Who we are [James Sirius Potter]

CAPITULO 29

I tried to find love.
In someone else too many times.
But I hope you know I mean it.
When I tell you you're the one that was on my mind.

When it's said, when it's done.
I would never let you know.
I'm ashamed of what I've done.
When I look at you in your eyes.

I see there's something burning inside you.

I know it hurts to smile but you try to.

In your eyes - The Weeknd

La semana transcurrió de forma rápida para los adolescentes en Hogwarts, al menos para los de cursos superiores, pues ya casi se encontraban a mitad de mes. Alex continúo asistiendo a sus clases, escapando a la cabaña de Hagrid para poder dejar a Goliat jugar en su jardín y practicando de vez en cuando en el club de duelo. Era la única asignatura extracurricular que estaba tomando y se sentía muy bien, descargaba muchísima energía batiéndose a duelo y era en cierto punto divertido. Además, consiguió que Magnus también se apuntara a las clases, por lo que pasaban más tiempo juntos y ayudaba a Alex a pasar menos tiempo con Potter. Pese a no querer admitirlo, aún le dolía que él estuviera convirtiéndose en ese James que tanto le molestaba y enojaba, por lo que gastar su energía despedazando muñecos de utilería era una buena forma de desahogarse.

Por otra parte, James sentía que recuperaba de a poco un poco de la picardía que lo caracterizaba. Si bien la sensación de vacío que le generaba cada vez que Alex prefería no estar cerca de ellos aún no se iba, sentía que en algún momento lo haría y se sentiría mejor. O al menos es lo que trataba de decirse a sí mismo. Era bueno tener a Archie de su lado, pues el resto de sus amigos creían que era una mala idea, pero ellos no entendían, no sabían sus motivos. Aquel era el único modo que encontraba para quitar sus sentimientos por Alex, no conocía otra forma. Claro que lo que James no sabía, era que al coquetear con otras, lo único que estaba logrando era alejar a Alex. Solo estaba consiguiendo que ella se acercara más a Magnus y ni siquiera se daba cuenta.

Era martes en la tarde y finalmente el gran día había llegado, la semana de pruebas estaba apenas comenzando y la primera en tenerla era Robyn. Todos sus amigos estaban en las gradas para darle ánimos, mientras la capitana del equipo de quidditch de Ravenclaw llamaba a todos los postulantes.

— Muy bien, quiero que se agrupen de acuerdo a los puestos a los que desean postular, yo soy Marina, su capitana –sonrió la adolescente–. Bien, ahora quiero que coloquen estos números en donde pueda verlos, están divididos por colores para saber a qué rango quieren aspirar.

Robyn se colocó un gran número once a la altura del pecho del lado derecho, este era de color verde brillante. Otros cinco chicos también estaban postulando para los puestos de cazadores. Marina fue seleccionando a algunos estudiantes para formar grupos y hacerlos competir, quería verlos simulando un juego y ver como trabajaban tanto de forma individual, como grupal. Robyn estaba sentada esperando su turno, mientras sus amigos no quitaban sus ojos del juego. Archie llevaba un enorme cartel que decía "Vamos Robbyn" con doble B y hasta había hecho un dibujo de la adolescente y de él festejando con los brazos levantados.

— Supongo que la intención es lo que vale –murmuró Alex con una sonrisa divertida.

— Estoy tan nervioso, ya casi le toca... –dijo Finneas, mordiendo sus uñas.

— Su capitana es muy buena organizando las pruebas, no quiero imaginarme como será organizando las tácticas, tendremos que tener cuidado, Ravenclaw podría robarnos la copa este año –habló James, mirando hacía la muchacha, quien flotaba sobre su escoba sin quitar la vista de los postulantes.