17. Café

90 7 0
                                    


3/3

Para Hermione Granger ser nombrada como la mejor bruja de su generación fue una sensación un tango agridulce, pues había confirmado que Draco se había ido a Francia el mismo día en que terminaron los exámenes, él no estaría presente en la ceremonia de graduación ni en la cena, por lo que había decidido ir a buscarlo...

Había hablado con Theo y Blaise, ellos le contaron lo que sabían y las sospechas que ellos tenían con respecto a su abrupta escapada a tierras francesas; él se había enamorado de ella, y al creer que sus sentimientos no eran correspondidos, se alejó ajeno a que la Gryffindor sí lo amaba también...

Hace dos semanas ella habló con Ronald y le contó todo, como supuso, él se altero mucho, dolido le dijo palabras que quisiera no recordar pero ya no podía seguir más tiempo con aquella farsa, ella no lo amaba.

Luego de la ceremonia, la castaña se fue junto a sus padres a casa, su ánimo no estaba para fiestas y debía terminar de empacar pues al día siguiente tomaría un vuelo a París, pudo haber usado un traslador pero prefería la forma tradicional...

Era domingo por la mañana, Draco estaba sentado tomando su desayuno, mientras leía el diario, su madre había salido de paseo con algunas amigas, y tal vez más tarde él haría lo mismo...

Luego de bajar del avión y de todo el ajetreo de buscar su maleta, y del chequeo, por fin pudo salir del aeropuerto, una brisa fresca la recibió, tomó un taxi para dirigirse al hotel donde se hospedaría, estaba algo cansada y acalorada, quería tomar una ducha con agua fría y tal vez comer algo...

El rubio salió de su casa y se apareció a unas calles de la Torre Eiffel, daría una pequeña caminata hasta llegar a la famosa torre...

Hermione salió del hotel, ya duchada y con algo de comida en el estómago, siempre había querido conocer la Torre Eiffel, y por suerte para ella el hotel quedaba a unas diez cuadras de la torre, iría caminando para estirar las piernas y observar el paisaje que le ofrecía la ciudad...

La torre era hermosa e imponente, había sacado varias fotos que le enviaría a sus padres. La noche había caído ya sobre la ciudad, así que la chica decidió que era hora de volver al hotel, mañana iniciaría su búsqueda, los amigos del rubio le habían dicho que en París, los Malfoy tenían varios negocios, era la única pista que tenía.

Se puso en marcha al hotel, cuando el olor a café llegó hasta ella, el olor la llevó hasta una pequeña cafetería a dos cuadras de la torre, se veía muy linda y acogedora. Por lo que sin pensarlo dos veces se dirigió al local, un café caliente no le vendría mal.

Al abrir la puerta una campanilla anunció la llegada de un nuevo cliente, haciendo que los que ya estaban dentro se volvieran hacia la entrada para ver quién era. Sus ojos grises se conectaron de inmediato con sus ojos marrones que lucían sorprendidos al darse cuenta que quien estaba ahí era Draco Malfoy...

Fue el destino o fue casualidad, ninguno de los dos lo sabía y tampoco quisieron preguntar. Ella dirigió sus pasos hasta donde él estaba y se lanzó a sus brazos, por su parte él sólo atino a recirbirla aún sorprendido por su presencia.

- Eres un idiota - le dijo al oído - te fuiste dejandóme sola, con las palabras que quería decirte atoradas en mi garganta - su aliento le erizaba la piel - terminé mi relación con Ronald, porque mi corazón ahora late por ti - ella se apartó para quedar frente a frente - te amo, Draco, te amo como jamás he amado a alguien y si hoy estoy aquí es para decirte que quiero pasar el resto de mi vida a tú lado, que juntos vivamos nuestras alegrías y nuestras tristezas, que vivamos nuestro amor sin ningún límite - ella lo observó con un brillo que nunca había visto en ellos.

- Tú fuiste la causante de que en mí afloraran sentimientos que reprimí por cuatro años, luego de aquel golpe en tercero, te comencé a ver con otros ojos. Descubrí una chica inteligente, valiente y hermosa - le dijo acariciando su mejilla - quise esconder lo que escondía porque tuve miedo -aceptó él - miedo a tu rechazo -ella volvió a abrazarlo.

》Me alejé porque pensé que tú amabas a la comadreja y tenerte por ratos ya no era suficiente para mí, por eso decidí irme y poner tanta distancia de ti como me fuera posible.

- Pero, ahora, estoy aquí y quiero quedarme contigo siempre - habló ella y luego junto sus labios.

Se besaron con ansías, con deseos, con pasión, con amor...

Un nuevo capítulo en sus vidas daba inició, y sabían que si era juntos de la mano no todo sería tan malo...

Un nuevo capítulo en sus vidas daba inició, y sabían que si era juntos de la mano no todo sería tan malo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Fictober 2020Donde viven las historias. Descúbrelo ahora