11. 👄

3.7K 246 38
                                    

Tenía miedo de decirle a mi madre que me prestara su auto.
Más que todo porque los tres me preguntarían sobre mi repentino motivo para querer conducir (lo cual no hago muy seguido) y no tendría una respuesta que dar.

Me visualice diciéndole a mi madre lo siguiente: "Mamá ¿me prestarías el auto para perseguir a mi misterioso ex que ya no es tan ex porque me volví a enamorar de él, pero solo fue porque logró probar que podía volver a meterse en mis bragas y que ahora esta intentando conquistarme de verdad pero que me oculta un secreto gigante, el cual quiero descubrir porque vivo del chisme y porque el que era su mejor amigo me enseñó un maldito vídeo donde sale haciendo solo Dios sabe que?"
¿Sería muy raro decirle todo eso?

He notado que últimamente no he dormido lo que debo y es por una cosa tras otra:
Estrés.
Kilian.
Mateo.
Dolor.
Mateo.
Estrés.
Mateo.
Dolor.
Mateo.
¿No es extraño que el mismo que provoca el dolor, estrés y otras cosas, sea el mismo que las quita?
Tal vez el término "extraño" pueda ser cambiado por "curioso."

Me resulta cómico que hace tan solo dos meses lo odiaba a muerte y ahora lo amo con cada fibra de mi cuerpo.

Y sé que es estúpido, sé que la situación baja a ser irónica y absurda pero ni en las historias más apasionadas de amor aparece que una persona vuelva con quien solía amar y no por falta de ganas, sino porque no es sano volver con esa persona que ya no forma parte de ti.
Pero si soy honesta....Mateo jamás dejó de ser parte de mí.

Lo sé porque analizo cada día (al menos de los que me acuerdo) desde que nos separamos y me doy cuenta que cada que lo veía entrar a la escuela, cada que reía con disimulo por alguna bobada que decía alguno de sus cerdos amigos, cada que escribía en su cuaderno durante las clases y cada que sus ojos hacían contacto con los míos (que claramente emitían "odio" hacia él) sentía la conexión que ni todo el odio del mundo podría deshacer.
¿Es eso lo que se siente cuando es lo que llaman "alma gemela"?

No creo que él sea un criminal, jamás lo he creído y creo que jamás lo creeré, solo quiero saber ese secreto que me oculta.

-¿Mi auto?...-esa cara de duda me esta comiendo viva.
-Sí.
-¿De cuando acá conduces?
-Es que creo que es necesario que me independice con respecto a la conducción...-por el amor a todo lo que es bueno...¿Realmente acabo de decir esa mierda?
-¿Ya no quieres que tu madre te lleve a la escuela?
-Creo que estaría más cool si voy yo sola, ya sabes...-estoy sudando como langosta en olla.
-Muy bien...-se levanta con las llaves tintineando en su dedo y me las da.-pero como le vea un rasguño a mi auto....
-No le harás absolutamente nada a la niña...-dice mi padre sin levantar sus ojos del periódico.-te conozco.
-Sigue con tu lectura, querido...-dice mientras sonríe sin pizca de humor.
Eso para mí es luz verde para irme con su coche.
No fue tan difícil como creí que sería.

El día pasa tan lento y más cuando tengo algo más importante que hacer que recibir clases de Literatura, Matemáticas y Ciencias.
Odio Matemáticas con todas mis fuerzas y me esfuerzo por demostrarlo.

Cuando la última clase terminó, prácticamente volé para sacar todo de mi casillero y así irme en busca de Mateo.
Claramente no todo sería tan fácil como imaginé.

-Señorita Moore...-el profesor de literatura me detiene a media corrida hacia la salida.-¿pensaron usted y sus padres sobre la carrera que le mencioné?
-Creo, señor, que no es necesario consultar con ellos cuando esa es la carrera que yo quiero llevar.
-¿Entonces eso quiere decir que sí desea mi ayuda?
-Sí señor...-asiento frenéticamente antes de seguir mi camino pero una pregunta pasa por mi cabeza que definitivamente necesito consultarle.-disculpe...-gira para mirarme a través de esos anteojos de media luna.-usted dijo que mi ensayo fue uno de los mejores, ¿hubieron otros?
-¿Le soy honesto?
-Por favor.
-Ninguno de sus compañeros tiene tanto talento con la escritura como usted y el señor Durrell...-sabía que Mateo sería uno de esos.
-¿Durrell?
-Así es.
-¿Usted...-dudo un instante antes de preguntar.-le ofreció esta oportunidad a él también?
-Por supuesto.
-¿Y él...-me mira con una ceja levantada y yo de inmediato corto mis palabras.-olvidelo...-sigo mi camino, con toda la vergüenza de la que es capaz de sentir una persona.
-Dijo que aceptaría si usted acepta...-me vuelvo con brusquedad y clavo mis ojos (que siento que se saldrán de mi cráneo) en los suyos.-creo que desea compartir con usted algo más que solo las clases...-me obsequia una sonrisa y entra nuevamente al salón.
¡Madre mía! ¿Realmente hizo eso?

Salgo de la escuela, con una lentitud de tortuga y me encamino hacia el auto.
No puedo creer que haya hecho algo así.
¿Y si yo no aceptaba? ¿Que planeaba hacer si yo me negaba? ¿Acaso pensó en él en algún momento?

"¡Madre mía!"

Es tan impulsivo y tan callado con todo, que si el profesor no me hubiera dicho, él jamás me lo hubiera dicho.

"Me debes una explicación, Mateo Durrell..."

Entro al auto y me tomo unos segundos para analizar todo: Mateo tiene un secreto que debo revelar y hoy tengo la oportunidad de hacerlo pero mi plan se está viendo arruinado por mis manos que están clavadas al volante como si fueran una maldita roca.
¿Acaso no es lo que quería hacer?

"Creo que desea compartir con usted algo más que solo las clases..."

La frase del profesor se va a quedar en mi cerebro para siempre.

Cuando finalmente agarro valor para encender el auto, mi teléfono suena.
Es Mateo.

-¿Hola?...-respondo dudosa. 
-Hola Buffy...-puedo sentir su sonrisa desde aquí.
-¿Que pasa Fuckboy? ¿Ya me extrañas?
-Todos y cada uno de los malditos minutos que no veo esos ojos...-eso me hace reír ligeramente.-¿quiero saber a que hora sirve que pase por ti mañana?
-¿A que hora te sirve a ti?
-¿A las siete de la mañana?
-¿Estás loco?
-No me pongas a elegir la hora porque elegiré la más temprana con tal de pasar cada minuto del día contigo...-juro que mi corazón está desbocado pero debo calmarme y no perder la compostura.
-¿Que te parece a las once?
-¿No es muy tarde?
-Es la hora perfecta para buscar un lugar donde almorzar.
-De acuerdo, a las once será...-dice satisfecho. 
-Muy bien.
-Te veo mañana.
-Hasta mañana fuckboy.
-Hasta mañana, Buffy...-alejo el teléfono un poco.-hey...-pongo el teléfono en mi oído nuevamente.-te quiero...-siento que estoy sonriendo como idiota pero no puedo parar.
-Te quiero...-lo digo tan rápido antes de colgar que casi creo que no me escuchó.

"Mierda, mierda, mierda y más mierda..." 

MI INEVITABLE FUCKBOY 🔥[COMPLETA]Where stories live. Discover now