Capítulo 4: Invitado inesperado

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Las siguientes semanas en la hacienda fueron un martirio para Yibo... estaba completamente enojado por la pérdida de su hermano pero sobre todo el recibir tantas muestras de afecto de los trabajadores alimentaba su sed de venganza contra el hombre que había ocasionado que su hermano falleciera. Todos lo apreciaban y le parecía totalmente injusto que las cosas hubieran tenido ese desenlace. Se ocupó por completo de poner en orden todo lo que había quedado pendiente y en pocos días Yuchen se convirtió en su mano derecha. Lulu tomó las riendas de la casa grande como ama de llaves y ayudaba a la cocinera con el cuidado de su nieto Fanxing mientras se encontraba trabajando.

Una tarde, mientras regresaba de su acostumbrada inspección a la mina, empezó a planear cómo presentarse en la mansión de los Jiang... todas las pistas sobre la muerte de Haikuan lo llevaban irremediablemente en esa dirección, de pronto, recordó los pases que Ziyi le había entregado aquel día en el club. Los revisó con desesperación, misma que desapareció al ver que aún quedaba tiempo para poder asistir a la fiesta. Sin darse cuenta un cálido recuerdo llegó a su mente y una sonrisa sincera apareció en sus labios después de mucho tiempo...

-Perdón... no fue mi intención...

-Acababa de guardar el celular... me están esperando...

-Estás bien?... de verdad discúlpame... ya me tengo que ir...

Todas esas frases daban vueltas en su cabeza junto con la imagen de esos impresionantes ojos... pero sobre todo recordaba esos jugosos labios y el pequeño lunar que había debajo de ellos. Sin pensarlo mucho, salió de su recámara y fue al despacho para llamar a su secretario... en pocos minutos organizó su viaje de regreso a la ciudad.

-Seguramente te volveré a ver- pensó.

Dos semanas después...

Había fiesta en la mansión de los Jiang... una de las tantas que el señor Fengmian hizo en honor a su heredero por su regreso después de concluir sus estudios de maestría en el extranjero... aprovechando la ocasión, se formalizaría el compromiso de Cheng y Ziyi ante la sociedad, la propia casa parecía brillar y había sido decorada para mostrar su máximo esplendor desde los jardines hasta las terrazas iluminadas discretamente. En la rotonda de cristal que se encontraba frente al salón principal, se encontraban Zanjin y la Tía Yu observando a los invitados. Desde ese lugar podían examinar a todos, desde los que bailaban el vals y también a aquellos que se apartaban del bullicio para poder tomar una copa de vino, alguna bebida o aperitivo.

Tía Yu.-Dónde está Zhan?

Zanjin.- Dónde más tía... bailando con Cheng, Ziyi y Yubin... acaso no los ves?

Tía Yu.- Y por qué no vas tú también... seguramente dejarán que te integres con ellos...

Zanjin.- No tía... me gusta ser modesto y disfrutar la velada tranquilamente... además desde hace unos días yo...

Tía Yu.- No te has recuperado del todo verdad cariño?

Zanjin.- Solo tengo leves mareos tía... así que prefiero acercarme a la mesa principal donde probaremos la cena que con tanto esmero preparaste...

Tía Yu.- Debo decirte algo...

Zanjin.- Y qué es tía querida?

Tía Yu.- Yo misma organice los lugares de nuestra mesa... tu lugar será al lado de tu tío...

Zanjin.- Pero eso no le va a gustar...

Tía Yu.- Estará encantado... deja de pensar que no le agradas y gánatelo... este tipo de eventos también son para eso-dijo guiñándole el ojo.

Tu SilencioWhere stories live. Discover now