—Tío, quiero ir al cine.
Todos se giraron de lo que fuera que estaban haciendo para mirar a Gabe, que estaba golpeándose las piernas con las manos y saltando en el sitio, súper emocionado por su propia idea.
—Pues ve, tonto —respondió Killian a su lado, cambiando de canal en la televisión.
Jake se rio entre dientes al lado de Bianca y cogió otra patata frita de la bolsa que estaban compartiendo en la barra de la cocina.
—No —le dio un golpe en el brazo a su amigo. Archer se apartó un poco a su otro lado, probablemente con miedo de recibir él también, y le dio una calada a su cigarrillo con una sonrisa divertida—, pero quiero ir con todos. He visto que hay una muy buena ahora. Se llama Moonlight, creo que ha ganado varios Óscars y todo.
Bianca puso una mueca.
—Es buena idea, pero justo esa la vi el otro día.
Gabe puso un puchero y miró a Bianca y luego a Ione, que había dejado de tocar una guitarra que le había robado a Archer para prestar atención a la conversación. Estaba tirada en el suelo.
—¿Es buena?
—No sé, yo no la he visto —respondió su amiga.
Bianca miró a Abel inmediatamente, y se dio cuenta de que él había entendido lo que eso quería decir porque desvió la mirada al suelo y apretó la mandíbula mientras expulsaba el humo de su cigarro por la boca con casi furia.
—Anda, ¿y con quién-? ¡Ah!
Gabe cerró la boca cuando Killian le golpeó con el mando.
—A veces pienso que eres más listo de lo que pareces, pero luego abres la boca —le increpó.
Bianca miró a sus patatas y luego a Jake, que le estaba clavando esos oscuros ojos con curiosidad. Supuso que habría algo de lo que quería opinar sobre el tema, pero no creyó que ese fuera el momento oportuno.
Soltó la patata. Se le había quitado el hambre.
—Bueno —siguió Gabe, como si nada—, pero el caso es que quiero hacer cosas. Ya que tenemos algunas semanas de vacaciones quiero aprovechar, como una persona normal.
Archer bufó.
—"Como una persona normal", dice. Como si te pararan treinta veces en cada calle.
—Una gira mundial y ya se le sube el ego —bromeó Jake—. No le interesas a nadie, Gabe.
Gabe miró a los dos con una expresión de desazón tan adorable que Bianca quiso ir a abrazarle, pero le salió reír.
—Hay muchas veces al día que me pregunto por qué siquiera sigo hablando con vosotros.
—Hombre, Gabe —intervino Abel, por primera vez en toda la conversación. Tenía un tono divertido, por suerte—, es que te estás montando planes en la cabeza y no somos capaces ni de organizar bien una fiesta.
—No soy yo el que se ha puesto a hacer de todo menos organizar. Al menos pienso algo.
Abel arqueó una ceja y sonrió un poco. Estaba sentado en una silla al lado de una ventana, algo recostado y con el cigarro colgando de los dedos de forma relajada. Llevaba una gorra hacia atrás en el pelo. En ese momento, a Bianca le pareció el epítome de la confianza. Y, Dios, cómo le atraía ese rollo.
—¿Me ves haciendo algo, idiota?
—Vale —Ione dejó de nuevo de rasguear las cuerdas de la guitarra, y miró a los dos desde el suelo delante del sofá. Dio la vuelta a la guitarra y apoyó los antebrazos en el cuerpo de ésta—, pues vamos a dejar de hacer el tonto y, de hecho, planear. ¿Qué os parece?
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Sublimación (Evitación parte 2)
RomanceSEGUNDA PARTE DE EVITACIÓN. NO LEER SI NO SE HA LEÍDO LA PRIMERA (o quieres comerte spoilers o no enterarte de nada) Bianca consiguió superar sus miedos y lanzarse de una vez, intentarlo con Abel después del tira y afloja que ha sido toda su relac...