Dos chicos que viven en el mismo edificio, nunca se han visto y una compañía estadounidense famosa por crear videojuegos lanza un nuevo juego de realidad virtual que se conecta directamente a tu cuerpo, este de manera inmediata te crea un personaj...
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📨Paola: Hola, soy Paola. No sé si aún tienes mi número agendado o si este aún es tu número.
Espero hayas recibido mi invitación, chico de acero. Me gustaría mucho verte en mi cumpleaños, los chicos también te extrañan.
📨Dallas: Ey, tío. ¿Usas el móvil aún?
Déjanos saber si sigues vivo o algo. Fred y yo pensamos que podríamos salir alguna vez en honor a nuestros años de instituto.
📨Fred: Gran E, mi chico... Recuerda que el cumpleaños de P es el día 5 de enero.
Te amo, hermano.
📨Candace: sal de la puta habitación.
Sé que tienes el móvil encendido porque me aparecen las dos palomitas
Eres un cabrón
Te amo
Vale?
Más tarde te llevo el almuerzo y hablamos sobre que te pondrás para la fiesta de tu ex
¿O planean volver?
📨Dana: Hola, Ron.
Sé que ya no usas el teléfono y esas cosas, pero espero te haya gustado mi regalo de navidad y creo que algún día podremos volver a ser los mejores amigos de antes
¿Como ha sido la convivencia con la gatita pelirroja?
Mi papá dice que lleva mucho quedándose en tu casa
Los mensajes te llegan, eso significa que encendiste el cell
Es un paso gigante
Háblame
xoxo
Ni siquiera entiendo porque es tan importante para ellos que asista al cumpleaños de Paola, si, sé que sería el primero al que no asistiría en años, pero tampoco considero que soy tan transcendental para ellos. Desde que me alejé he ignorado sus mensajes, leyendo y viendo vídeos antiguos me he dado cuenta de que realmente era una persona horrible: me imponía por sobre los demás, tomaba lo que quería y mis aires de grandeza eran insoportables. Entiendo porque se apartaron, aunque al mismo tiempo me molesta que lo hayan hecho sin dar una señal y en un momento tan duro de mi vida.
Uno de los vídeos que tengo en el ordenador es de hace casi tres años, en el sótano de Fred. Él, Dallas y yo bailábamos una canción que tuvo una fama efímera. Mi cabello iba tan corto que me cuesta reconocerme, sonría con entusiasmo mientras que la cámara se mantenía segura en su puesto. Fred y Dallas son de ese tipo de amigos que conoces de hace tanto tiempo que ni siquiera recuerdas la primera vez que los viste. Es como si siempre hubieran estado allí conmigo, por eso me cuesta tanto entender en qué momento me volví un lastre para ellos, para todos. Últimamente paso más el turno mirando el techo y pensando en las dudas que afligen mi mente, de vez en cuando Candace se pasa y me cuenta algunos cotilleos del edificio. Tengo la ligera sospecha de que se ha enamorado de este chico de piel oscura que me he encontrado en la puerta ayer. Se puso de piedra cuando me percibió. Quiero pensar que no fue por mis cicatrices, aunque lo más probable es que sí.
