𝗙𝗮𝗺𝗼𝘂𝘀 ➳ 𝗠𝗶𝗻𝗵𝗼 𝘅 𝘀𝗸𝘇

11 ➺ Regalo

—Han publicado otra foto de ti bailando con un chico que también forma parte del entretenimiento— anunció Jeongin tras entrar al comedor. Dejé el tenedor a un lado y tomé el iPad de mala gana para ver la miserable noticia.

Rodeé los ojos al encontrarme con una fotografía que me muestra bailando felizmente con Wang, el amigo de Hyunjin que me fue presentado esa madrugada. Definitivamente, ese maldito de Kang estuvo presente en ese centro nocturno y ni siquiera me percaté de ello.

«"Para el reconocido y atractivo actor Lee Minho es demasiado fácil hacer nuevas amistades. No importa donde se encuentre, siempre podrá «coquetear» y obtener un baile «erótico» con cualquiera que se lo proponga. ¿Será que está deseoso de atraer la atención de todos nosotros? ¿O simplemente lo hace para sentirse amado?"»

Kang, para Vogue.

—¡No la lances de nuevo, hyung! — pidió Jeongin con los nervios de punta al ver mi completa disposición de lanzar el artefacto contra la pared.

—No lo haré— le aseguré tras devolverle el iPad. —¿No has encontrado información sobre él?

Tomé de nuevo el tenedor y comencé a ingerir mis alimentos de manera pacífica en un intento de alejar la ira que se ha estado acumulando en mi interior gracias a ese maldito bastardo que no ha dejado de buscar la manera para joderme.

—Lamentablemente, no— respondió Jeongin tras tomar asiento frente a mí —Es extraño el hecho de que no haya nada sobre él. ¡Es un maldito hombre del espectáculo! Al menos debería de haber una curiosidad sobre él, pero no.

Suspiré y dejé de nueva a cuenta el tenedor sobre la mesa.

—Es extraño, tienes razón— concordé —Sin embargo, no hay nada más que hacer y solo debemos esperar a que proceda la demanda.

—¿Algo más que tengas en mente?

—Por ahora eso es todo.

—Entonces, paso a retirarme. Debo hacer mucho papeleo.

Asentí a modo de respuesta y me dispuse a comer de nuevo.

Intenté hacer a un lado el inmenso deseo de ir directamente a casa de ese imbécil y hacerle pagar con mis propias manos lo que me ha hecho. No cabe duda de que le dolió demasiado el hecho de que le obligué a pedirme disculpas de rodillas frente a miles de espectadores, aunque tengo el ligero presentimiento que desde antes él ya me odiaba por completo y ese acto solo avivó mucho más el deseo de hacerme añicos.

De pronto, Jeongin apareció corriendo y se detuvo frente a mí e intentó alejar la agitación gracias al maratón que tuvo.

—¿Qué sucede? ¿Malas noticias de nuevo? — pregunté con pereza.

—No— negó frenéticamente con la cabeza.

—¿Entonces?

—Debes ver esto, hyung.

Me levanté de la silla y seguí a Jeongin hasta la sala y me quedé pasmado al encontrarme con más de diez docenas de rosas y esta vez son de color naranja. Miré a Jeongin y este sonrió abiertamente tras encontrarse con una carta y rápidamente me la entregó.

La tomé con manos temblorosas y miré el contenido.

«"Nadie puede vencerte, solo déjalos que te juzguen"»

Bang Chan.

Un increíble nudo en la garganta se hizo presente. Esta es la primera vez que alguien me ha mostrado apoyo y eso me hace sentir realmente sentimental porque es muy difícil que alguien que no sea Jeongin, muestre preocupación por mí.