Oscuros Secretos

Capítulo 35

Sheri

Las noches han sido tranquilas, Jodie no volvió aparecer en mis sueños. Me he levantado temprano para entrenar mis habilidades con mamá que no ha sido sencillo, aunque ella dice que ya lo he logrado pero que no nada de malo practicar.

Mi cabeza a veces quiere explotar, aun no sé en qué momento llegue aquí y acabe dándome cuenta que soy médium y licántropo. La muerte de papá aun me duele, pero es algo con lo que debes vivir. Cole me recuerda mucho a él, así se sonriente, protector y cariñoso, ha cambiado mucho desde que los Miller decidieron adoptarlo.

El señor Miller me llamo a su oficina, por lo que después de entrar fui.

Tome asiento en el sofá mientras el estaba sentado tomando café en su oficina con el periódico en sus manos.

– Buenos días, nuera. – Dice el señor con una sonrisa.

– Buenos días, suegro. – Contesto algo nerviosa –. ¿Usted me llamo? – Le pregunto.

El asiente.

– Se que hay cosas de las cuales hay que hablar, mereces saberlas. – Responde.

Elevo una ceja en expresión confundida.

– Pensé que ya lo sabía. – Especto.

– La madre de mi esposa esta muy callada en el cuerpo de Delancy, eso no es buena señal dando por hecho que se estuvo manifestando mucho en las últimas semanas. – Comenta.

Presto atención a lo que me dice.

» – Hay malas señales por parte de Travis de lo que pueda suceder en la luna llena mientras cambias, quiero ver si estas lista para lo que viene porque después de la luna llena va a ver un gran cambio en tu vida. Más las posibilidades que la casa posea un poder más allá de la oscuridad del que ya tiene, es peligroso. – Añade.

Miles de preguntas se me vienen a la cabeza.

¿Qué habrá dicho Travis a su papá?

Aún tenemos inconclusas, sin respuestas.

– ¿Qué debemos hacer? – Pregunto.

– Podemos llevarte al bosque donde Adelaide estará allí contigo ayudándote con sus habilidades de druida, al igual que Jacob. – Responde.

Asiento con la cabeza.

– No sabemos si Jodie podrá jugar en ese momento, por eso es mejor mantenerte lejos de la casa mientras pase tu cambio. – Dice mientras junta sus manos de una manera elegante.

– Entiendo.

No iba a decir mucho, estaba muy claro lo que quería decir.

El asiente al ver mi reacción.

No iba a decir mucho, estaba muy claro lo que quería decir.

El asiente al ver mi reacción.

– Bien, esperemos que todo salga como lo esperado. – Dice para luego hacer una pausa –. Ya solo quedan días para la luna llena.

Trago fuerte.

Me despido del señor Miller para luego salir de su oficina.

Necesito respuestas, hay cosas que aún no tenían sentido.

Caminé por el pasillo hasta que me encontré con Cole quien me daba una sonrisa.

– Sheri, pensé que no iba a verte. – Dice él.

Enarco una ceja mientras una sonrisa se me dibuja en mis labios.

– ¿Por qué no? – Le pregunto.

El lleva una de sus manos a su nuca para rascarse en forma de nerviosismo.

– Bueno, estas ocupada y casi no te veo por la fortaleza. – Responde.

Eso era cierto, me había enfocado en muchas cosas menos en saber como le iba a Cole.

– Ahora tengo tiempo libre así ¿Por qué no vamos a comer un helado? – Le sugiero.

Una chispa en sus ojos brilla ante la idea.

– ¡Claro! – Dice para abrazarme con fuerza.

Me falta el aire hasta que le toco el hombro en seña de que me estoy asfixiando, el se separa y me da una sonrisa.

– Vamos. – Le digo para soltar una risa.

Decidimos ir caminando hasta la heladería donde lo invité, hacía frío porque estábamos cerca de que empezara a nevar o como lo llaman, la época navideña.

– ¿Cómo te ha ido con la convivencia en la fortaleza? – Le pregunto.

– Muy bien, al parecer Ade no es lo que espere. – Responde con una sonrisa nerviosa.

Le doy una probada a mi helado.

– ¿Ves? Te lo dije, ella es una gran chica. – Le digo.

El ríe.

– Si, igual Travis.

– ¿Qué se siente tenerlo como hermano? – Le pregunto haciéndole una mueca divertida.

Al principio hay un silencio ya que el estaba saboreando su helado de chocolate.

– Es atento y amable, nunca te aburres con él. Adelaide es afortunada de tenerlo, así como todos. – Responde.

Sonrío mientras disfruto el sabor del helado.

– ¿Cuándo vas a la escuela? – Le pregunto.

Hay un silencio.

– La señora y señor Miller, quieren que empiece el otro año en un tipo internado académico. – Responde.

Nunca se me hizo mala la idea de los internados, siempre quise ir a uno, pero es difícil de entrar y sobre todo es difícil de pagar.

– Bueno, lo importante es que vas a empezar a estudiar de nuevo. – Le digo.

Él sonríe.

– Si ¿Y tú? ¿Cómo vas con el estudio? – Me pregunta.

Suelto un suspiro.

– Tuve que dejar de asistir al colegio al igual que Travis, Jacob y Delancy. Los problemas nos superaron y es mejor salir de ellos, no podría concentrarme en el estudio con todo lo que esta sucediendo. – Respondo.

Nunca en mi cabeza me paso por dejar de estudiar, sin embargo, con todas las revelaciones, todos los problemas lograron que me dejara de concentrar en ello. Primero resolveré esto y el próximo año terminare mi último año de bachiller.

Si lo vemos de este modo, todos estamos igual.

Adelaide ya había acabo la universidad por lo que esta trabajando para una editorial, por eso casi no se ve en casa. Delancy esta dando clases de baile, es su manera de olvidarse de la realidad un poco. Jacob esta ayudando a los negocios de su padre y Travis, bueno esta pensando que hacer porque tampoco quiere quedarse en la fortaleza sin hacer algo, pero a sido una gran compañía para Cole y para mí. No nos sentimos tan solos en la fortaleza.

Había toque de queda por lo que tuvimos que regresar antes de que anochezca.