082

340 27 2
                                    

ᴀᴜsᴛɪɴ ᴍᴇɴᴅᴇs

No puedo y tampoco quiero soltarle la mano a Sky, quiero permanecer así por el resto de mi vida. Abrazados sin decir ninguna palabra, solo escuchando nuestras respiraciones y sintiendo una paz interior impresionante, pero no puedo, es hora de que los dos volvamos a la realidad aunque sea lo que menos queramos. Es momento de que mis pies vuelvan a tocar el suelo y hacerme entender que tengo una maravillosa novia y la pelirroja solo es mi mejor amiga, aunque en estos seis días no pareciera para nada.

—Tengo que volver al tour —susurro con miedo y mi corazón latiendo demasiado rápido.

—Lo sé —hace una pausa— y con Malu.

Trago saliva al escuchar ese nombre y sintiéndome la peor persona del mundo, estoy seguro que lo soy por mi forma de actuar y las acciones que tomé, no merezco a ninguna de las dos chicas, no merezco nada y aún así la tengo, sabiendo muy bien que si muero de inmediato iría al infierno, me siento terrible.

—Si...

—Todo termina aquí —habla Sky sin quitar su cabeza de mi pecho.

—Si.

—No sé ni si quiera lo que hicimos, no pensamos, nos dejamos llevar por el momento y sé que estuvo mal, tienes novia y lo que vivimos no tuvo que ver sucedido —dice sentándose frente a mí con una seriedad que jamás le había visto y sin despegar su penetrante mirada de la mía.

—Lo sé.

—No sé ni si quiera que decir, solo que no te quiero perder como amigo, eres parte fundamental de mi vida...

—Y tú de la mía, nos conocemos desde que éramos bebés y no nos hemos separado desde entonces, por eso no quiero hacerlo ahora, sé que tal vez no es lo mejor para nosotros con lo que ocurrió, pero es mejor quee... —me detengo, no puedo decirlo, me resulta imposible seguir hablando y pedírselo.

—Es mejor olvidar lo que pasó y actuar como si nunca hubiera sucedido —y como sucedía siempre desde que tengo memoria, ella terminó diciendo lo que yo tengo el valor de decirlo.

Afirmo con la cabeza y los ojos llorosos, la tomo del rostro con delicadeza e intentando que cada una de sus facciones queden completamente guardadas en mi memoria, cuando nuestros labios rozan, cierro los ojos y nos besamos con una enorme tranquilidad, suplicando que nunca termine nuestro último beso.














Afirmo con la cabeza y los ojos llorosos, la tomo del rostro con delicadeza e intentando que cada una de sus facciones queden completamente guardadas en mi memoria, cuando nuestros labios rozan, cierro los ojos y nos besamos con una enorme tranqui...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Endless dream Donde viven las historias. Descúbrelo ahora