Capítulo 2. 🍦

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Lujos.

J O A Q U I N

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J O A Q U I N.

Salí corriendo de mi casa, iba tarde al trabajo y ese no es un lujo que puedo permitir. Desde que mi padre nos abandonó al enterarse que era un omega nuestra situación económica no es la mejor.

Para mi madre es difícil encontrar trabajo por ser una omega, afortunadamente una alfa muy amable la contrato para hacer la limpieza de su hogar, la paga es buena pero no es lo suficiente para mantener a tres personas, pagar la escuela de mi hermana menor y la parte que la beca que tengo no alcanza a cubrir.

Yo trato de ayudar a mi madre trabajando en una heladería con una señora beta, quien me dio el trabajo por mi olor diciendo que atraería a los clientes.

Y a mi me encanta trabajar ahí ya que mi olor se confunde fácilmente, ser omega no es fácil. Somos los mas propensos a violaciones o a ser utilizados como máquinas para dar hijos, incluso años atrás eran vendidos por sus alfas para que se casaran o fueran usados sexualmente.

Pero es aun peor ser un omega hombre, las miradas de todos siempre están puestas en ti ya sea con desagrado, asco o deseo. Para la sociedad está muy mal visto que un hombre sea omega y una mujer sea alfa, quizá porque son pocos los casos.

Durante años he sido el claro para las burlas y los golpes, más de una ocasión me golpearon hasta dejarme inconsciente.

Mis únicos amigos son Niko, un alfa muy amable; Elaine, una omega muy fuerte y con un carácter poco común los de nuestra casta -es novia de Niko-. Y Azul, una alfa que al igual que yo recibió durante años golpes y burlas, con la diferencia de que ella si se defendía. Nosotros éramos los cuatro mosqueteros -a palabras de Niko-.

Los alfas en su mayoría se sienten asqueados con omegas hombres, así que después de aclarar mi sexualidad deduje que me quedaría solo el resto de mi vida. A menos de que encuentre a mi destinado y sea uno de los pocos que no les importa.

Yo por el momento no estoy interesado en algún alfa, todos los que conozco son unos idiotas que se creen superior a los de mi casta y creen que los omegas están a su disposición 24/7 –a excepción de Niko y Azul-.

¿Los celos? Son una de las peores cosas que me han pasado.

El celo viene cada dos meses y dura 3 días, en los que sientes el mismísimo infierno. Duele el cuerpo, sudas y dejas lubricante por todos lados. Además son días en los que no puedes salir.

Se puede interrumpir con pastillas o inyecciones pero son difíciles de conseguir por su elevado precio, pocas son las veces que he tenido acceso a ellas. Y a falta de un alfa en mi hogar, Niko o Azul se encargan de dejar su olor por toda la casa para marcar territorio y evitar que un alfa entre.

Corrí todo lo que pude, porque aunque la distancia entre mi casa y la heladería no es grande si no lo hago llegare tarde. La señora García es muy amable pero bastante estricta, si llegas tarde es seguro que te descontara de tu sueldo.

Ice Cream l EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora