a(manecer)

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A Jingyi le gusta contemplar el amanecer a través de la gran ventana de su habitación, se levantan unos minutos antes para ir a prepararse una tasa de café y se envuelve en una calentita manta, en el caso de que fuera invierno, cuando es verano también se levanta unos minutos antes para ir a prepararse un café helado y se sienta en un puf a contemplar el amanecer.

Sizhui no se extraña que al despertar vea a su novio sentado a los pies de la cama que comparten envuelto en una calentita manta viendo el amanecer mientras toma su preciado café o no se extraña que al despertar vea a su novio sentado en un puf viendo el amanecer mientras toma de su café helado.

Independiente de la época del año, independiente de que día sea, Jingyi, sin importar qué, va a estar viendo el amanecer, mientras Jingyi contempla el cielo que poco a poco se va pintando de cálidos colores, Sizhui lo contempla, ve ese blanco rostro ser iluminado por los primeros rayos de sol del día. Le encanta ver lo concentrado que es cuando se trata del amanecer, totalmente absorto en el cielo, un comportamiento totalmente diferente al del resto del día.

Le encanta ver el rostro de Jingyi ser iluminado por los primeros rayos del sol, pero los días que más le gusta son los días nublados y lluviosos, en esos días se despierta abrazando a su novio, ninguno de los dos con intención de moverse de los cálidos brazos ajenos, disfrutando de la calidez contraria.

Hoy es diferente, Jingyi se encuentra viendo cómo todo se empieza a tornar de cálidos colores, dirige su mirada hacia la cama y ve a Sizhui durmiendo plácidamente en medio de las cálidas mantas y siente envidia de ellas, con cuidado se para y cierra las cortinas, deja su taza ya vacía en su mesita de noche y se dispone a adentrarse en la cama.

A Jingyi le gustan los amaneceres, pero más le gusta despertar abrazado a su novio.

Abecedario-zhuiyiOù les histoires vivent. Découvrez maintenant