XVIII| sin editar

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[La boda]




Sebastian

Me hiere ver lo que le causo, odio ver como se rompe y llora del dolor, ese que ocasione. Me culpo cada segundo y desearía devolver el tiempo y quedarme con ella, quedarme hasta hacerle entender que no era necesario que seamos tres. Que mi amor por ella iba a permanecer, apoyarla justo cuando perdimos ese futuro hijo, dormir noches junto a ella acariciando su cabeza y diciendo a su oído en susurro; "Todo va a estar bien"

Pero solo me fui, la dejé en el peor momento y entiendo sus razones pero más que todo siento que solo necesita desahogarse y dejar ir todo ese desprecio que tiene hacia mi. Si vine aquí es porque de verdad quería escuchar por su boca que quiere que me quede, lo dijo, dijo que quiere que me quede. Aún no sea de una manera directa, pero ya me fui una vez, no puedo hacerlo otra vez.

El timbre sino y fue como un aviso hacia ella, ese sonido la hizo separarse de mi lentamente. Lo hizo sin mirarme a los ojos, por pena quizás. Limpio sus lágrimas con prisa y sonó su nariz

—¡Yo abro!— Se apareció Carmen y con pasos acelerados se dirigió hasta el lobby. Desde allá escuché una vez masculina, con dificultad escuché como preguntaba por Fanny.

Mi mandíbula se tensó cuando pasó por mi mente Pablo, odio que el esté cerca de ella. Pero tampoco puedo ser injusto y posesivo, cuando me fui le di la libertad de rehacer su vida y es lo que ella está intentando.

—Es Pórtela— Como si me leyera la mente o entendiera las fracciones de mi cara, respondió. Asentí y dentro mío todo volvió a la calma

—¡Mary Luz de mi vida!— Vociferó desde el pasillo
—¿Donde andas, Mary Luz?— Vociferó por segunda vez, hasta que se dejó ver y entró a la sala de estar.
—Hey, ¿que tal Sebastian?— Me dio la mano y colocó una línea recta llegando hasta sus mejillas.

—Hey, Brother— Di unas palmadas en su espalda, como símbolo de saludo —Tiempo sin vernos

—Tú que estabas desaparecido. Pero que bueno verte por aquí, que bien que estás devuelta— Lu carraspeó su garganta, llamando su atención —Mary Lu, tenemos trabajo y aún no estás vestida.

—No me digas Mary Lu— Sentenció. No entiendo porque odia tanto que le digan así, es un lindo apodo. Recuerdo una vez que ellos la grabaron molesta porque la llamaron así y ella con tomo molesta dijo "No me diga Mary Luz, que yo no me llamo Mary Luz" me causo risa, fue meses después de yo irme. —¿Que trabajo?— su rostro era de confusion, hizo un gesto con sus manos de: ¿Que?

—No me digas que lo olvidaste...— Ella asintió aún con el mismo rostro —Mal por mi por no recordarte, tienes show hoy. Es una fiesta privada de boda, como te toca cantar solo 3 canciones no hacía falta que ensayaras. Con el equipo nos veremos allá

—¡No me jodas!— Ahora su rostro era uno de angustia —¿Por qué no me avisaste?

—Te estuve llame y llame, pero yo no sé donde es que tienes tú ese celular.— Objetó —Pero hay un problema, el chofer no puede llegar a tiempo a buscarnos porque al auto se le pincho un neumático. Debe ser un auto grande para meter todos los instrumentos. Le pediría ayuda a Amilka, Sergio y Arteaga pero ellos ya están en el salón de evento. Se supone que todos debíamos llegar hace horas pero tú estabas desaparecida— Se notaba estresado por lo rápido que hablaba

—Si quieren yo los llevo, mi chofer por suerte está abajo y el auto es grande— Me ofrecí. Sirve y me gano un show gratis de Lu, tengo ganas de verla cantar en vivo

—Ni lo sueñes— Negó ella —Pide un Uber y auméntale el tamaño, que sea un mini-bus.

—Ni hay disponibles en la zona, aparte Sebastian ya esta aquí y nos ahorra dinero y tiempo.

I am no longer unfaithfully yours| Ya no soy infielmente tuya| (Yatralu)Where stories live. Discover now