Capítulo 14

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Sheri

Sigo acomodando un par de cajas que todavía tenía, mi papá está en su cama descansando. Mi cabeza da vueltas a todo y comienza hacer preguntas, solo han pasado cinco días y siento que han pasado años a todo lo ocurrido; mientras acomodo las cajas que quedaron en mi habitación puedo ver en la pared un camino de manchas negras que poco a poco se tornan verdes, las toco y se siente húmedo, lo observo y noto que hace un camino hasta el sótano.

Bajo con cuidado las escaleras para pasar por el pasillo y abrir la puerta del sótano, se siente un frío que esta para congelarse. Bajo las gradas del sótano para llegar, se escuchan unas voces susurrándome que parecen venir de bajo de las escaleras, veo que el cuarto rojo proviene las voces pongo una de mis manos fuera de la habitación dispuesta a entrar, pero siento una mano en mi hombro que me hace alejarme de ahí.

— ¿Estás loca? ¿Qué demonios pensabas hacer? – Pregunta Jacob

— Había unas manchas en la pared que llevaban aquí. – Balbuceo – Y luego unas voces su zurrándome.

— Hay que cerrar esto. – Dice él mientras observa a nuestro alrededor encontrando algo útil.

— ¿Necesitas ayuda? – Le pregunto.

— Yo me encargo, para lo que sea que tenga esta casa te quiere a ti. No puedo permitir que eso pase. – Responde él en un tono serio.

Me es imposible respirar estando con él cerca, pero al verlo de esta manera hace que la temperatura baje y me sienta culpable.

— Esta bien, iré a terminar lo que estaba haciendo. – Digo soltando un suspiro.

Paso de lado de él para ir por las escaleras y subir, él no me mira cuando subo las escaleras solo observa el cuarto rojo con odio y desprecio. Subo a mi habitación para ordenar todo, pero paso en la habitación de mi papá, me acerco a él para ver cómo sigue.

— Papá... - Le digo en un tono suave.

No hay una respuesta.

— ¿Papá? ¿Estás bien? – Pregunto para poner una mano en su hombro a ver si reacciona así.

Siento un agarre en mi brazo muy fuerte que logra hacer que me agache por el dolor, gemidos de dolor salen por mi boca, luego su mano toma mi cabello y lo presiona para llevar mi rostro al suyo.

Este no es papá, no lo es.

Intento solarme de su agarre, pero es inútil, tiene mi cabello bien agarrado en su mano e intentando soltarme es como querer que me arranque el cabello. Cuando estoy lo suficientemente cerca de su rostro en el sale una voz para nada normal.

— Tu eres mi destrucción, yo te destruiré primero. – Salen esas palabras de su boca para luego golpearme con el filo de la cama.

Me duele la cabeza, gotas de sangre caen de mi rostro. Alzo la mirada para ver a papá quien tiene su boca abierta pero no respira.

— ¿Papá? – Pregunto, pero solo hay eco en la habitación.

— ¿¡Papá!? – Pregunto de nuevo, pero con un tono de miedo.

Escucho los pasos de Jacob subiendo a la habitación al oír mis gritos, se acerca a papá para tomar su pulso, pero por su rostro puedo saber que no hay. Mis ojos se llenan de lágrimas al ver lo que acaba de ocurrir.

— No... - Digo, pero mi voz se quebranta.

— Sheri... - Dice mi compañero en un tono suave para abrazarme.

Lágrimas salen, siento un dolor en mi pecho que amenaza con destruirme. No soy capaz de pararlo, papá se acaba de ir por ese ser asqueroso... Soy su destrucción y yo lo destruiré antes de que me destruya primero, lo mandare al mismo infierno donde debe estar.

.

Jacob

Se acaba de ir el papá de Sheri, no tuve la oportunidad de conocerlo. Llamo a mis hermanos quienes de inmediato vienen a la casa para ayudarme con el funeral, Sheri esta destruida, pero logre convencerla de que duerma un poco.

Me mata su dolor, no quiero sentir lo que ella está sintiendo en estos momentos, pero sé que debemos apresurarnos con el vuelo de su madre para Nueva York, debemos avanzar no estancarnos.

— Llamé a papá, logro contactarse con Meredith Wilson la madre de Sheri. Vendrá mañana a primera hora. – Dice Travis.

— Yo me encargo del funeral del oficial, los de la funeraria vendrán a alistarlo, pero lo más seguro es que venga la prensa y exijan una autopsia. – Comenta mi hermana.

— ¿Estás bien? – Le pregunto.

— Lo estaré, en cuanto me aleje de esta casa... Este lugar no me hace bien y mucho menos ahora que no puedo controlar a la psicópata de nuestra bisabuela dentro de mí. – Responde ella.

— ¿Y Sheri? – Pregunta mi hermano.

— Esta dormida en su habitación. – Respondo.

— ¿Qué paso? – Pregunta mi hermana.

— Cuando llegue vi a Sheri a punto de entrar al cuarto rojo, me quede en el sótano para cerrarlo luego la escuche llamando a su papá, pero de pronto una voz extraña le hablo y subí rápido cuando escuche el golpe y los gritos de Sheri a su papá. – Respondo la pregunta de mi hermana.

— Mato a su papá... – Susurra por lo bajo mi hermano.

— Eso significa que no estamos hablando de cualquier ser, es muy fuerte y lo puedo sentir. Debes tener cuidado Jacob. – Comenta mi hermana entendiendo a lo que se refiere.

— Lo tendré. – Le digo.

— Y aunque no te guste, si esto se nos escapa de las manos llamaré a nuestros amigos de Rockville ¿Entendido? – Dice mi hermana en un tono firme y segura.

No me agrada la idea de que los llame ya que me sabría mal ver a mi ex después de tres años, no sé cómo se lo tomará cuando le cuenten que ya encontré a mi compañera. Me dolió dejarla ir, pero ambos sabíamos en nos metíamos y que tarde o temprano alguno de los dos encontraría a su compañero.

— Esta bien...- Digo a regaña dientes.

— Bueno, esta noche no tendré noche de pasión. Le diré a Adelaide que espere a mañana. – Comenta Travis cambiando de tema.

— ¿Es en serio, hermano? – Pregunta Delancy

— ¿Qué? Déjame agregarle humor a la situación, no vez que todo está siendo gris. – Responde mi hermano.

— Increíble. – Susurra mi hermana indignada para luego dar media vuelta.

— ¿Qué? – Pregunta mi hermano.

— Iré con Sheri a la habitación, veré que este bien. – Digo para luego ir a la habitación de mi compañera.

— Genial uno se va a dormir bien cómodo con su compañera y la otra se va indignada. – Comenta mi hermano con sarcasmo.

— Ya cállate. – Le ordeno.

— Ay, está bien gruñón. – Dice él.

Cuando llego a la habitación de Sheri, su cabello rubio esta manchado de sangre pero aun así duerme tranquila. Es imposible no apreciarla cuando duerme, no sufre.

Su dolor aún sigue y eso me mata, por lo que decido acurrucarme a su lado en la cama para luego traerla a mi pecho y abrazarla.


Oscuros SecretosWhere stories live. Discover now