𝐭𝐡𝐚𝐧𝐤𝐬 𝐭𝐨 𝐲𝐨𝐮𝐫 𝐬𝐮𝐧𝐬𝐡𝐢𝐧𝐞 • 𝐥𝐢𝐩𝐬𝐨𝐮𝐥 | 𝐲𝐞𝐨𝐫𝐫𝐲

•☽• 30.- memories •☾•

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Aquel día Yerim le había pedido a su madre si después de la escuela podía irse a casa de las Ha y quedarse a pasar la noche, Jinsoul no se negó ante la petición de su hija; sin embargo, no se le paso por la cabeza que la menor había invitado a Jungeun ese día para que ambas mayores pudieran pasar toda la tarde juntas, después de todo nadie sospecharía que el pequeño rayito de sol aun estuviera ayudando en la relación de su madre con jungeun.

La pareja se encontraba sentada en el sofá de la sala viendo una película en netflix, aunque para ser sinceros, seria mas acertado decir que ambas se encontraban besándose cada cinco o siete segundos en lugar de dirigirles su atención a la pantalla del televisor, pero ¿cómo culparlas? habían estado una semana sin pasar suficiente tiempo juntas por estar ayudando a sus amigas que habían decidido comprometerse y pedirles ayuda para planificar la boda, por lo que tanto Jinsoul como Jungeun solo se habían visto para organizar la boda de sus amigas o cosas por el estilo.

— Lippie, ¿recuerdas la primera vez que hablamos? — Jungeun asintió ante la repentina pregunta de su novia, la había tomado por sorpresa que Jinsoul le hiciera tal pregunta de la nada.

— ¿A que viene esa pregunta?  — Expresó jungeun mientras abrazaba a la de cabellos negros por detrás, depositando un corto beso en la comisura de sus labios.

— No lo se, simplemente me puse a pensar en como el tiempo paso tan rápido desde la primera vez que hablamos, ambas solíamos ser completas desconocidas que nadie hubiera imaginado terminaríamos de esta forma —. Jungeun entendió a lo que su novia se estaba refiriendo, después de todo era cierto, ambas solían ser completas desconocidas y ni siquiera se dieron cuenta  del momento exacto en el que comenzaron a hacerse mas cercanas hasta que terminaron teniendo sentimientos por la otra.

>> ¿Nunca te haz puesto a pensar en la manera en que nos conocimos?

— No mucho, ¿por qué? — Expreso la de cabellos castaños sin dejar de abrazar a su novia y dedicarle una sonrisa.

— Por nada. Solo estaba pensando en el pasado y termine llegando a cuando nos conocimos y hablamos por primera vez. ¿Es raro, verdad? — Jinsoul parecía estar pensando demasiado en aquello, tanto que la de cabellos castaños se percató de la situación y no lo pensó dos veces antes de dirigirse a su novia.

— Si lo piensas detenidamente, podríamos decir que todo fue gracias a Yerim —. Jinsoul asintió ante las palabras de su novia, después de todo el rayito de sol había sido la principal fuente por la que ambas ahora estaban juntas.

El resto de tarde transcurrió normal para la pareja, si bien habían decidido pasarla juntas viendo alguna que otra película en netflix, al final se habían terminado decidiendo por salir a caminar mientras continuaban recordando cada uno de los momentos en que habían entablado una conversación e, incluso, cuando ambas terminaban por sumirse en un completo y absoluto silencio solo por el hecho de pensar que si decían algo iban a terminar poniendo incomoda a la otra.

Continuaron así por un largo tiempo hasta que ambas decidieron sentarse a descansar en un pequeño parque que habían visto hace no mas de cinco minutos.

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— ¡Hyejoo! ¡Ya te dije que no quiero! Deja de arrastrarme por todo el pasillo — Exclamaba a gritos la pequeña ranita forcejeando para que su mejor amiga la dejará irse de una vez por todas a su salón.

