*T R E S* PARTE II

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Cuarenta y cinco minutos más tarde ambas estamos completamente lista. Mi maquillaje es sencillo, así lo pedí, en cambio el de ella no, le gusta destacar mucho.

Ana me explico un par de cosas para aprender a maquillarme de forma sencilla y me dio sus pequeños tips, al principio no entendía ni una palabra pero a medida que fui preguntando para que servía cada cosa y como podía usarlo a mi favor pude ir entendiendo mejor. Ana me respondía las dudas mientras me maquillaba y a la vez también iba explicandome. Por fin mi hermana sirve para algo.

La loca casi nunca me ayuda.

Ahora estoy en mi cuarto nerviosa, el regalo esta en mis manos.

¿Y si no le gusta?
¿Y si el no me compró nada?
¿Y si quedo como una tonta?

¡Ay! Me entraron los nervios.

Salgo de mi habitación y mis hermanas están en la sala esperándome.

—¿Mamá y papá? —pregunto cuando no los veo.

—Estan abajo esperándonos.

Asiento y salimos de casa. El ascensor llevándonos hasta el lugar de la reunión.

La residencia tiene un enorme patio donde se encuentra la piscina, la mayoría de las personas aquí lo usan para sus reuniones familiares o cumpleaños, y como nadie quería celebrar el día de los enamorados aquí, mis padres decidieron que era buena idea que nosotros si.
Así que hablaron con vigilancia y los convencieron, ellos aceptaron solo si no iba a haber más de diez personas.
Llegamos hasta el lugar y miro a mi alrededor.

Papá está con mi tío cocinando una deliciosa parrilla, mamá esta hablando con mi tía y Axel y Gabo están junto a la abuela de este último, conversando y riendo pero cuando se percatan de nuestra llegada se quedan en silencio.

Gabo es el primero en acercarse y luego Axel imita su gesto y se acerca a mi hermana, Angie por otro lado se aleja y se sienta al lado de la señora Carmen y comienza a hablar con ella.

—¡Hola, ranita! —su sonrisa hace aparición y yo siento como mis piernitas de pollo se vuelven fideos.

—¡Hola, sapito!

Gabo se acerca y me roba un beso. Sin importarle que mis padres nos puedan ver.

¡Dioss! Este hombre es perfección.

—¡Feliz día, novia mía! —susurra cerca de mis labios.

¡Ahora si que me va a dar!
¡Agarrenme que me desmayo!
Creo que me va a dar un soponcio, un yeyo, un veriveri o un patatu. Alguna de las cuatro.

—¡Feliz día, novio mío! —imito sus palabras y el sonríe aún más.

—¡Ven! Te tengo algo.

Gabo entrelaza su mano con la mía y me lleva hasta donde esta su abuela. Ella me recibe con los brazos abiertos, y yo encantada la saludo. Amo mucho a esa señora.
Luego de saludarla Gabo me hace girarme para que le de la espalda a ambos.
Confusa lo hago y miro a Ana y Axel feliz mientras ambos se dan sus regalos.

—Puedes voltearte, ranita. —hago lo que me dijo y que medo estática en mi lugar. Completamente asombrada— ¡Feliz día del amor, princesa! —susurra en ese tono sensual que tanto me gusta. Y puedo jurarles que no he visto cosa más hermosa que Gabo sosteniendo el inmenso regalo para mi. 

Entre sus manos está un enorme peluche de oso panda sosteniendo una caja de bombones, me acerco asombrada y admiro el regalo.

—Amo —es lo único que puedo decir. Mis palabras decidieron atorarse en mi garganta.

Gabo me tiende el regalo y yo gustosa lo agarro, el pelaje del peluche es suave y me encanta admirar lo grande y hermosa que es, amo demasiado los osos pandas, y Gabo la sabe perfectamente.

—¡Gracias, amor! —susurro feliz y presiono mis labios en los suyos.

—Falta algo más. —dice y saca una pequeña caja cuadrada del bolsillo trasero de su pantalón.

Dejo el peluche en la mesa y con manos temblorosas agarro la caja.
Dentro hay un delicado collar de plata, el dije central es de una llave con un pequeño corazón en la punta.
Asombrada por el regalo lo miro sin saber que decir.

—Eres la llave que abre mi corazón. n

No logré comprender lo que decía hasta que me mostró el collar que tenia en el cuello, su forma era de corazón y en el lado izquierdo tenia una abertura por donde entra una llave. Tomé mi collar y lo uní con el de él, sus piezas encajaban perfectamente.

—Eres la única que tiene el poder de hacer con mi corazón lo que le plazca. Es tuyo al igual que todo yo. —sonriendo me lancé a sus brazos y volví a besarlo, demostrándole el amor que sentía.

—¡Gracias! De verdad muchas gracias.

Gabo me ayudó a colocarme el collar y casi me da un infarto ver lo hermoso que se veían los collares en nuestros cuellos.

—¡Oh! También te tengo algo. —dije acordándome de mi regalo.

Tomé de la mesa la bolsa que había traído desde el principio y se la tendi.

—¿Me amas tanto que me mandaras a botar la basura? —comenta riendo.

¡Miercoles!
Había olvidado que metí el regalo en una bolsa negra para que no se viera y de verdad parece una bolsa de basura.

—No seas tonto, lo guardé ahí para que no se notara.

Él asintió y abrió la bolsa.
Su rostro volviéndose de asombro y felicidad cuando sacó el peluche de sapo.

—Es igualito a mi. —comenta riendo. Coloca el peluche a un lado de su cara y si tiene razón, se parecen. Así que decido tomarle una foto antes de que siga revisando.

Saca un portarretrato de nosotros dos. Es un collages de fotos que hice y mandé a imprimir, luego saca un papel enrollado, lo abre y su emoción aumenta.

—¡Somos nosotros! —chilla como niño chiquito cuando cumples sus caprichos.

El papel tiene una caricatura de una foto de nosotros dos, el dibujo se lo hice yo y creanme que me esmere mucho para que quedara bien.

—¡Me encantan! —Gabo se acerca y sin soltar el papel me carga en sus brazos para darme vueltas como un loco.

Rio a carcajadas mientras intento que me baje.

—¡Gabriel Alejandro! —chillo riendo— Parale, pana que te vomitare encima si sigues dandome tantas vueltas.

—¡Iu! —Gabo se detiene riendo— No quiero que Arruines mi ropa.

—¡Estúpido!

Gabo vuelve a reír.

—Hay otra cosita más. —dice y lo miro asombrada— Quiero decirte que has sido y siempre serás mi más bonita casualidad. ¡Te quiero, Andrea Mendoza!

Sus palabras me llegaron al corazón. Estuve a punto de llorar como gafa.

—¡Te quiero, Gabriel Martinez! —susurro incapaz de ocultar mi alegría.

Este chico definitivamente se está volviendo en lo más importante para mi.

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Estos chicos se están volviendo muy románticos.

Bendita Obsesión✔️Where stories live. Discover now