〖 Vigésima Quinta Alma〗

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『❝Nada que un buen cóctel de pastillas con alcohol no resuelva❞』

Cuando la puerta fue abierta bruscamente, las bisagras sonaron espantosamente altas.

El ruido estridente hizo que Jungkook despertase de la ensoñación en la que había estado durante el tiempo en el que Rain había estado dentro de la habitación, que ya no sabía si había sido poco o bastante. El ambiente estaba más frío, por lo quesuponía, que ya estaba haciéndose tarde.

─Rain, ven aquí ─Ordenó un hombre tras ella, el cual Jungkook no alcanzaba a ver totalmente.

La pelinegra negó y fue directamente hacia donde él estaba, haciéndolo sobresaltar por el brusco cambio de actitud.

El lobo de Jungkook estaba sintiendo la ira de la alfa y lo único que quería era calmarla un poco, por lo que sin pensarlo, su omega sumisamente dejó salir un poco de su olor y Jungkook ladeó su cuello para que éste saliera aún más.

La mayor se acercó a Jungkook una vez lo ubicó y gruñó al hombre enojada, lista para atacar como toda una fiera. Jungkook no sabía qué había pasado, pero ya no sabía si quería hacerlo. Rain le estaba asustando un poco, pero al parecer el intentar calmarla con su aroma estaba funcionando... un poco.

─Estás siendo irracional ─Dijo a quien Jungkook pudo reconocer como SeungHyun.

─¡Estoy siendo justa! Por la grandísima puta madre ─
El hombre intentó acercarse a ella, pero ésta le gruñó─. Acérquese y le rebano la jodida garganta.

─No hay necesidad de ser agresivos.

─Jungkook, nos vamos ─La alfa inmediatamente se levantó de donde estaba y tomó la mano del omega para jalarlo, pero una voz le impidió irse y llevar a cabo su cometido.

─Rain... ─El alfa que salió de la habitación no era nada más ni nada menos que Jimin.

─No.

─Por favor..., Rain.

─¡No, joder! ─La mujer se levantó, dispuesta a enfrentarlo, sabiendo que ganaría sin problemas, pero una pequeña manita le impidió que lo hiciera.

Cuando volteó, se encontró con la carita ingenua de Jungkook, esperando una respuesta o una explicación que, muy probablemente, no iba a llegar de su parte. El omega parecía aterrado y su aroma dulzón estaba por todos lados ahora. Ella tuvo el impulso de abrazarlo, pero no lo hizo.

─Noona, está bien ─Sonrió tiernamente, haciendo que el corazón de la pelinegra doliese momentaneamente─. Yo prometo que mañana puede ir a verme, ¿Verdad Hyung? ─Su pequeña y entre-cortada voz era una súplica a la que Jimin no se pudo negar.

Bufando, Rain lo soltó y lo miró por unos momentos con un dolor que Jungkook no supo interpretar, y soltando maldiciones por lo bajo, se alejó y salió de ese lugar lo más rápido que pudo, sabiendo que si se quedaba por más tiempo, no sería capaz de dejar a Jungkook.

Jimin soltó un suspiro cansino y miró a Jungkook, quien tímidamente se acercó a él, volviendo a dejar salir su aroma. Incomprensiblemente para el alfa, su lobo interior se calmó de golpe, y él sólo quería respirar el dulce olor que emanaba. Era bastante suave, delicioso.

El omega estaba sonrojado, no podía creer que sehabía tomado el atrevimiento de hacer eso con Jimin, ¡Diablos! El alfa desde siempre había sido su sueño, e imaginó de todo menos que algún día estuviera de esa manera con él.

Sobre todo, laparte más impresionante de todo ello, era que éste no lo había apartado, y que el lobo de una manera u otra, se había adaptado a él.

Almas Gemelas¹ JIKOOK [Adap]Where stories live. Discover now