— Lo que dices es lo contrario a lo que quieres, además, no pueden estar sin hablarse todo el año escolar. En algún momento tendrán que hacerlo, y si no es por voluntad propia, sera gracias a mi —. Yeojin termino por hacerse a la idea de que la bebe lobo no iba a soltarla hasta que ella misma le prometiera hablar con Yerim después de todo lo que había ocurrido entre ambas, pero obviamente eso era algo que la pequeña de cinco años no estaba segura aun.

— Si yo hablo con Yerim, tu tienes que decirle a wonyoung que no te gusta! — La pequeña bebe lobo no tardo en soltar el agarre de su mejor amiga para dirigir sus manos hasta la boca de la menor procurando que nadie hubiese escuchado aquello.

>> Iugh! ¡Tienes las manos pegajosas!

La sonrisa en el rostro de hyejoo no tardo en hacerse notar debido a la expresión que tenia ahora Yeojin; ya que hace unos diez minutos que la bebe lobo había estado ayudando al club de repostería y, como era de esperar, termino probando cada una de las mezclas de pasteles que estaban haciendo.

— ¡Olly! ¿Qué haces? Pareciera que estás en una pelea por ver cuanto tiempo yeojin puede estar callada —. Expreso el pequeño rayo de sol llegando al lugar donde estaban sus dos mejores amigas, aunque claro estaba que para la pequeña ranita aun era nuevo escuchar a yerim llamarla por su nombre y no por alguno de los apodos que le había colocado cuando eran pequeñas.

— Nada. Es que yeojin quería saber porque mis manos estaban pegajosas, y no me creyó cuando le dije que era porque las del club de repostería me hicieron probar cada una de las mezclas que hicieron —. Expreso Hyejoo quitando sus manos de la boca de la mas pequeña para, luego de unos segundos,  dirigirse hasta el pequeño rayito de sol y recibirla con un abrazo mientras trataba de hacer que yeojin le dirigiera la mirada aunque fuera.

>> Ugh! ¡Ustedes dos! ¿No piensan hablar? Tenemos seis y cinco años, algo como enamorarnos no es la gran cosa, ni siquiera debería preocuparnos. ¿Podemos seguir siendo amigas como antes y dejar de lado cosas como el amor?

>> ¡Hagan lo que quieran! Cuando decidan dejar de actuar como desconocidas entre ustedes me avisan, hasta entonces estaré con Hae-Hae.

Una vez dichas aquellas palabras, la pequeña bebe lobo no tardo en comenzar a caminar hasta el salón de clases de su amiga con mechas grisáceas, manteniendo una sonrisa de victoria en su rostro por haberles dicho todo lo que tenía guardado a sus dos mejores amigas.

Ya pasados unos cuantos minutos desde que la pequeña Ha se había ido, tanto el rayito de sol como la ranita se encontraban en un silencio casi incomodo por parte de la menor, ninguna se atrevía a hablar con la otra luego de escuchar las palabras de su mejor amiga.

— Hyejoo tiene razón. Jin~ ¿por qué no seguimos siendo como antes? Aun tenemos toda la vida para entender el amor, no deberíamos preocuparnos por algo así ahora  —. Expreso el rayito de sol dirigiéndose a la menor con aquel apodo que le había colocado para el cumpleaños número cuatro de la menor.

— Porque yo si estoy segura de lo que siento, rimmie, y cada vez que te veo me duele aquí —. Yeojin llevo sus manos hasta su pecho y bajo la mirada rápidamente al percatarse de la expresión en el rostro de la pequeña Jung, tratando de negar sus palabras para que la mayor no se sintiera incomoda o algo parecido por su culpa.

>> No tienes que decir nada, entiendo que tu no estés segura y necesites tiempo, pero solo te pido que no me trates diferente, ¿si?

— Jin~ no tienes que pedirme algo así, después de todo sigues siendo la niña rara y ruidosa que se acerco a mi en el jardín aun cuando no quería hablar con nadie —. Dicho aquello, Yerim no dudo en abrazar a la menor y depositar un tierno beso en su cabeza antes de separarse y sonreírle como en los viejos tiempos.

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