BESOS EN GUERRA (Terminada)

35. FELIZ ANIVERSARIO

Lucas (jueves).

Ver los fuegos artificiales con mi novia había sido mágico. Es el primer año que los disfruté como se merece porque lo hacía con ella en mis brazos.

Despedir las fiestas del verano siempre es amargo para mí, pero pensar todo lo maravilloso que me ha dejado este, me quita el mal sabor de Boca. Porque sí, porque dentro de unas semanas empieza mi rutina, pero ella está en ella, y voy a coger mi último año, con todas las ganas.

Después de la noche tan perfecta que pasamos, al amanecer, estuvimos dentro de mi coche, con los cristales empañados y nuestros cuerpos enredados. No había sido como otras veces, porque quisimos ir despacio para sentirnos más a fondo, y no sé cuantas horas habían pasado, pero poco nos importaba ya.

De camino a casa, le conté a Lana que mi madre sabía de lo nuestro, y no se sorprendió para nada. Se alegró y parecía que se había quitado un peso de encima. Un peso con el que tiene que lidiar de nuevo ya que mañana canta en el Cherry's y hoy ha quedado con su hermana para hablar con su padre.

Me levanto a duras penas y lo primero que hago es ir al baño a darme una ducha. Hace un calor terrible y me he despertado sudando.

He pasado una de las noches más estresantes de mi vida pensando en lo que podría pasar hoy, y aunque debería de estar feliz porque es nuestro aniversario y tengo ganas de mostrarle a Lana mi regalo, por otra parte no puedo evitar sentirme nervioso e intrigado por la reacción de Richard Miller.

Sinceramente no es algo que me aterrorice. Voy a seguir con Lana pase lo que pase aunque me tenga que ir de Chicago, el problema viene si mi padre se entera. Ahí estamos jodidos porque es capaz de joderle la vida a mi novia si se lo propone.

Entro a mi habitación de nuevo y paso una toalla por la parte de atrás de mi cabeza, cuando de repente frunzo el ceño, al oír esa voz que me había enamorado desde la primera vez que la escuché.

Es mi novia, y me acerco a mi ventana para ver que está en su jardín, con su bikini, su moño despeinado y su guitarra.

Es muy temprano, e incluso pensaba seguir durmiendo, pero el silencio ha hecho que oiga a Lana con más claridad, y no hay cosa que me guste más que oírla cantar.

Abro y me apoyo en el marco para observarla. No puedo evitar sonreír, y ahora mismo siento una presión en el pecho pensando en que algo entre nosotros no salga bien.

"Antes de encontrarte yo dudé
si el amor se había hecho para mí,
Hasta que llegaste pude ver
Por primera vez al corazón latir.

Has cambiado todo en segundos
Me has dado un nuevo rumbo
Y aquí soy feliz.

Aunque este mundo pronto deje de girar
Y las estrellas ya no vuelvan a brillar,
A ti yo me aferraré, te amaré...
No importa que habrá después.

Aunque la vida entera tenga que entregar,
Juro que nunca nada nos separará.
Porque me has dado luz, un cielo azul
Y dime ¿dónde estabas tu?...

Ahora sé que no es casualidad.
Estaba escrito en el destino este amor.
De sus manos nunca me podré soltar.
Porque sé que el cielo fue el que nos unió."

Muerdo mi labio cuando acaba y veo que apoya la frente en su guitarra.

Quiero gritarle al mundo que esa que está ahí es mi novia, y prometerle que voy a hacerla feliz, pero sé que no depende solo de mí, y me jode no tener al alcance de mi mano solucionar toda la mierda que tiene encima.