30. 🥀

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Siento el vómito subir por mi garganta y atascarse en mis glándulas.

"Están muertos, ellos están muertos..."

Mi respiración se ha atascado de tal forma que no puedo gritar el nombre de mi hermano, no puedo suspirar o gemir.
No puedo hacer nada y para colmo, él ya ni siquiera me escucha.

La imagen de su rostro es desgarradora y quema mis intestinos en gran manera.

Le han borrado la sonrisa, le han borrado el hoyuelo, le han borrado esos ojos soñadores, le han borrado su espíritu, le han borrado su vida.

Si tan solo hubiera estado aquí, si tan solo hubiera escuchado cuando la puerta fue abierta a la fuerza, si tan solo hubiera escuchado el golpe que le dieron a mamá, si tan solo hubiera escuchado el disparo a mi padre o los golpes que le dieron a mi hermano, si tan solo hubiera estado aquí, habría muerto con ellos, pero no estuve.

-Joven...-una voz suena en eco en todas las cavilaciones de mi cabeza.-señorita...-se escucha tan cerca.-debe estar en shock...-¿que yo estoy en shock? Claro que lo estoy. Mi hermano esta muerto frente a mí y mi padre recibió un disparo en su corazón, ¿cómo demonios no estaría en shock?
-Esta muerto...-mi voz suena lejana y apenas audible. Es tan irreal, todo es tan falso, tan distante y tan punzante que me resulta poco creíble que el presentimiento de que algo malo estaba por suceder, realmente era cierto.
Todo el tiempo tuve razón.

La imagen que pasa frente a mi es la de dos hombres con trajes de enfermeros que examinan el cuerpo inmóvil de mi hermano.

-Aún respira...-mis pulmones vuelven a la vida de manera brutal y violenta, desprenden el aire a borbotones y cuando llega a mi garganta, sale en un gemido casi grito de alivio, dolor, odio y felicidad.
Esta vivo, realmente esta vivo.

Ponen su cuerpo en la camilla, lo alzan y se lo llevan fuera de la habitación. No puedo parar de llorar.

Me cuesta un mundo levantarme del suelo, pero tomo fuerza de no sé donde para hacerlo y llegar al umbral de la puerta de la habitación.

Giro mi rostro cuando noto movimiento y solo entonces veo a dos hombres que llevan una camilla con algo encima cubierto por una sábana.
No hace falta ser experta para saber que es el cuerpo mi padre.

Camino lenta y pesadamente por el pasillo que he recorrido millones de veces solo para poder mirarlos mientras bajan la masa de piel sin vida por las escaleras.
¿Porque hago esto? No tengo el derecho de mirarlos cuando no estuve aquí para ellos.

Otros dos hombres salen del cuarto de mis padres con una camilla y el cuerpo de mi madre cubierto por una sábana.
¿Que carajo hacen? Ella esta viva

Obligo a mis piernas a caminar más deprisa hacia ellos o para ser más exacta, al cuerpo.

-¿Porque la cubren?...-dudo que hayan escuchado mi voz porque es apenas un susurro que se pierde en el aire pesado de esta casa destruida.-ella esta viva...-los hombres se miran entre sí un momento y bajan con mucha delicadeza la camilla.
-Lo siento mucho...-dice uno de ellos tocando mi hombro con delicadeza.
¿Porque lo siente? ¿Porque se disculpa cuando no ha pasado nada? 

La respuesta pega como rayo, como ola, como fuego abrasador contra mi mente y me trae la dura realidad.

"Mamá esta muerta."

Tengo un nudo gigante en la boca del estómago y sin que pueda retenerlo más, el vómito me obliga a hincarme sobre el suelo y botar hasta lo último que tengo reprimido en mi interior.

Veo a través de los huecos de la baranda del piso de arriba el momento exacto en el que  sacan el cuerpo de mi madre por la puerta y desaparecen de mi campo visual.

