CAPÍTULO 20

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POV JIMIN

Tomé una profunda respiración al llegar al hotel. Tras dar algunos datos en la recepción sobre quién era y a quién visitaba me dejaron pasar. El ascensor subía lentamente, con música tranquila que me provocaba ganas de arrancar el altavoz. Quería ver a Yoongi y saber qué pasaba. Solo esperaba que estuviera en su habitación.

Toqué la puerta, golpeándola con los nudillos. No se abrió. Apoyé la frente en ella y respiré profundamente de nuevo para tranquilizarme. Supliqué en voz alta, deseando que se abriera. Oí un ruido a lo lejos, dentro de la habitación, como si alguien hubiera tropezado. Me alejé y toqué de nuevo, esta vez ansiosamente. Yoongi abrió la puerta y yo quedé estático. Un flashback de Yoongi tocando la puerta durante mi celo cruzó por mi mente. Los papeles se habían invertido.

—Omega —su voz sonó fuerte, agravada por el calor. No era su voz de mando, pero se sintió demandante. Jadeé en respuesta. La piel se me puso de gallina en cuanto Yoongi dio un paso más cerca y tomó mi brazo, atrayéndome al interior de la habitación.

—Yoongi. —Me apresó contra la pared, pegando su cuerpo por completo al mío, y en ese momento me di cuenta de que solo llevaba la ropa interior. Cerré los ojos. El olor de su celo parecía intensificarse con cada segundo que pasaba—. Yoongi —no respondía—. Alfa —Yoongi me miró fijamente al oír el llamado. Su instinto lo estaba controlando por completo. Gemí cuando se frotó contra mi cadera—. Alfa, por favor —susurré.

—No debiste venir, Jimin —susurró, pegando su frente a la mía. Su tono de voz era grave, duro, y eso me hizo alzar el rostro y frotar las puntas de nuestras narices. Un gruñido escapó desde su garganta—. Será mejor que te vayas —a pesar de sus palabras, sus manos apretaban mis caderas, impidiendo cualquier movimiento. Cerré los ojos cuando noté que el apretón en ellas se hizo más fuerte. Otro gruñido, y esa vez, Yoongi enterró el rostro en mi cuello—. Sensible como siempre —continuó hablando en susurros—, acogiendo mi tacto —gemí y llamé al alfa de nuevo, lo que pareció hacer que se controlara de nuevo—. Debes irte ya. —Se separó de mí para intentar dejarme ir, pero sus manos temblaban, buscando mi cuerpo de nuevo, y sus ojos me miraban en profundidad. Tragué saliva.

—Y tú deberías haberme llamado —respondí, acercándome a él lentamente.

—Habría usado mi voz de mando para hacer que vinieras. No estoy en control. —Coloqué las manos en sus hombros. Todo su cuerpo parecía estar ardiendo—. Jimin... —advirtió.

—¿Para qué quieres usar la voz de mando, alfa? —Estaba tentando mi suerte, pero había decidido que mi omega tenía razón, que ambos queríamos a Yoongi.

—Mi lobo dice que use la voz de mando para hacer que te desnudes —me estremecí al oírlo—, para que me dejes marcarte. —Yoongi dio el paso que faltaba para pegar nuestros cuerpos por completo.

—No necesitas la voz de mando para eso —enterré el rostro en su cuello y pasé la lengua por su suave piel—, porque también quiero esto. Yo también te quiero.

El silencio pasó a ser parte de nosotros. Solo se escuchó mi espalda golpeando la pared de nuevo cuando Yoongi me apresó. Después, solo fueron los sonoros besos, la cremallera abriéndose y mi pantalón deslizándose y cayendo al suelo. Jadeé y dejé ir mi cabeza hacia atrás, contra la pared. Yoongi acarició el contorno de mi erección por encima de la prenda interior. El calor de su cuerpo llegó al mío, arrastrando el deseo por cada poro de mi piel. Moví las caderas hacia delante, buscando más de ese placentero toque, y mientras su mano se deslizaba al interior de mis calzoncillos, sus labios besaron mi rostro. Incluso con su celo calentándolo y robándole el sentido común se tomó su tiempo para bañarme en besos.

Destined Couple 「YoonMin」Where stories live. Discover now