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Narrador omnisciente:
La chica caminaba furiosa. Si, estaba furiosa con ella misma.

Siempre solía responder con algo más ingenioso o incluso sabía humillar a las personas para que se callaran y la dejaran en paz.

Pero escucharlo de Ron...

Que le había pasado? Se había quedado inmóvil, no podía pronunciar ninguna palabra cuando el pelirrojo le estaba diciendo todas esas cosas...que en el fondo sabía que era verdad.
-Lo odio, lo odio tanto...- se decía a ella misma.

No veía donde iba hasta que levantó la cabeza para ver que había acabado en el sauce boxeador.

Becca lo miró detenidamente. Que curioso árbol pensó.

Y cuando estaba a punto de tocarlo, alguien tiró de su ropa hacia un agujero.

Gritó para pedir ayuda pero nadie la oía. Además...como había dicho Ron, quién querría? No tenía amigos en el fondo...

Llegó a una habitación, sin ventanas y solo con una salida.
-Un perro?- dijo al verlo bien.- Encima pulgoso...

El perro le enseñó los dientes. Encima que la había salvado del sauce... pensó nada más que Sirius en su forma animal.

La chica intentó salir pero el perro le impedía el paso así que se puso a inspeccionar el cuarto detenidamente. Por las paredes habían arañazos.
-Quién habría vivido aquí?- preguntó para ella misma, se giró para mirar al perro pero este ya no estaba.

Intentó salir pero la puerta no se abría, tampoco había llevado su varita.
-Genial.- dijo para sentarse en uno de los sillones que habían.

No pasaron ni cinco minutos cuando entró el mismo perro pero este no iba solo.
-Mi pierna!- decía este quejándose pero al ver a la chica paró.

Becca se levantó y intentó marcharse pero el perro seguía sin dejarle.
-No puedo estar con él, si esto es una clase de broma de los gemelos parar ya!- dijo empezándose a desesperar.

El perro le enseñó los dientes a lo que la chica retrocedió.
-Becca.- dijo Ron intentando llamar su atención.

La chica no pensaba hablarle ni mirarle. Se sentó de nuevo y notaba como la mirada del pelirrojo estaba posada en ella pero no iba a hacerle caso. Se negaba.

En eso entraron Hermione y Harry.
-Becca?- dijo Hermione a lo que la chica se acercó a ella.
-Que es esto?- la castaña iba a responder pero fue cuando el perro se transformó en su forma humana.

-Tú.- dijo Harry.
-Oh...no...- dijo Becca entrando en pánico.- Eres...Sirius Black.- la chica caminaba hacia la puerta pero el hombre volvió a impedirle el paso.

-Me temo que no puedo dejaros ir.- dijo Sirius.

Iban a contestar pero entró Remus, dejándolos sin palabras.
-Profesor Lupin! Haga algo!- dijo Hermione.

Remus miró a Sirius y lo abrazó.
-Cuánto tiempo Canuto.- le dijo con una sonrisa.

Becca aprovechó que se estaban abrazando para salir corriendo, pero Sirius ya se temía que eso iba a pasar.
-Desmaius!- dijo y ahora Becca se encontraba en el suelo.

-Becca!- gritó Ron.
-Sirius!- dijo Remus yendo junto la chica.
-Lo siento, que querías que hiciera?- dijo este.

-Razonar con ella!- respondió.
-Como si nos hubiera creído.- siguió diciendo este con evidencia.

-Como en los viejos tiempos.- dijo Snape entrando y apuntando a Sirius.
-Oh Severus...no me da ningún placer verte.- dijo Sirius.

-Dame una sola razón para no matarte ahora mismo.- siguió diciendo Snape.
-No seas tonto Severus...- dijo Remus.

-No puede evitarlo ahora...- dijo Sirius.
-Por favor Sirius calla...- empezó a decir Remus.
-No, cállate tú!- lo interrumpió el nombrado.
-Cállense! Parecen una vieja pareja de matrimonio.- les pidió Snape.

-Expelliarmus!- dijo esta vez Harry apuntando al pocionista mandándolo lejos.- Ahora, que alguien me explique lo que está pasando!

En ese tiempo, Sirius y Remus le explicaron toda la verdad a Harry y descubrieron que la rata de Ron en verdad era Peter Pettigrew, la persona que había traicionado a los padres de Harry.

-Y ahora? Vamos a entregarte.- dijo Sirius a Peter quién suplicaba por su vida.

Todos iban saliendo, primero Snape, después Remus junto con Becca en brazos y Hermione junto con Ron quien tenía la pierna lastimada seguidos por Peter, Sirius y Harry.

Una vez arriba, Remus empezó a encontrarse mal, dejando a la chica en el suelo con cuidado.
-Profesor Lupin?- dijo Hermione.- Oh no...

Ahora Remus se había transformado en un hombre lobo.
-NO! SIRIUS!- dijo Harry al ver a su padrino ir detrás de Remus pelándose y no dudó en ir tras ellos.

Snape por otra parte llevó a Becca, Ron y Hermione a enfermería.

Una vez allí, Madame Pomfrey atendió primero a Ron y después a la chica que por suerte no le había pasado nada grave.

Becca estaba sana y salva.
-Menos mal que estás bien.- dijo Hermione a su lado a lo que ella solo sonrió.

-Becca.- dijo Ron desde su camilla a lo que la chica lo ignoró.- Por favor no me ignores...

No pasaron más de dos minutos cuando entró Harry igual que Becca. Inconsciente.

Pero este despertó al instante sobresaltado.
-Que ha pasado!? Donde está Sirius?- dijo a lo que Hermione se acercó donde estaba él.

-Lo tienen...lo siento.- dijo.
-Pero es inocente! Debemos hacer algo!- dijo entonces entró Dumbledore.

Becca no quería escuchar más, estaba harta de todo. Se dio la vuelta y se tapó con la sábana para cerrar los ojos y no escuchar nada más.

Se sentía inútil y tonta. Por qué nada le salía bien? Por qué le pasaba esto a ella?

Así estuvo unos minutos hasta que decidió irse a su cuarto. Al mirar la sala Dumbledore no estaba pero si Hermione y Harry.
-Que hacéis?- preguntó a lo que ellos desaparecieron y al instante volvieron a entrar por la puerta de enfermería contentos.

-Pero...como?- preguntó Ron igual de sorprendido que Becca.
-Que os pasa chicos?- preguntó Hermione riendo.

-Como lo habéis hecho? Estabais ahí...y ahora...- empezó a decir la chica a lo que Hermione y Harry empezaron a reírse.- Sabéis qué? Me da igual...de todas formas no pinto nada aquí.

Iba a marcharse pero alguien la paró.
-No se las cosas que te ha dicho Ron pero no eres una molestia.

Becca miró a Harry y le dedicó una sonrisa.
-Gracias supongo....nos vemos.- dijo para irse a su cuarto.

[...]
El curso acabó bien para algunos sin embargo no se podía decir lo mismo para Ron.

Estaba decidido en lo que iba a hacer. Vio a Becca que subía al tren de vuelta a casa y la siguió.
-Becca! Espérame!- dijo. Cuando la chica se giró no lo miró a la cara.- Quiero decirte algo.

Al ver que la chica no respondía siguió hablando.
-Siento lo que te dije, salió sin más...- empezó a decir pero se calló al ver la cara de la chica.

-Genial, ahora déjame en paz.- dijo para irse de la vista del pelirrojo y dejarlo confundido.

-Salió sin más?- preguntó George detrás del pelirrojo.
-Ronnie...tendrás que pensar mas en lo que dices...- siguió Fred.

Ron miró otra vez por donde se había ido Becca. La había fastidiado otra vez? Era muy probable.

my problem (Ron Weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora