my problem (Ron Weasley)

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Narrador omnisciente:
Fred y George no dudaron en ir directamente a la madriguera donde se suponía que Becca estaba.

Cuando entraron se quedaron de piedra al ver que era verdad lo que la carta de Remus decía, la chica había sufrido mucho...

Molly la tenía en el sofá, mientras la chica miraba sus manos, la señora Weasley le curaba del todo las cicatrices.
-No puedo creer lo que esa enferma te ha hecho!- decía enfadada la señora pelirroja.

-Merlín...- dijo Fred sentándose al lado de la chica.- Tienes que explicarnos todo con detalles, que ha pasado?- dijo entonces sintió como George le daba una colleja.

-Idiota, no puede hablar.- dijo sentándose en otro de los sofás.- Por eso, nos lo vas a escribir.- dijo con una sonrisa.

Becca quiso reír pero le dolía la cara en ese instante.
-Niños! Dejar de hacer reír a la pobre chica!- dijo Molly a lo que los gemelos se miraron entre sí.

-Estás pidiendo lo imposible madre...- dijeron al unísono a lo que Becca tuvo que levantarse para no reír más aún.

Mientras, en el ministerio, se encontraba el trío de oro junto un duende infiltrados para entrar en la bóveda de Bellatrix y así tomar una copa, la copa de Hufflepuff, otro horrocrux.

-Entonces...básicamente estáis buscando objetos tan sencillos y básicos en todo el mundo para destruir el alma de Voldemort y así Harry lo podrá matar?- preguntó Fred una vez la chica había acabado de explicarles.

no os olvidéis que son siete, en este caso el diario que fue destruido por Harry en su segundo año, el Anillo de Marvolo Gaunt, destruido por Dumbledore, el Guardapelo de Slytherin fue el que se lo robamos a Umbridge y ahora están en busca de otro más.

-Wow, realmente estáis locos y debéis tener mucha suerte con ello.- dijo George.- Enserio ha matado a siete personas para crear...eso?- dijo a lo que Becca asintió.

Fue cuando la chica sintió un peso encima de ella. Fred la abrazaba cuidadosamente. La chica apoyó la cabeza en su hombro.

-Verás que todo se solucionara.- dijo George con una sonrisa.- Y podremos hacerte reír.

-Además, ahora podríamos llamarte...cuñada?- preguntó Fred una vez se había separado a lo que la chica se sonrojó y negó.

Molly los miraba con una sonrisa tierna, ahora que Becca estaba mejor, estaba menos preocupada.

Cuando todos se encontraban hablando o haciendo sus cosas, la chica se levantó e intentó caminar hacia el servicio, no necesitaba ayuda de nadie se dijo a sí misma.

Entró y suspiró al saber que al menos, no quedaría inválida para siempre, aún le quedaban fuerzas para seguir adelante.

Cuando acabó, se empezó a lavar las manos con cuidado y lentamente, cualquier golpe o movimiento rápido podría marearse le había advertido Molly.

No sabía si fue un error o no, pero se miró al espejo. Levantó la mirada y vio realmente su cara. Todos le habían dicho que seguía siendo la misma, que seguía siendo hermosa.

Pero ella no pensaba lo mismo. No era hermosa ni mucho menos. En que estaba pensando?

Apoyó sus manos al lavamanos y cerró sus ojos para contener las lágrimas que amenazaban salir.

Tonks quien había estado pendiente de la chica para ver que saliera con normalidad del lavabo frunció el ceño para levantarse y acercar la oreja a la puerta de esta.

-Becca, va todo bien? Si va todo bien, por favor, da un golpe en la puerta.- dijo algo preocupada.

La chica, que se encontraba dentro, no podía contener la lagrimas, necesitaba llorar y desahogarse, necesitaba gritar y reír, necesitaba volver a la normalidad.

Con temblor en todo el cuerpo, dio un golpe en la puerta para no preocupar a nadie. No era su responsabilidad hacerse cargo de ella.

Luego de eso, apoyó su espalda en la puerta y empezó a deslizarse hasta quedar completamente sentada en el suelo.

Le costaba respirar así que por instinto abrió un poco la boca para tomar aire, fue doloroso.

Fue tan doloroso tanto para ella como para los que se encontraban ahí que oyeron su grito que no paraba.

Tonks abrió la puerta de golpe encontrándose con la chica, intentando calmarse y mantener la boca cerrada, mientras lloraba con un sentimiento de dolor y sufrimiento.

-Oh, cariño!- exclamo Molly abrazándola e intentando calmarla.- Estoy aquí, tranquila, estoy aquí...- le decía mientras le acariciaba el pelo.

Por otro lado, Ron, Hermione y Harry habían conseguido la copa de Hufflepuff.
-Debemos ir a Hogwarts! Estoy seguro de que el siguiente horrocrux está ahí.- dijo Harry pues había tenido una visión.

-Será algo difícil entrar, Snape es el director...- dijo Ron a lo que Hermione abrió los ojos.
-Entraremos por Hogsmeade, seguro que hay algún pasadizo.- dijo entonces ambos chicos estuvieron de acuerdo.

Pensaron que sería de buena ayuda descansar así que tomaron un respiro.

Ron, se sentó a la orilla del lago donde se encontraban.
-Va todo bien?- preguntó la castaña a lo que el pelirrojo la miró.

-Me preocupa Becca, si le llega a pasar algo...-
dijo tomando una piedra y tirándola al agua.- No se que digo.- soltó de un suspiro.

-A que te refieres? A que estás enamorado de ella?- preguntó Hermione con una sonrisa a lo que el pelirrojo sonrió.
-Tanto se nota?- dijo a lo que ambos rieron.

Becca, ahora se encontraba en la habitación donde la habían dejado descansar.

No tenía sueño, pero no quería estar despierta, no quería pensar en nada, sin embargo ahí se encontraba dando vueltas a lo mismo.

Frunció el ceño al no encontrar una hoja para escribir y su pluma. Cuando las localizó, bufó al saber que se tendría que levantar.

"si necesitas cualquier cosa, llama a Fred o George, no se te ocurra levantarte, entendido?"

Las palabras de Molly rondában su cabeza y le habían pelearse con su conciencia.

Rodó los ojos para destaparse y bajar los pies al suelo. Se levantó y caminó hacia la hoja que había.

No le gustaba que la tratasen de enferma, ni mucho menos, ella sabía cuidarse por si sola y por lo tanto sabía tomar un estúpido papel.

Cuando ya tenía todo listo, suspiró para empezar a escribir.