Capítulo 23: Paseo en familia

1.7K 276 93
                                    

Dos semanas después, las cosas se habían calmado un poco en la hacienda... Yibo tuvo que someterse a esa dura prueba de estar lejos de Zhan, sobre todo, por las noches. Era un verdadero suplicio tenerlo tan cerca y tan lejos... Zhan se encontraba en la misma situación... después de lo que había ocurrido en el despacho, había optado por cruzar con él solo las palabras necesarias, de alguna forma sabía que ante el menor contacto o la mirada más tierna y candente podría caer rendido de nuevo.

Durante ese tiempo, cada uno se encargó de atender la parte correspondiente del proyecto que tenían con Wang Yizhou... vía remota habían acordado la entrega del oro, así que Yibo inspeccionaba cada movimiento en la mina y salía temprano todos los días, por otro lado, Zhan acordaba sus reuniones con Ji Li en el pueblo... rara vez encontraron a Yubin mientras revisaban los diseños. Una tarde Yibo llegó a la casa y se sorprendió al encontrar a su esposo y a Lulu revisando la lista del almacén, esa imagen le llenó por completo ya que estaba empezando a atender las cosas de la casa.

Yibo se acercó, se sentó junto a él y le preguntó.- Estás haciendo la lista para el almacén?

Zhan lo miró de reojo.- Si... Lulu me acaba de decir que hacían falta unas cosas... solo vamos a pedir lo necesario...

Yibo.- Y ya fuiste a ver personalmente lo que hay en la bodega?... Vamos, te llevo...

Lulu se levantó lentamente y fue a revisar unas cazuelas que estaban a punto de hervir.- Será mejor que se den prisa... la comida ya casi está lista...

Zhan.- E-este... yo...

Yibo.- Lulu... me prestas las llaves por favor?

Lulu.- Si claro... aquí están.

Yibo las tomó y sin pensarlo apretó a Zhan de la mano para salir por la puerta de la cocina... una vez afuera, caminaron tranquilamente hasta llegar a una pequeña cabaña junto a la casa grande. Yibo abrió el candado.- Es aquí... le voy a pedir a Lulu que te de una copia de la llave... así si ella no puede venir y gustas ayudar será bienvenido...

Zhan.- Vaya... no pensé que fuera tan grande el lugar...

Yibo le sonrió.- Bueno... te confieso que yo también me sorprendí con todo lo que se guarda aquí...

Zhan.- Y solo es para nosotros?

Yibo.- No... aquí se guarda lo que no se echa a perder tan rápido...

Zhan.- Y lo demás?... Supongo que se reparte...

Yibo.- Aunque no lo creas es algo que también pensé... por qué no te encargas de eso?

Zhan lo miró y no pudo evitar devolverle una sonrisa.- Conste que si yo lo hago, trataré de ayudar a los trabajadores...

Yibo soltó una carcajada.- Hazlo... después de todo, tu eres también el señor de la casa... puedes ordenar lo que quieras... -Se acercó lentamente a él.- Quieres ocuparte de esto?.- preguntó.

Zhan.- Si claro... me agradaría hacerlo...

Se aclaró un poco la garganta y le dijo.- Se que han sido días muy extraños entre nosotros... no he tenido tiempo de mostrarte algo... cierra los ojos...

Zhan lo miró desconcertado.

Yibo.- Anda... ciérralos...

Zhan.- No... creo que sea...

Yibo.- Anda... confía en mí... extiende tu mano... por favor.- dijo casi suplicando.

Con cierto recelo, Zhan cerró los ojos y no pudo evitar soltar una suave risa... su esposo se apresuró a sacar del bolsillo un pequeño diamante... lo depositó suavemente en su mano.

Tu SilencioWhere stories live. Discover now