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—¡Adelante! —ordena Erwin.

Galopando, sujeté las riendas con fuerza y por fin, salimos de los muros. Mi mirada fue al cielo al instante, era impresionante que el muro María fuera un terreno tan grande.

—Atenta, Akira. —ordena Mike.

—¡Sí!

Seguimos adelante, sería una expedición de dos días. Iríamos a obtener provisiones para el muro Rose, pensé en tal vez ir por material para Ángel, era material que solo se podía conseguir aquí, pero no me atrevía a romper formación ni arruinar el plan. Las vidas de muchas personas estaban en juego.

Seguimos adelante un par de horas, todo mi cuerpo dolía un poco pero hasta ahora no habíamos visto titanes cerca, solo de lejos y gracias a las pistolas de humo, los esquivamos. El equipo tridimensional golpeaba contra mis piernas con tanto movimiento del caballo.

Entonces sucedió.

—¡Un excéntrico! —grita Misa desde atrás. Pude ver el rostro lleno de pánico de todos los novatos, incluyéndome. Alguien disparó la pistola de humo negro, tendrían que deshacerse de él o podría matar a alguien.

—¡Akira! ¡Vamos! —ordena Mike. Le miré incrédula. ¿¡Yo!?

—Mike. —Levi había bajado la velocidad hasta estar en nuestra altura. —No hagas una tontería...

—Estará todo controlado. —insiste sonriente. Me mira. —Vamos, Akira.

Movió su caballo de vuelta al titán, le lancé una última mirada a Levi antes de seguir a Mike. Tenía miedo de que algo sucediera, aunque tenía que confiar.

El titán excéntrico se distrajo con los dos caballos que salieron de la formación, en lugar de seguir al resto, nos siguió a nosotros. Mike galopa junto a mí.

—Sabes qué hacer, lo hiciste muchas veces en nuestros entrenamientos.

—¿Qué sucederá si fallo? —mi voz sale tímida.

—Yo estaré aquí para protegerte. —insiste. — ¡Ve!

Usé mi equipo tridimensional para saltar del caballo, había árboles alrededor para poder sujetarme bien. El titán excéntrico no me miraba a mí al inicio, enganché mi equipo a su brazo y me alcé en el aire, el titán me miró por primera vez pero era demasiado tarde.

Ahora puedo hacer algo por ti, Alex. Puedes morir en paz.

Grité mientras giraba en el aire cortando su cuello, un corte medio perfecto. Me subí a un árbol para observar el resto, el titán cayó de bruces contra el suelo, muerto. Lo malo era que toda su sangre empapó parte de mi ropa y cara, después de todo no sabía hacer un corte limpio.

Entonces lo vi a él, aunque toda la Legión siguió adelante, a unos metros lejos estaba Levi en su caballo observando todo. Pude apreciar su semblante satisfactorio, tomó las riendas y siguió adelante.

Sonreí, se quedó para cuidarme.

Un par de horas más de viaje y nos detuvimos para descansar, también para acampar. Estaba anocheciendo. Justo bajé del caballo y todos los novatos se acercaron, emocionados.

—¡Fue increíble! ¡Lo hiciste parecer tan fácil!

—¡Tu primer titán!

—Presumida. —ese fue Kimer palmeando mi espalda. Sonreí tímida, no estaba acostumbrada a sobresalir.

A unos metros de ahí, Hanji codeó a Levi quien observaba toda la bulla.

—Qué extraña forma de matar titanes, ¿no crees? Hasta creí que eras tú... —se burla. Levi rueda los ojos.

Entregar el corazón. |Levi Ackerman x OC| |Premios Wattys 2019|Where stories live. Discover now