Destined Couple 「YoonMin」

CAPÍTULO 18

POV YOONGI

El día pasó con lentitud, tal y como ocurría en los pasados meses, antes de reencontrarme con Jimin. Eso me hizo recordar la monotonía en la que había estado sumergida mi vida, una monotonía que había abandonado en cuanto Jimin se abrió de nuevo a mí. Cada día había sido entretenido, con nuestras salidas, nuestras conversaciones, y con Jihyun.

Acostado en la cama, pensé nuevamente en Jimin. Saber que tenía posibilidades con él no implicó que me sintiera más relajado. Solo había sido un día sin saber nada de él, y ya estaba completamente ansioso. Giré por décimo cuarta vez sobre el colchón, sin embargo, ni la postura más cómoda lograría calmar mi mente. Cuando me rendí en la lucha por conciliar el sueño encendí la televisión de la habitación. No tenía sentido seguir intentando dormir cuando sabía que no podría.

Los canales fueron cambiando hasta llegar a uno donde echaban una película. Era difícil que una serie o un programa televisivo me entretuviera, pero las películas siempre lo conseguían, incluso la más mala de todas. Sonreí al recordar a Jimin riéndose de mí al verme llorar con una película que a nadie le daba pena. Suspiré. "Mi pequeño Jimin".

Mi móvil comenzó a sonar sobre la mesita de noche. Me incorporé y lo tomé, sin embargo, un par de tonos pasaron hasta que pude cogerlo. Tragué saliva al ver que era Jimin, que llamaba justo cuando estaba pensando en él.

—¿Sí? —pregunté al atender la llamada.

—Yoongi —no preguntó si era yo, solo lo afirmó. Parece que escuchar la voz del otro nos dejó sin habla, porque la línea quedó en completo silencio.

—¿Está todo bien? —oí un leve "ujum", pero no dijo nada más—. ¿Jimin? —insistí tras un momento.

—Sí, todo bien. —Tragué saliva. Jimin no estaba dando ninguna conversación y no me decía el motivo de su tardía llamada—. Perdón, ¿te he despertado?

—No, tranquilo, estaba viendo una película.

—¿Una triste? —noté la sonrisa con la que preguntó eso.

—¿Sigues burlándote con eso? —negué con la cabeza, sonriendo—. Antes, cuando me puse la película, me acordé de aquella vez que lloré un poco y te pasaste toda la tarde riéndote. —Carcajadas sonaron a través de la línea, eran vibrantes, e intentaban mantener el tono bajo. Eso hizo que la conversación sonara algo más íntima.

—Primero, no fue solo un poco —respondió cuando las carcajadas se calmaron, sin embargo, seguía sonando divertido—. Y segundo, no solo me reí —su tono de voz bajó un poco más—, también te abracé y te tranquilicé. —Era cierto, Jimin me había abrazado esa tarde, había paseado sus manos por mi cuerpo, repartiendo caricias entre beso y beso. Aclaré mi garganta ante el nuevo silencio formado.

—Lo sé, me acuerdo de eso también —no mejoré la conversación con mi respuesta, porque el silencio se mantuvo al otro lado—. ¿Por qué no duermes?, es tarde.

—Mmm..., lo mismo digo para ti —respondió, a lo que asentí.

—Sí, debería intentar dormir —tomé el mando y apagué la televisión. En cierto sentido, no me gustaba el silencio que quedó en la habitación tras hacerlo—. Bueno... —no quería, pero debía colgar—, cuelgo. Descansa, Jimin —tras la despedida, colgó. Me alegré de que fuera él, ya que a pesar de haberme despedido primero no tenía la voluntad de colgar.

Dejé el móvil en la mesita de noche de nuevo para acomodarme en la cama, apagando la luz. Suspiré en mitad de la oscuridad. La conversación con Jimin había servido para tranquilizarme, aunque no me hubiera dado ninguna respuesta. Si llamaba era porque nuestra relación estaba bien, ¿no?