Capítulo 43: Por fin juntos

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A la mañana siguiente Zhan fue despertado por un suave toque en el hombro, era la enfermera que hacía las rondas a las 7 de la mañana y era hora de la revisión para su esposo. Yibo dormía tranquilamente pero tenía la frente perlada de sudor, en el momento en que le tomaron la temperatura, la enfermera administró un antibiótico junto con un analgésico que controlara la fiebre. Zhan se apresuró a ir al baño para traer una bandeja con agua y con eso refrescar un poco a Yibo. Aprovechó para lavarse la cara y los dientes, en ese momento, escuchó la voz de la enfermera.

-Tranquilo señor Wang... no debe alterarse- dijo tranquilamente la chica.

Yibo hablaba con voz adormilada pero completamente inquieta.- Donde está... quiero verlo...

Enfermera.- Está aquí solo fue al baño...

Yibo.- Quiero verlo... ahora...

Zhan salió inmediatamente al escuchar esa voz, la impresión al verlo despierto fue tan grande que casi tira la bandeja con agua. Caminó rápidamente y la dejó en el buró junto a la cama, se sentó junto a su esposo y empezó a pasarle la esponja fresca.

Yibo.- Porque... por qué haces eso...

Zhan.- Tranquilo amor... necesitaba ir al baño un momento... todo estará bien...

Yibo.- Odio despertar y que no estés a mi lado... en verdad lo odio...-sollozó.

Zhan miró a la enfermera casi casi preguntándole con la mirada.

Enfermera.- Todo está bien, solo es un poco de fiebre la herida no tiene infección...

Zhan susurró inquieto.- Puedo atenderlo yo mismo...

Enfermera.- Le avisaré al doctor en cuanto llegue, no se preocupe...

Zhan asintió y continuó refrescando a Yibo durante un largo rato. Se había quedado dormido por el efecto de los medicamentos de nuevo. Zhan lo observaba con una mirada llena de amor y de ternura, levantó con mucho cuidado la colcha y recorrió su cuerpo con la esponja. Lentamente la fiebre empezó a bajar. Al poco rato, el doctor encargado del caso llegó a la habitación para hacer un segundo chequeo y descartar cualquier anomalía, afortunadamente no había mayores complicaciones, de hecho, le alegró que Yibo hubiese pronunciado algunas palabras sin dificultad.

En cuanto el doctor y las enfermeras se retiraron, Zhan fue al baño a dejar la bandeja, regresó rápidamente al lado de su esposo... segundos después, Yibo abrió los ojos.

Zhan sonrió.- Cómo te sientes?- preguntó dándole un tierno beso en la frente.

Yibo.- Feliz de que estés aquí... me encantaría poder abrazarte pero la verdad es que me duele todo...-dijo haciendo un puchero.

Zhan se recargó suavemente en él.- Está mejor así?... Yo también quiero abrazarte muy fuerte, solo que me da miedo lastimarte...

Yibo.- Anoche estabas dormido junto a mí verdad?

Zhan rio suavemente.- Si... no podía dormir y me subí con mucho cuidado... prometo no volver a levantarme antes que tú... nunca...

Yibo quiso reírse pero no pudo, fue más un gruñido.- No me hagas reír... me duele el estómago...

Zhan se levantó para poder mirarlo.- Necesitas que llame al doctor?... Necesitas que te traiga algo?

Yibo.- Si necesito algo... te necesito a ti...

Zhan ya no pudo aguantarse más y se recostó de nuevo junto a él.- Yo también te necesito a ti... voy a cuidarte y mimarte como te mereces...

Yibo.- No vuelvas a dejarme solo... por favor...

Tu SilencioWhere stories live. Discover now