No me mires.
No creo en los dioses que tU adoras.
No me apoyo.
No me apoyo en los pilares que te adornan.
No como ni bebo
de los jugos de tus frutos,
y me ahogo
en las aguas que tu sed agota.
Me siento fiel
a todas las verdades declaradas,
a todas las mentiras tan, tan compasivas.
Me siento fiel
a todos los te quiero susurrados,
a todas las mentiras defraudadas.
Hoy quiero declarar todo mi amor a mis ausentes,
en la distancia mantenida, eterna, eternamente.
Y declarar mi fracaso a los presentes;
presentes, ausentes, todos, hoy quiero.
Adoro al dios endemoniado
que me hurtó el sosiego incandescente;
adoro al demonio enamorado
señor de mis instintos más mundanos;
y quiero declarar a todos mi dolor
de ser fiel mortal a mis queridos,
a mi gente esa, yo, desconocido.
Pero cuando las golondrinas vuelvan,
si mis fidelidades anudan mis zapatos,
susurraré mis errores,
los gritaré al viento sereno,
que se mezclen con sus trinos;
y se expandirán difuminados
hasta el confín de los infinitos cielos.
Mis fracasos,
tus miradas,
mis fidelidades,
mis mentiras compasivas,
mis pilares y mis besos,
mis verdades declaradas.
Renuncio a todo por segundos,
mejor, regateo;
mejor un solo segundo de sosiego.
Mi alma toda la cambio
por un segundo de grito amado... ¡Ansiado!
Pero no creo en los dioses que tú adoras
ni en esos pilares que te adornan
ni bebo de los jugos de tus frutos;
y aún me ahogo en las aguas que tu sed agota.
Pero me siento fiel, repito,
a todas las verdades de ese dios endemoniado.
Hoy quiero declarar a todos mi dolor
de ser fiel mortal a mis queridos,
a mi gente esa,
yo, desconocido.
YOU ARE READING
Godoylicismos. Los Estados del Alma
SpiritualLibro de cabecera, para leer despacio y encontrar las similitudes que cada una de las almas tienen. Cada unos de los relatos, cortos o largos, pudiste escribirlos tú. Como cada alma, seguro que has sentido. Dime qué tipo de sentimiento y quizá haya...
