Min yoongi, alfa y el príncipe de daegu tenía un muy adorable caballero, park jimin omega, tal vez era adorable y sin dudas una cara bonita, pero grave error pensar eso.
Jimin sin saber de su pasado decide descubrirlo por si mismo.
Jimin 「omega」
Yoo...
Yoongi cerró sus ojos y se concentró en su interior. Dos felpudas orejas salieron de su cabeza, están se levantaban y se bajaban, haciendo reír al menor, una cola larga y peluda se asomó por atrás de su espalda, sus ojos se hicieron más oscuros y con un brillo indescriptible, dos lindos colmillos puntiagudos se asomaron cuando el mayor abrió su boca.
Después de dejar a su lobo salir, la criatura abrazo la fina cintura del menor con fuerza y cuidado de no lastimarlo.
-al fin te puedo abrazar-susurró el lobo del mayor. Jimin miró con dulzura como las orejas de su alfa se bajaban por el tacto que el menor hacía en estas.
-y yo ya te quería sentir-dijo jimin levantando la carita de su alfa.
Sus orejas estaban atentas a cada uno de los movimientos de su omega, y su cola se movía emocionada con cada toque del menor.
-quiero ver a mi omega, por favor-dijo formando un puchero con sus labios.
-solo va a salir cuando mi celo haya llegado-dijo acariciando las mejillas de su tierno alfa-pronto saldrá te lo prometo.
Ambos juntaron sus frentes y se miraron el uno al otro. Tenían que aprovechar el tiempo que les quedaba juntos, sehun los seguía buscando y tenían que ver una manera de hacer que el pare de intentar atacar el bosque.
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Los dos se encontraban en el lago, se estaban dando un tiempo para conocerse más antes de que una linda marca se encuentre en el blanco cuello del lindo omega.
Jimin salpicaba al su alfa, quien solo se sacudía para después empapar completo al menor. Ambos usaban un pantalón corto de una tela un poco impermeable, solo que jimin tenía una camisa blanca que por estar mojada, el delicado cuerpo del menor se transparentaba a travez de esta.
Ambos se metieron más al lago, el agua les llegaba al pecho.
-sostente de mi si quieres-dijo el alfa sosteniendo la cintura del menor con sus brazos.
-estoy bien, gracias-dijo jimin sonrojándose por el dulce tacto del mayor, acariciaba con su pulgar la cintura del menor.
Ambos empezaron a nadar más fondo y jimin al estar viendo al mayor, sin querer piso una piedra puntiaguda y se lastimó su pie, asustado de lo que había pisado fue a los brazos del mayor y este lo sostuvo de la cintura, jimin para sentirse más seguro rodeó la cintura del mayor con sus piernas.
-estás bien?-pregunto sonriéndole al menor para que se le pasara el susto.
-si, creo que solo pise algo puntiagudo y ya-dijo ya más calmado el menor, este se quedó mirando a los labios del mayor y dijo-bésame.
