my problem (Ron Weasley)

11

Narrador omnisciente:
Los dos chicos no estaban avanzando nada con la búsqueda. Estaban demasiado perdidos sin Hermione.

-Que podemos hacer?- preguntó Harry.

Ahora se encontraban de nuevo en enfermería tratando de saber quién ha abierto la cámara de los secretos.

De repente, Harry quien tomaba la mano de Hermione, vio que tenía algo.
-Ron...creo que he descubierto algo, bueno, más bien Hermione lo ha hecho.- dijo emocionado.

Ron quien se encontraba mirando a Becca rápidamente se apartó de ella con un leve sonrojo y se acercó donde estaba su amigo que le enseñó una nota.
-Un...basilisco?- leyó con algo de miedo.

-Exacto! Es por eso que no están muertos sino petrificados! Collin lo vio a través de su cámara...Hermione a través del espejo! Y Becca...no lo sé...- confesó Harry.- Donde la encontraron?

-No lo sé...- dijo Ron.- Por qué debería saberlo de todos modos?- preguntó nervioso.- Bueno...en verdad si que lo sé, Fred y George la encontraron en los pasillos de arriba, donde suele esconderse Peeves.- respondió.

-Claro! Mírala! Seguro que estaba tapándose la cara de alguna broma de él y vio el basilisco a través de Peeves.- dijo a lo que Ron asintió.

-Y la señora Norris?- preguntó el pelirrojo.
-Por el reflejo del agua! Donde empezó todo! En el lavabo de Myrtle la llorona!- dijo Harry.- Y si...ella fue la chica que murió?

-Debemos preguntárselo. Vamos!- dijo Ron no sin antes dar un vistazo a Becca.

De camino allí, escucharon hablar a McGonagall y Snape junto con Lockhart.
-Creo que es horra de que entre en la cámara de los secretos. Como usted dijo, sabe dónde está no?- preguntó Snape.

-Claro que lo sé! Solo déjenme prepararme unas cosas en mi oficina.- dijo marchándose.
-Debe ser rápido. Una alumna ha desaparecido.- dijo la profesora con algo de preocupación.

-Quién es profesora?- preguntaron los dos chicos con curiosidad.

Minerva miró a Ron quien tenía ya una cara de preocupación.
-Ginny Weasley.- finalizó.

[...]
-Debemos ir con Lockhart, el sabe donde está la cámara de los secretos.- le dijo Harry mientras caminaban hacia el despacho del profesor.

Sin embargo cuando llegaron, lo vieron preparando sus maletas como tal cobarde.

Ron apretó los puños y tomó su varita apuntándolo.
-COBARDE! Se iba a ir sin ayudar a mi hermana!?

-Oh...niños, no, solo estaba...- dijo con las manos arriba.
-Nos acompañará a abrir la cámara de los secretos quiera o no.- dijo Harry también apuntándolo.

Los tres se dirigieron al lavabo de Myrtle la llorona, la cual ya se encontraba llorando.
-Hola Harry.- dijo cuando lo vio.

-Myrtle...podemos preguntarte algo?- dijo a lo que la fantasma se acercó más a él.- Sabes que fue lo que te mató?

-Oh! Fue horroroso! Yo estaba ahí.- dijo señalando un retrete.- Estaba llorando... cuando escuché unos ruidos. Le dije que se fuera por que era molesto sin embargo seguía y seguía.

-Y que pasó?- siguió preguntando el azabache.
-Abrí la puerta para ver quién era y...morí.- dijo con simpleza.

Harry miró a Ron.
-Lo que significa que...la cámara de los secretos se encuentra aquí.- finalizó por decir Harry.

-H-habla pársel!- le dijo Ron.

Harry se preparó y empezó a hablar el lenguaje
de las serpientes. De repente, en el centro del lavabo, se abrió dejando ver un agujero.

Lockhart caminaba hacia atrás pero fue detenido por Ron.
-Usted primero.- le dijo empujándolo dentro.

El profesor no tuvo tiempo para pronunciar nada, pues ya estaba dentro, seguido de Harry y Ron.

Se encontraban en unos túneles. No dijeron nada y empezaron a caminar con cuidado.

Cuando ya llevaban un buen rato buscando a Ginny, se empezaron a encontrar...
-Son huesos.- dijo Ron.

-H-huesos?- repitió el profesor asustado.
-Si, mirar...aquí hay piel.- dijo Harry señalando la piel del basilisco.

-Wow, mirar que grande!- dijo Ron.- Ese bicho como mínimo medirá unos 30 metros!- al decir eso, Lockhart se desmayó.- Y mira a corazón de león.- dijo el pelirrojo burlándose de él.

-Creo que estamos cerca.- dijo Harry.- Tranquilo, seguro que la encontramos.- dijo al ver la preocupación de su amigo.

Por otra parte, en la enfermería, madame Pomfrey se daba en antídoto a la gente petrificada.

Cuando Becca pudo moverse se sentía rara. Demasiado diría ella.
-Que me ha pasado?- preguntó.

Miró a Hermione quien ya la estaba mirando y se sintió un poco incomoda.
-Nos han...petrificado al parecer.- dijo la castaña un poco impresionada.

Becca asintió. Aún no recordaba del todo que había sucedido, solo sabía que tenía mucha hambre.

Intentó ponerse de pie pero falló quedando en el suelo.
-Oh señorita Thomsen! Aún está débil para caminar, debe esperar unos minutos.- dijo la enfermera con una sonrisa.

La chica bufó y espero unos cinco minutos antes de volver a probar caminar.
-Becca debes esperarte...- empezó a decir Hermione pero al ver a la chica pararse sin ningún problema sonrió.- Parece que ya puedes...

-Así es, nos vemos.- dijo para irse de ese lugar.

De camino al gran comedor solo se preguntaba algo, cuanto tiempo había estado en ese estado? Que había pasado en su ausencia?

Al entrar, se sentó sola en su mesa, al final de todo, solo siendo notada por alguien que le dedicó una mirada fría y se podría decir de asco. Cuando los ojos del platinado y la chica se encontraron, Draco los desvió de inmediato.

Becca rodó los ojos y siguió comiendo en silencio.

Ahora el comedor iba llenándose, pues era el último día de clase y todos debían asistir.

Fue cuando Hermione entró por la puerta llamando la atención de todos. Los primeros en notarlo fueron sus amigos que la recibieron con un abrazo.
-Como te encuentras?- le preguntó Harry.
-Como nunca.- respondió esta.

Ron ahora solo quería ver a una persona pero no les iba a preguntar.

Se sentaron y empezaron a comer, con la diferencia que el pelirrojo buscaba con la mirada a Becca.

[...]
Becca se encontraba en el tren de vuelta a casa. Estaba sola pues no tenía con quien ir.

Se levantó por que tenía ganas de ir al servicio pero fue parada por alguien que la tomó de la mano.
-Menos mal que estás bien! Me habías preocupado!- dijo abrazándola.

Becca estaba sorprendida sin embargo le devolvió el abrazo. El mejor que había dado.

Ron, quién estaba decidido en devolverle su libro vio como Cedric la abrazaba.

Rodó los ojos y dio la vuelta para irse de ahí y no presenciar la escena.
-Como la odio.- dijo mientras se sentaba donde estaban sus amigos.

Si algo tenía claro era que odiaba a Becca y eso no cambiaría nada.