GUARDIÁN - Kookmin

27.

La flechita del ratón se deslizó hacia uno de los vídeos y clickó sobre el título. Namjoon estaba a punto de meter su mano bajo los pantalones y...

Golpes se escucharon en la puerta.

-Vamos, hombre, no me jodas- Namjoon gruñó. Añadió una ventana en la pantalla y se levantó de su silla en dirección a la puerta. Cuando la abrió, un Jimin con ojos rojos y nariz congestionada lo recibió.

Su estómago se retorció.

-¿Jimin?- preguntó con suavidad y genuina preocupación.

-¿P-puedo quedarme a dormir contigo?- el rubio limpió sus lágrimas rápidamente.

Mierda, le había cortado su paja diaria.

-Eh... No sé- realmente, Namjoon no sabía qué estaba sucediendo, la sangre no le llegaba a la cabeza y no podía procesar la situación. Al menos no tan rápido.

-¿No sabes?- Jimin arqueó sus cejas en tristeza.

Pero es que Jimin era sencillamente irresistible.

-O sea, q-que sí, claro, por supuesto- rectificó al instante con una sonrisa tensa- Lo decía por mi madre, ya sabes, por si no le viene bien o n-no sé, em... ¿C-cómo has entrado en mi casa, por cierto?- preguntó con curiosidad. Jimin no había llamado a la puerta de la casa sino a la de su cuarto, ya dentro.

-Con una tarjeta de crédito- Jimin rompió a llorar- L-lo siento, no era mi intención.

-Anda, no pasa nada- Namjoon abrió sus brazos y el más bajito se refugió en su pecho. Cuando el de hoyuelos fue a golpear su espalda con suavidad se dio cuenta de dónde había estado su mano previamente. Ay, no- ¿P-podrías? Eh...- Namjoon lo separó con cuidado- ¿Podrías darme unos minutos? Para recoger un poco el cuarto y esas cosas...

Jimin asintió y sorbió mocos con una mueca lamentable.

-Bien, espera aquí un momento- Namjoon cerró la puerta de un portazo en sus narices.

...

Unos pocos minutos después y con las manos lavadas, Namjoon abrió la puerta nuevamente y Jimin entró.

-¿Qué estabas haciendo?- Jimin musitó sentándose en el borde de la cama.

-Nada importante- Namjoon murmuró despreocupado tomando asiento en su silla del escritorio.

-Estabas viendo porno ¿Verdad?

-Iba a verlo- Namjoon se encogió de hombros- Pero no te preocupes- Namjoon cerró las pantallas en el ordenador y se giró lentamente en su silla hasta encarar a Jimin- ¿Qué ha pasado? ¿Problemas con Jungkook?

Jimin arrugó su nariz.

-Es un imbécil.

Sabes que no.

Sabes que está jodido, tanto como tú.

-Ya, pero eso ya lo sabíamos todos.

-Me ha dicho que no me quiere- Jimin frunció el ceño- No me lo ha dicho tal cual pero...-sollozó - Lo ha dejado bastante claro.

-Y tú sí lo quieres ¿Cierto?- Namjoon musitó con suavidad.

Otro sollozo asaltó el cuerpo inestable de Jimin y este asintió derramando más lágrimas.

-Sólo un idiota no se enamoraría de Jungkook. Es tan bueno... Pero a la vez tan imbécil.

-Pero folláis y te protege. No lo entiendo.

-Yo ahora sí- Jimin trató de desprenderse del sentimiento miserable de ser un segundo plato. De ser una simple oportunidad de redimirse. Él no era Taehyung y jodidamente nunca lo sería, él no merecía ser salvado por los errores de otro si no porque se merecía ser feliz, aunque fuera por sólo unos segundos. Se merecía ser importante para alguien y alguien merecedor de ser amado y protegido.