𝐋𝐄𝐓'𝐒 𝐓𝐀𝐋𝐊 𝐀𝐁𝐎𝐔𝐓 𝐒𝐄𝐗

07 (¿Sonidos?)

La pelinegra se despertó cuando sintió un pecho en su cuerpo que no podía soportar, Sana se había quedado dormida encima de ella, se intentó mover un poco a la derecha pero el peso se lo impedía.

— Sa-Sana unnie me es-estas aplastando —Dijo con algo de dificultad, la mayor se enderezó y siguió durmiendo, Tzuyu cerró los ojos, buscando una buena forma para apartarla sin despertarla— ¡Sana! —Movió su cuerpo para que se despertará.

— Tzuyu —Los ojos de la menor se abrieron de golpe, ese sonido nunca lo había escuchado, sus mejillas se sonrojaron, sintió unas ganas enormes de salir corriendo y esconderse en su habitación.

— Sana unnie por favor me estas aplastando —Bufó molesta y cuando logró quitársela de encima Sana volvió a moverse y ahora sus piernas estaban arriba de ella— Joder —Se levantó sin importar en donde caía.

— ¡Tzuyu! —Chillo desde el suelo— ¿Por qué hiciste eso? —Se sentó en la cama— Eso no se hace, mi cabeza.

— Es que estabas arriba de mi —La japonesa no entendía, siempre pasaba, ella casi siempre dormía arriba de ella y nunca hubo una queja, ningún reclamo.

Sus cejas se fruncieron y sus labios se abrieron listos para decir lo que pensaba— Nunca te ha importado —Tzuyu bajó la mirada apenada a sus manos, ¿cómo le decía que era porque el calor no la dejaba dormir?.

Tzuyu estaba presentando diversos cambios en su cuerpo, el calor no la quería dejar en paz y Sana  no ayudaba con  el roce de sus cuerpos o la forma en como bailaba o  se comportaba, la estaba llevando al borde la locura y no quería saltar al abismo.

Por otro lado estaba Sana que ya había controlado todo esos efectos que tenía la menor en ella, horas tomando una ducha fría y pensando en animalitos la ayudaba bastante, pero su novia no corría con la misma suerte, sus sueños, sus pensamientos se basaban en la peli rosa bailando de forma provocativa, como odiaba acompañarla a bailar con Momo y Mina.

Definitivamente era muy mala idea verla actuar de esa forma, ella siempre era tierna, con una sonrisa pero cuando le tocaba practicar coreografías que le quitaban por completo lo tierno lo hacía de una forma que Tzuyu no veía como natural, parecía más bien de otro mundo la dualidad de su chica.

— No es que no me importe o que me importe es que ahora siento cosas y me duele —Acarició su vientre y sintió sus ojos picar, ella nunca lloraba, no le gustaba creía que eso era innecesario si estabas triste solo intenta buscar el lado bueno de las cosas aunque no toosa tienen una Sana en sus vidas.

Rodó los ojos al sentir la primera lágrima salir de sus ojos, la mayor no sabía como actuar, abrazarla era la mejor opción pero conociendo a Tzuyu se apartaría molesta así que solo movió un poco la mano y le acarició el muslo.

— Te amo Tzuyu y pase lo que pase siempre estarás a tu lado —Sonrió y besó sus mejillas.

— Lo dices porque tu no eres un monstruo —Aquello si que le había dolido, su bebé creía que era un monstruo y ella no lo sabía, ni se había dado cuenta que tenía ese pensamiento tan horrible de ella misma.

— No digas eso, tu no eres un monstruo —Tzuyu la miró de reojo— ¿Que te pasa?.

El debate mental que tenía en ese momento se podría comprar con todas las guerras del mundo— Es que yo...

— Con completa confianza —Quería darle ánimos para que lo dijera— Puedes conf-

— Quiero que ser tuya Sana —No pensó que fuera eso, comenzó a reír y Tzuyu no entendia que le estaba sucediendo a su novia, ésta siempre reía pero nunca por cosas sin sentido.

— Tu ya eres mi bebé —Señaló su pecho— Mi corazón late por ti, vivo por ti.

— No, no es lo que quiero decir —Miró hacía arriba, el techo en estos momentos era lo único que la ponía a pensar— Quiero que tu y yo...estemos en una cama.

— Ya estamos —Si Sana se ganará un dólar por cada estupideces que sale de sus labios seria millonaria.

— No —Negó y golpeó su frente.

— No entiendo nada.

— Creme que se que no entiendes nada —Dijo con fastidio— Quiero que tu a mi me hagas...eso que no hemos hecho.

— ¿Maquillarnos? —Eso nunca lo habían hecho y obviamente que fue lo primero que paso por su mente.

— ¡No! —Exclamó al borde la lágrimas, Tzuyu andaba demasiado sensible estos días.

Todas lo sabían, Nayeon porque sin querer la asusto, Jeongyeon por hacer una broma, Momo porque le robó la comida, Jihyo porque ella lo sabía todo, Mina porque la miro mal al igual que Dahyun, Chaeyoung por ignorarla, todas se dieron cuenta que a la menor le pasaba algo y necesitaban saberlo hasta que ella misma les dijo lo que ocurría.

Por esa razón ayudaban tanto a Sana para que tomara una decisión, todas querían que fueran felices y esto era el último paso o bueno uno de los últimos.

— Ya no llores es que no entiendo sabes como soy —Golpeó su cabeza— Tonta Sana.

Una costumbre que tenía era decirse de esa forma, todas odiaban que lo hiciera sobre todo la chica que estaba frente a ella, era un estupida por no darse— Sabes que no me gusta que te digas así.

— Tu dijiste que teníamos que alejarnos de las personas malas y te alejaste de mi —Recordó.

— Solo quería hacer reír a los fans —Suspiró cansada, la conversación se había disipado, como siempre, y creía que era lo mejor.

Se acomodó mejor lista para dormir pero la risa de Sana la obligó a abrir los ojos— Dame tiempo.

— ¿Para? —Se dio la vuelta para quedar frente a frente— Sana de verdad que ge necesito.

— Lo se bebé —Contestó con los ojos cerrados, claro que sabía pero no podía, estaba muy nerviosa.

Un paso que definiría todo en su relación, Tzuyu siempre pedía las cosas difíciles y ésta era una de ella.