CINCUENTA Y UNO

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bajo las escaleras sin ánimo, el olor a pan tostado ni siquiera me llega a dar cosquillas, no tengo hambre.

—¿Te vai a ir sin desayunar, niño?—pregunta la nona, la miró por unos segundos y sin poner mucha resistencia dejo la mochila en el sillón y me acercó a ella.—¿Me vai a contar o vai a estar todo el día como alma en pena?

me siento en la mesa y apoyó mis codos en la mesa.—Estoy cansado.

—Bueno, si con todo lo que hay estudiado... Tómate un descanso, niño.—deja en la mesa un plato con pan y una taza con leche de chocolate.—Cuando llegues te tendré algo rico.

sonrió y asiento, deja una mano en mi cabeza y me revuelve el pelo.

» Ya, ya. Come.

prácticamente devoró todo porque ayer no comí nada cuando llegué y cuando termino lavo lo que usé.

—Gracias, nona.

—Anda con cuidado.—me dice antes de que cierre la puerta.

me dirijo hacia el paradero y cuando llegó a éste, al parecer la suerte esta de mi lado porque pasa la micro que me sirve e incluso me para.

en el camino me paso escuchando Twenty One Pilots en un intento de no ponerme triste y lo logró hasta que suena Truce.

parece que todo a mi alrededor se puso de acuerdo porque hasta el clima, que ayer parecía relativamente brillante, hoy solo es un grisáceo sin mucha gracia. Las personas también caminaban sin muchos ánimos, aunque nunca han sido animosos, pero cuando iba alegre poco me importaba su andar.

al llegar llegó a la sala, veo a la Mailen y al Salvador conversando, aún no llega la Abi. Lo que es bueno porque no quería topármela.

justo tocan el timbre cuando me siento, el Fabián esta jugando en su celular y no me presta mucha atención, hasta que entra la profesora jefe.

—Estaba a punto de ganar.—lloriquea, lo miró de reojo.—¿Cómo estay, Elías?

—Bien ¿Y tú?—giro mi cabeza para mirarlo.

—Bien también ¿No pasaste donde tus amigos primero?

—Es que iban a tocar.—miento, observó a la Mailen, ahora esta sola.

—Ah, verdad.—ríe.

—Buenos días, alumnos.—se sienta en el escritorio.—Voy a pasar la lista porque hoy tenemos prueba.

se me había olvidado que era hoy, menos mal estudié.

estoy a la mitad de la lista, así que no prestó atención. Sin embargo, igual prestó atención cuando empiezan con la C.

—Jeremy Castro...—se escucha el típico presente.—Sofía Cortes...—de nuevo.—Abiga... Fabián Díaz.—frunzo el ceño.

¿Se saltó a la Abigail?

la Mailen se gira y me mira, esta igual de confundida que yo.

(...)

pegó mi cabeza a la mesa, mientras oigo como alguien se sienta frente a mí.

—Me dijo que ya no estaba mas en el curso por motivos personales.—murmura la Mailen, levantó la cabeza.—¿Tú sabiai?

—No.—niego despacio.—O sea me dijo que necesitaba alejarse... De mí, Supongo que se refería a todo también.—me paso una mano por la cara.—No sé, pensé que la entendía aunque sea un poco, pero resulta que no.

me mira con pena.—A mí no me dijo nada ¿Alejarse de ti? Pero si erís importante pa' ella.

—No puedo hacer nada mas que aceptarlo.—me encojo de hombros.

NO SEAI LLORONADonde viven las historias. Descúbrelo ahora