CAPITULO 33

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A fine thread, not tough enough to bear.
The weight of desire and despair.
Untended, the fibres start to fray.
The long years of working as one.
Were just washed away.

Well maybe it was just our time.
Forgive me, remember that I'm a good man, just not good enough.
Don't hate me, I was just in love.
And hanging by a thread.

I don't know why I said I'm not in love with you.

Thread - Keane

Era otro día más en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería y las cosas no podían ir peores, o quizá sí, pero nadie quería sortear su suerte. Había transcurrido una semana desde la especie de pelea entre James y Alex, ninguno lo llamaba una pelea, más bien eran dos adolescentes ofendidos y dolidos que no sabían pedir disculpas o hablar para aclarar el asunto. En vez de eso, habían optado por ignorarse y solo se hablaban cuando era sumamente necesario e incluso cuando lo hacían, eran muy fríos entre sí. Se habían comenzado a tratar de "Potter" Y "Wiley" otra vez. Alex no podía creer como se había enamorado de alguien así, le dolía y le estresaba ese constante tira y afloja con sus propias emociones. Que te guste alguien no debería ser una tortura, debería ser un sentimiento feliz y lleno de esperanzas; pero ella sentía todo lo contrario.

— Alex, toma, gracias por dejarnos llevar a Goliat –dijo Finneas, mientras le entregaba al gato.

La noche anterior había sido luna llena y ella optó por quedarse en la Sala Común, no quería que sus malas vibras hacía James se transmitieran a Finn o a Goliat, por lo que le pidió a Robyn que lo llevara por ella.

— Encantada –sonrió–. Lamento no ir.

— No te preocupes, sé que las cosas están un poco tensas ahora, solo espero no dure para siempre, sería una pena que nuestro último año sea de este modo –hizo una mueca–. Sobre todo, cuando nos estábamos uniendo como grupo.

Alex soltó un suspiro y se apoyó en su hombro sin decir nada, ella pensaba lo mismo, solo no sabía cómo arreglar las cosas. Deseaba tanto tener a su madre para consultarle.

Goliat saltó a su regazo y se acomodó para dormirse, mientras Finneas le contaba con detalles todo lo que recordaba de la noche anterior. Ambos estaban sentados en el patio fuera del castillo, mientras la tarde caía. Robyn estaba en su labor de Premio Anual y luego entrenaría con su equipo y el resto de los chicos estaban en la Sala Común de Gryffindor.

Alex se sentía triste, sentía que una grieta había comenzado a abrirse lentamente en el grupo y no sabía cómo repararla. ¿Se terminarían los problemas si hablaba con James? ¿Realmente funcionaría o valdría la pena? Si ella se disculpaba, solo esperaba él también pusiera de su parte, ambos tenían que aceptar sus errores. Aquello era parte de crecer y madurar.

— ¿Quieres ir a comer algo? –propuso el adolescente.

— Finnie, tú nunca dejas de tener hambre –sonrió–. Bien, vamos, solo déjame esconder a Goliat.

No quería despertar al animal, quién dormía hecho una bolita, por lo que lo ocultó en dentro de su túnica y se subió al scooter, mientras Finneas empujaba detrás. Mientras esquivaban a algunos estudiantes, que estaban pasando la tarde en los pasillos, llegaron al comedor.

No había mucha gente, por lo que pudieron distinguir a los merodeadores en la mesa de Gryffindor, parecían estar discutiendo sobre algo. Alex se sentó junto a Richie, Fred y Finneas, acomodando al gato sobre su regazo y buscando algo de beber.

— ¿Qué paso? –preguntó Finn.

— Archibald perdió el mapa del merodeador –respondió Freddie con enojo.

Who we are [James Sirius Potter]Where stories live. Discover now