Mi garganta quema por toda la bilis que he tenido que sacar y las lágrimas bajan tan violentamente por mis mejillas que dan la sensación de quedarme seca.

¿Como es que en un instante tienes a todo lo que amas contigo y al siguiente se te va de las manos sin que puedas detenerlo?
No lo entiendo.

Me sujeto de la madera de la barandilla y me obligo a levantarme para empezar a bajar la escalera.

Por un instante me olvidé de Mateo y su herida en el costado. Espero que lo hayan ayudado.

Me acerco a duras penas al primer escalón y lo primero que veo (a pesar de la oscuridad del lugar) es que no esta ahí donde se quedó sentado.
Seguramente lo ayudaron los paramédicos.

Bajo los escalones, despacio y con cuidado para no caerme por no poder ver una mierda en medio de esta oscuridad.

Siento mi cuerpo hirviendo y casi creo que me dará gripe por la ropa empapada que traigo puesta, pero una parte de mí me dice que es por toda la ansiedad que estoy sintiendo en este preciso momento.

Cuando llego al piso de abajo, camino lentamente encima del montón de vidrios y llego a la puerta.

Las luces de los flashes, de la ambulancia y del carro de policía me dan una inesperada bienvenida al mundo fuera de la pesadilla.

Hay tanta gente aquí, tantos conocidos y desconocidos, tantos seres que nunca verán lo que yo tuve que ver y les tengo envidia por ello.
¡Suertudos!

Camino con pesadez por la entrada de la casa hasta que llego a los tres escalones, bajo cada uno como si mi alma estuviera siendo arrancada y llevada al interior de la casa. Finalmente llego al camino blanco que divine el jardín y de inmediato los mil y un recuerdos estallan como bomba frente a mí.

Mil y un recuerdos de ellos dos siendo mis padres, mil y un recuerdos de ellos protegiendome, mil y un recuerdos que se han quedado en eso.
En recuerdos.

Alzo la cabeza lentamente y las miradas de los demás se clavan en mí.
Aguardan a que me quiebre aquí frente a ellos pero no sucederá, debo ser fuerte.

Mis piernas empiezan a perder su fuerza con solo tres pasos que he dado, mis manos empiezan a temblar nuevamente, mi corazón choca contra mi pecho de manera violenta y la duda de que pueda seguir sin caer de rodillas frente a toda esta ola de gente estalla frente a mí.

"Por favor, que esto acabe ya..."

Y como si hubiera sido escuchada, en medio del montón de gente que esta aquí, de las cámaras, de los policías que les impiden el paso a las personas que quiere entrar a la propiedad y de los paramédicos que entran a la ambulancia para emprender su camino al hospital, la mata de pelo café oscura que tan bien conozco se abre paso a través del montón de personas y se detiene justo al final del camino por donde me quiero echar a morir.

"No puedes caer porque él no te dejará caer.."

Le ordeno a mis piernas que tengan fuerza, que lo logren, que lo hagan por él y que no se rindan.

Camino tan despacio al principio por la poca confianza que le tengo a mis piernas, pero cuando lo veo dar un paso hacia mí, me doy cuenta que no puedo aguantar más la distancia entre ambos.
Necesito estar con él, necesito que me envuelva en sus brazos ahora.

Mis piernas comienzan a correr y en menos de cinco segundos rodeo su cuello con mis brazos. Los sollozos estallan en mi garganta y las lágrimas caen sobre su camisa pero a él no le importa, él solo me envuelve en sus brazos con fuerza, con dulzura, con amor y protección.
Me acuna en sus brazos y me protege  de todo lo demás.

A él no le importa su herida, no le importa lastimarse, no le importa sufrir, a él le importa una mierda el sexo, las drogas, las motos, los libros, los tatuajes o su padre, él solo quiere que yo este bien pero ahora sé que yo solo puedo estar bien si él esta a mi lado.

MI INEVITABLE FUCKBOY 🔥[COMPLETA]Where stories live. Discover now