Hacia la Obsesión

Capítulo 7 | Inquebrantable.

Canción: 

Animals - Maroon 5 

Inquebrantable. 

Collet.

Hace mucho no tenía ese título, he olvidado lo que se siente y solo para ser exactas, una vez en mi vida lo he tenido, con Wyatt, y al final no terminó de la mejor manera.

Pero ahora puedo decir, que me siento rara, un poco feliz, de poder pensar y recordar, que Gawen ahora es mi novio.

Le he dicho que sí, acepté el enorme ramo de rosas, su beso luego de que emitiera el "sí" de mi boca. Acepté la cena que me dio y el helado también, la noche completa en la que me hizo sentir una mujer querida, que no tiene un pasado horrible atrás, que tiene dos hijos los cuales no le quitan nada de privilegio para tratarme como un cristal que aprecia y no quiere lastimar ni con una rajada.

Lo abracé mucho, muy fuerte y lo besé con ganas. Sinceramente no creí que él me pidiera serlo, aunque parezca algo muy ilógico, perdí la vista de que alguien quién me tiene ganas, tenga las intenciones de colocarse un título conmigo frente a todas las personas, incluso, solo para nosotros. Y que eso ocurra ahora que mi razonamiento es destruido cada vez que me veo torturada y con un estómago grande que odiaba.

Se siente bien. Me siento bien.

Quiero contarle a Daria, a Clara, a Zadkiel. Quiero decirles que alguien me ha pedido ser su novia y he estado lo suficiente estable para aceptar sin dudarlo mucho. Y el no haberlo dudado mucho quiere decir que si lo quería, que de alguna forma desee que esto pasara con la persona, que desde el minuto cero en el que salí del secuestro, me ha ayudado sin parar, a salir adelante. Ese mismo que me abrió las puertas del trabajo al que ahora mantiene estable a mis gemelos y a mí.

Gemelos, los cuales no han querido hablar conmigo por el enojo que tienen de que yo no haya ido a su cumpleaños, y que no les haya presentado a su papá. Que dolor de cabeza con el tema, no puedo estar mucho tiempo sin hablar con ellos, estoy tan acostumbrada a hacerlo todos los días por las noches y a veces por las mañanas; pero, ahora llevo una semana sin hacerlo y no me gusta, me hace sentir mal, me hace sentir mala madre, aunque ciertamente lo sea.

—Te necesitan en la oficina de Gawen. —me avisan mientras termino de comer en la cafetería.

—En un segundo.

Me apresuro, trago lo último que tengo en el plato y me levanto dejando lo que usé donde se debe. Camino rápido a donde me llaman, viendo a lo lejos a Evans, a quien no miro mucho porque ya no sale de su área, le han regañado al igual que a mí y pues no se puede hacer más cosas.

—Para que soy buena. —entro diciendo a la oficina de Gawen.

—Para besarme —sonríe y cierro la puerta detrás de mí.

—¿Solo para eso? —bromeo también.

—En realidad, para un sinfín de cosas, pero para ahora mismo que me beses; que mi novia me bese.

La sonrisa se me amplía y abro los brazos recibiendo el abrazo que me da.

—Se escucha tan bien que me digas así.

—Imagínate como se sentiría.

Me agarra de la cintura y me pega fuerte a su cuerpo, su mano derecha me agarra de la cara y me besa. Le sigo y que rico, enrollo mis brazos alrededor de su cuello, sintiendo su calor y su olor, su lengua se entrelaza con la mía, ya voy viendo que la confianza entre nosotros es más grande que antes. Creo que me siento más cómoda sabiendo que soy su novia.