Capítulo 136- La chica más amable.

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"Reeya deberías seguir adelante. Deja atrás a ese hombre cobarde". Ira notó la amargura en su mirada.

"Sobre seguir adelante, ya lo he hecho. Pero sobre encontrar el amor ... no lo sé". Aunque parecía tranquila, su cuerpo tembloroso filtró sus emociones.

Ella temía el amor. ¿Existe?

La niña sonriente ante ella demostró que sus dudas eran incorrectas. Sí, el amor existe. Ira encontró a su ser querido. Tal vez, no estoy hecho para el amor.

"Dijo que me ama quiere estar conmigo. ¿Por qué se casó con otro?" ella derramó sus sentimientos. Cuando todo salió a la luz también, la dejó paralizada por días. Ella no lloró, deambulando por la calle ese día.

"Ese hombre escoria no te merecía". Ella rugió.

¿Qué clase de hombre idiota es él, sin reconocer una gema como ella?

"No solo estaba casado, sino que también tenía una niña de cuatro años". Ella vio a la linda niña por primera vez, la dulce cosita la enamoró. Ella deseaba dar a luz a una niña como ella. Entonces su madre arrojó la bomba, ella era su hija.

Reeya tenía 24 años, a la edad que deseaba tener su propia familia.

Una vez que ella imaginó construir una vida con él, Hacer un bebé.

¿Que es lo que queda de ella?

Nada importa. Dejé ir mis sueños.

"Me hizo sentir sucio porque yo era el culpable. Solo porque mis colegas saben que no soy una chica así. De lo contrario, podría manchar mi reputación como amante. ¿Cómo me equivoco?" Ella apretó los labios, cerró los ojos con desesperación.

"No te equivocas aquí. Él siempre supo que sus padres no te aceptarían, ¿por qué comenzó el amor? Si no es lo suficientemente valiente como para enfrentar y defender sus decisiones, ¿cómo tienes la culpa?" ella gritó. ¿Por qué la autoculpa?

"Eres la persona más amable que he conocido en mi vida. Encontrarás a alguien mejor. Alguien hecho para ti. Quién te amará con sinceridad", su voz era cálida, le dio unas palmaditas en los hombros.

"Si no estuvieras embarazada, te arrastraría a un bar y gritaría mis quejas". Su expresión mejoró mientras se reía.

El bar le recordaba al hombre. Su primera aventura de una noche.

Nunca se imaginó a sí misma tan audaz como esa noche casi preguntando por él. Ella se inclinó para ocultar el sonrojo. Palmeó sus mejillas y evitó vergonzosamente los ojos de Ira.

"¿No dijiste que conociste a alguien?" Ira la atrapó luchando.

"No, es nada." ella sacudió su cabeza.

Llámala egoísta, pero Ira no admitió haber sabido sobre su hermano y Reeya. Ash sufrió muchas quejas. Ella no lo dejará sufrir una pérdida.

Te salvaré primero. Te ayudaré a juntarte. luego...

Renacer como MamáWhere stories live. Discover now