, posiciono sutilmente la yema de mis dedos sobre el rostro de mi hermana menor sintiendo como mi corazón se vuelve a partir en mil pedazos, como todo el tiempo, aprieto mis manos contra el marco color negro de la foto resistiendo el sonoro llanto que se mantiene acumulado en mi garganta.

- Papi ¿estás bien? - pregunto una linda vocecita proveniente del marco de la puerta

-Hola cielo, creí que ya estabas durmiendo- hable desde mi lugar mientras seco mis lagrimas con el dorso de la camiseta azul marino que llevo puesta

-No tengo sueño- musito caminando hacia mí sin dejar de abrazar su pequeño peluche en forma de ballena color gris con lindas chapitas rosas

- ¿Otra pesadilla? – pregunte cargándola hasta depositarla en mi muslo

-No papi, no tuve ninguna pesadilla- respondió pensativa -Yo soñé con una linda chica castaña

- ¿De verdad? – pregunte sorprendido por lo antes mencionado – Y ¿recuerdas cómo era ella?

-Cabello largo y con onditas, llevaba un vestido morado, una gran sonrisa- respondió con entusiasmo -No recuerdo mucho, pero ella se sorprendió cuando me vio y dijo "cuanto has crecido"

-Suena como una princesa- hable soltando una leve risita

-Lo era papi, parecía un linda princesa- sonrió -Así como yo

-Hanna ¿Qué haces despierta? – pregunto mi esposa con los brazos cruzados desde el pasillo

-Solo quería decirle algo a papi que me pareció muy importante- levanto su manita para despedirse de mi y correr a su habitación