Capítulo 43 "Celos"

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Nada ni nadie podrá cambiar lo que ya está escrito....

No decía absolutamente nada, solo me miraba sin ninguna expresión. Sentía nervios, no quería que se molestara conmigo, no ahora.
Removió un poco su cabello y habló, sentí mi corazón salir del pecho.

—Crees que basándote a otro vas a darme celos—dice irónico. Lo único que lograste fue darme una muy mala impresión de ti, ahora veo que te besas con cualquiera, tal vez pensé que eras diferente, pero estuve totalmente equivocado.

—Sabes que no soy una fácil, no debes pensar eso de mí —dije un poco enojada.

—Tú misma me diste esa impresión al besarte con ese tipo—dijo. Pero tranquila, es tu vida no debo meterme en eso, no te preocupes, al fin y al cabo no tenemos nada y sé que nunca tendría nada contigo, no me imaginaría lo que hicieras a mis espaldas.

Mi mano quedó impactada en su mejilla, dejando marcada mi mano es esta.

—¡No me trates así?, ¡Nunca más volveré a permitirlo!–dije y mis lágrimas comenzaron a fluir. Si, me equivoqué, pero lo hice para que sintieras celos, porque te amo y quiero que lo que haga te importe así sea un poco. No soy así, nunca debí hacer eso, pero quería que admitieras que sentías muchos celos, que no seas un cobarde de no decirlo, a mí no me gusta Jayden en lo más mínimo, es sólo mi amigo pero si quieres pensar eso de mi, piensa lo que se te de la gana—dije y traté de guardar mis lagrimas, no quería llorar frente a él. Me voy sola

Cuando estaba apunto de irme me tomó del brazo y me pegó a su pecho, alzó mis rostro y... me besó, me besó con fuerzas, mi cuerpo comenzó a sentir corrientes eléctricas, jamás cambiaría los labios de Christopher por los de alguien más, con esto me es justo y necesario. Sus manos bajaron a mi cadera mientras acariciaba esta, mientras que las mias estaban en sus cabellos sedosos, tocando de estos.

—Siento muchísimos celos al verte con este tal Jayden, porque me gustas muchísimos, demasiado.—dijo en medio del beso. Verte besar con él hacía que todo mi cuerpo sintiera ira para romperle la cara, me diste tu virginidad, eres mía—dice y muerde mi labio inferior con fuerza, sacando un poco de sangre.

—Toda tuya, Christopher —Dije y me miró fijamente a los ojos.

—Al carajo cuando te dije que no te follaría en mi auto, lo voy a hacer —dijo y sentí mis mejillas arder.

Salimos del trance y subimos al auto, él me miraba con deseo mientras acariciaba mis piernas. Al estar un poco alejado de el circo, Chris paró y quitó su cinturón al igual que yo. Fui a la parte trasera del auto y después él.
Me senté a horcajadas de él y besé sus labios. El pasaba sus manos por todo mi cuerpo, para después posicionarlas en mis nalgas, dando leves azotes a estas. Quitó sus labios de mi boca y fue a mi cuello, mientras con sus manos desabotonaba mi camiseta, yo jugaba con la hebilla de su cinturón, quería sentirlo dentro de mi, aunque doliera. Al quitar completamente los botones abre mi camiseta, y se lame los labios al ver mi sostén ee encaje blanco con dorado, sacó mis senos sin quitar mi sostén y comenzó a jugar con ellos. Besarlos, lamerlos, pellizcarlos y morderlos. Me alzó un poco mientras bajaba sus pantalones y así lo hizo. Volvió a mi cuello y solo podía suspirar, esto se sentía realmente bien. Alzó mi falda y rodó mis bragas, acariciaba mi intimidad y mi clítoris con sus manos, eso era maravilloso, se sentía muy bien. Me alzó y sacó su miembro, fue a mi cuello y lo besó con fuerza, dolía un poco eso pero se sentía excitante.

—No estés tensa, Suss —Dijo y alineó su miembro a mi entrada.

—Trataré —lo besé fuertemente.

El sonrió en medio del beso y me dejó  caer sobre su miembro, dolía, dolía mucho. Hacía muecas de dolor pero solté un grito cuando entró por completo, el dolor era grande, quería que saliera de mí, podía jurar que dolía mucho más que la primera vez, demasiado.

—¿Estás bien?—dijo preocupado.

—Si, si solo que...—no pude terminar cuando se comenzó a mover, me alzaba un poco para que yo saltara encima suyo.

Debía admitir que dolía, pero quería que el disfrutara, hacía muecas de placer y soltaba suspiros a la vez, yo comencé a saltar repetidas veces, sabía que le encantaba ya que gemía, gemía mucho. Pero no podía decir lo mismo yo cuando cada vez que bajaba sentía un impacto en mi interior.
Llevó uno de sus dedos a mi clítoris y comenzó a estimularlo, eso se sentía bien. Saltaba y saltaba, pero... que siento, es como una oleada, unas punzadas en mi interior, el dolor seguía pero era soportable, comencé a sentir un cosquilleo demasiado agradable en mi interior, pero necesitaba más fricción, quería sentir mucho más ese cosquilleo. Christopher se retorcía de placer y más cuando comencé a saltar más rápido. Se sentía rico, demasiado rico, creo que este es el placer. Díganme si lo es porque se siente exquisito. Me tomó de las caderas fuertemente y me ayudaba a saltar con más fuerza, haciendo que nuestros sexos chocarán fuertemente, sentía un pequeño dolor, pero más era ese placer que me hacía volar. Sin pensarlo ni quererlo un gemido salió de mi garganta, juro que fue inevitable, este placer era realmente bueno, quería más, mucho más.

—Quiero más, se siente muy delicioso—dije mientras soltaba gemidos sonoros.

—Cómo estaba esperando que ya lo disfrutaras, así es más placentero entre los dos—dijo entrecortado y me beso fuertemente.

Yo seguía saltando, esto era único, ahora sí entiendo a esas parejas, me sentía muy bien. Una oleada se comenzaba a formar dentro de mí; se sentía muy grande, demasiado grande sentía que explotaría hasta que el teléfono de Christopher suena y el para de moverse. Lo busca dentro su bolsillo y maldice.

—¡Mierda!—dice.........

|•PROFECÍA•| //Christopher Vélez y tú//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora