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Sang-Hyun adoraba los días viernes.

 Amaba llegar a casa y ser recibido por su esponjoso gato, y ahora por su hermoso novio. Le encantaba como corría hasta sus brazos y besaba su rostro como si hubiesen pasado años sin verse.

—¿Hyun, vienes a beber con nosotros? —pregunto Ji-Ho.

—No gracias, me esperan en casa —dijo recogiendo sus cosas con rapidez sin poder evitar sonreir.

—Parece que Sang-Hyun tendrá algo de acción hoy. —dijo Jackson moviendo las cejas de arriba a abajo ganándose un golpe con una carpeta por parte del mencionado— Que agresividad.

—No todo en una relación es sexo, pervertido.

Jackson alzó una ceja.

—¿Seguro? —preguntó con un tono de voz que le dio mala espina— ¿le has preguntado directamente a tu chico si quiere hacer más o te quedas en silencio esperando que algo pase mágicamente? 

Sang-Hyun iba a responder, pero se quedó callado ya que lo que decía Jackson era cierto. Tenía miedo de sobrepasarse y que Ha-Joon se enojase con él, sin embargo, nunca se le ocurrió la posibilidad de hablar sinceramente con él.

—¿he dado en el clavo? —rio Jackson— ¿cómo estás tan seguro de que él no quiere hacer algún avance si nunca han hablado?

—Ya me voy —dijo Sang-Hyun antes de salir corriendo.

—Ahora hará algo impulsivo por tu culpa —dijo Ji-Ho negando con la cabeza. Jackson puso una sonrisita sospechosa.

—O tendrá el mejor sexo de su vida gracias a mi.

—Dios, eres un cerdo —Ji-Ho hizo una mueca de asco y salió con Jackson.


—Estoy en casa —escuchó Ha-Joon desde el sofá. Se levantó y corrió hacia Sang-Hyun para saludarlo, pero Bomi fue mas rápido y ya estaba ahí frotando su pequeña cabeza contra la pierna de su amo en señal de bienvenida.

—Hola, Hyunie —saludó Ha-Joon.

Sang-Hyun se quitó los zapatos y se calzó las pantuflas antes de acariciar la cabeza de Bomi y dar unos pasos hacia Ha-Joon y besarlo. Él de inmediato le rodeó el cuello con los brazos y profundizó el beso. Unos segundos después se detuvo y empezó a darle pequeños besos por todo el rostro haciéndolo reir.

—¿Cómo te fue? 

—Bien, ahora solo quiero cenar y acurrucarme contigo.

—Me gusta esa idea —concordó— ¿Qué tal si compramos comida y vemos una película?

—De acuerdo, me cambiaré de ropa y saldremos.

Subieron al auto y fueron al centro donde habían varios restaurantes abiertos. Usualmente cuando estaban en público caminaban sin tomarse de las manos, pero lo suficientemente cerca rozarlas y de ese modo evitar malos ratos.

—¿Qué te gustaría comer? —preguntó Sang-Hyun

—Jjajangmyeon ¿Y tú?

—Jjajangmyeon está bien, hace mucho no como.

Sang-Hyun hizo el pedido, tendrían que esperar unos quince minutos así que fueron a una tienda de conveniencia a comprar las bebidas.

—¿Cerveza? —preguntó. Ha-Joon negó.

—Cuando tomo cerveza con jjajangmyeon me duele el estómago así que llevaré jugo, tú lleva cerveza si quieres —Sang-Hyun asintió y fue a buscar una.

All Over AgainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora