Capitulo 36

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Ya habían pasado dos semanas, dos semanas desde que había decidido hacer efecto ese hechizo.
Sinceramente me sentía inquieta como si algo fuera a cambiarme la vida entera, pero al mismo tiempo como si eso estuviera bien. Esa extraña sensación hacia que me pusiera de nervios, pero pensándolo más a fondo no habría nada que cambiara todo mi entorno, o eso creo.

Me encontraba acostada viendo una de mis películas favoritas, estaba sola, completamente sola.
Liam se había ido hace un par de horas a no sé dónde, y las chicas habían salido a comprar algunas golosinas.

Suspiro estirando todos los huesos de mi cuerpo, por alguna razón me dolía todo el cuerpo y me sentía con una pereza horrible. Salgo del cuarto para dirigirme a la cocina, una vez en ella agarro una manzana para comerla a mordidas.
Un frío me hace doblar mi cuerpo en escalofríos, ¿Será que me voy a enfermar?
Le restó importancia y me dirijo a mi cuarto aún mordiendo la manzana, le estoy a punto de dar una mordida más pero la dejo caer por la impresión que tengo al ver a la persona parada enfrente mío.

— ¿Que haces aquí? — Es lo único que mis nervios me permiten decir.

Shit, ¿no se supone que el hechizo haría que no me encontrara? Ya veo que no sirvió de nada.

— Estas un poco distinta a la última vez que nos vimos. — Me da una amplia sonrisa y se acerca a mi, me tenso en el momento que sus labios chocan contra mi mejilla dejando un ligero beso.

— Si, yo solo me corte un poco el cabello. — Digo de manera rápida.

Lo veo sonreír tranquilamente. — Te tienes que ir. — Le digo lo más rápido que puedo. — En cualquier momento llegará Liam.

MENTIRA. Liam me había dicho que no pensaba regresar esta noche.

— Eso no es verdad, pequeña.

Frunzo mi ceño y lo miro asustada.
— ¿Como lo sabes? — El agarra unas cuantas prendas de mi closet para echarlas a una pequeña maleta que estaba al pie de la cama, ¿Ahora que trama? — ¿Que haces?

Me dirige una mirada fugaz y me sonríe, pero esa no es cualquier sonrisa, esa sonrisa fue algo melancólica, triste.

— Quiero enseñarte algo, y créeme que después de que lo veas no vas a querer regresar a esta casa.

— Pero...

— Solo confía en mi, solo esta vez. — Lo miro dudosa. — Por favor.

*****
No se en que rayos estaba pensando cuando decidí subirme a la camioneta de Warner.
Es que esta acción confirma mi teoría, no me falta un tornillo si no que me falta la ferretería completa.
Estoy segura que Home Depot no tiene la gran cantidad de tornillos que me faltan.

Muevo mis manos nerviosa y al parecer Warner lo nota.
— Tranquila, ya llegamos.

Miro a mi alrededor ansiosa. Enfrente de nosotros veo una gran y linda casa que es cubierta por árboles a su alrededor.

Volteo extrañada hacia Warner. ¿Que hacíamos aquí? — No entiendo, ¿Por que me trajiste aquí?

— Por que necesitas ver algo.

Han pasado más de diez minutos y lo único que veo son aves volando de un lado al otro. Parecía que en la casa no se encontraba nadie y es lo que más me parecía raro.
De repente un auto se estaciona justo a la puerta, frunzo mi ceño confundida cuando veo las placas del carro; Son las mismas que las de Liam.
Me quito el cinturón de seguridad para poder acercarme al parabrisas y así confirmar que fuera el auto de Liam. Y en efecto lo era.
Lo veo bajarse para después ir a abrir la puerta del copiloto de la cual sale una chica rubia, siento mis ojos empañarse cuando le da un beso en los labios y la acerca a él.
¿Escucharon eso? Fue mi corazón romperse.
Ella toma su nunca para acercarlo y darle un beso al cual el corresponde. Esto debe ser una jodida broma.

Mis ojos llenos de lagrimas se dirigen a Warner que al notar mi mirada baja la cabeza. — Lo lamento. — Es lo único que sale de su boca.

— Dime que esto es una broma. — Digo agarrando uno de sus brazos.
— Por favor. — Suplico.

El niega y enciende el auto para después ponerlo en marcha. Yo inconscientemente vuelvo la mirada a ellos, se seguían besando, pero no era un beso salvaje y forzado, si no todo lo contrario, como si ese beso llevara todo el amor de él y todo el amor de ella, como si ese beso fuera un pacto de amor.
Muerdo mi labio para tragarme todas mis lagrimas que amenazaban por salir.
No llores Zoe, por favor no lo hagas.

— ¿Adonde vamos? — Inquiero con la voz más  normal que puedo, pero para mi mala suerte sale rota.

Warner despega la mirada de la carretera para dirigirme una tierna sonrisa.
¿Enserio se atreve a sonreírme de esa manera en este momento?
— Supongo que no quieres estar aquí y yo tengo ganas de una hamburguesa . — Lo miró y arqueó una ceja aquí no había establecimientos de comida rápida.
— Así  que iremos a la ciudad más cercana.

Yo solo asiento y me undo en mis pensamientos. ¿Quien era ella? ¿Por que parecía que ese beso llevaba más que amor? ¿Por que Liam me hizo esto?
Sin poder evitarlo mis lagrimas salen de mis ojos y no me molesto en detenerlas, quería llorar y gritar.
Sentía un dolor en mi pecho, como si me hubieran sacando el corazón y lo hubieran echo trizas, y el ardor que sentía en mi garganta era aún peor.

¿Que mierda hice mal para merecer que Liam me haga eso?

                           *********
     Aloooooo
¿Como estaaan? Espero muy bien 🥰🥰
Aquí les dejo un nuevo capítulo, espero y les haya gustado:)
Si fue así plis apóyenme regalándome una Estrellita y algún lindo comentario 🥰

                                                   –M.

Le pertenezco al alpha Donde viven las historias. Descúbrelo ahora