20

395 55 18
                                    

Al fin es lunes 24 de diciembre, por lo que la anhelada fiesta antes de navidad ha llegado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al fin es lunes 24 de diciembre, por lo que la anhelada fiesta antes de navidad ha llegado.

El viernes llegó Emilie con Niccolo, por lo que ese día el idiota fue a buscarme al colegio y una profesora se cayó de boca al suelo por quedarse mirándolo. El muy maldito es muy atractivo, incluso diría que más que yo, pero Niccolo puede ser mucho más estresante que yo, por lo que las chicas se aburren con más facilidad de él.

—¡Mamá, quiero usar el baño! —se queja Niccolo —¿Cómo soportan tener solo un baño?

—Somos dos —me encojo de hombros —No nos afecta mucho. Además, mamá suele usar la ducha temprano.

—¡Mamá! —Grita una vez más.

—Deberías haberte quedado en casa de Neels —volteo los ojos —Me estás comenzando a estresar.

—Cierra la boca —se queja —¡Mamá!

Volteo una vez más los ojos y me levanto de mi lugar para irme a mi habitación, o sino juro que le daré un golpe a Niccolo. Me lanzo a la cama y miro la pantalla de mi celular, hasta que me entra una llamada de Alan.

—¿Qué hay, alemán?

Todo bien, Italiano.

—¿Pasa algo?

Quería avisarte que mañana estaré un poco ocupado, así que tu regalo tendrá que esperar —automáticamente miro mi repisa y sonrío.

—Tengo 5 de esas —me río —puedo aguantar por la número 6.

Aun así, tienes que parecer impresionado.

—¿No es lo que hago siempre?

Rápidamente soy inundado por los recuerdos de hace unas navidades atrás, cuando recibí el primer regalo por parte de Alan.

Hoy cenaremos en casa de mis abuelos y a pesar de que aún es un poco temprano, mi mamá se quiere ir antes para pasar tiempo con la abuela, por lo que ya me estoy arreglando para irnos.

Me levanto del sofá y camino a la puerta, ya que están golpeando, lo que se me hace un poco extraño, porque solo suelen venir mis tíos y ellos saben que hoy saldremos.

Un chico rubio con la gorra hacia atrás me mira con una sonrisa amistosa, pero yo no sonrío, solo por el hecho de que se me hace bastante extraño verlo ahora que ya estamos de vacaciones.

—Hola —mueve una de sus manos en forma de saludo.

—Hola, Alan —digo un poco confundido —¿Qué haces aquí? ¿Quieres pasar?

Las Notas De Bruno #2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora