⇢𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐¹

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Las lagrimas corrían por si solas, no podía describir lo que sentía en ese momento, ¿acaso Yugyeom en serio lo había dejado?, ¿después de tres años de relación?, y como si fuera poco, sin una explicación lógica de por medio.

Jungkook siempre se considero una pareja amorosa, dedicaba una buena parte de su vida en hacer feliz a su amado, ¿acaso no fue suficiente?, ¿acaso el mismo fue el culpable de la separación?, ¿acaso hizo algo mal?.

No lo entendía.

Claro que no lo entendía.

Mientras seguía caminando de manera desganaba, aun no podía digerir la noticia, aun no lo podía creer, no cabía en su cabeza que la persona que tanto amo, que tanto ama, lo haya dejado, ¿acaso fue el único que seguía sintiendo algo y no lo noto?.

Definitivamente no lo podía creer.

Quiso borrar las lagrimas que brotaban de sus ojos y las ya existentes en su mejilla, antes de tocar con su puño débil la puerta de la casa de su mejor amigo, pero no paraba de llorar, le era inevitable, no podía dejar de sentirse destrozado.

-¡Ya!.. tiene que ser una broma, ¡¿es en serio, Jimin?!, ¡lo acabo de comprar ayer, no me puta jodas!- los gritos que provenían de adentro de la casa fueron fácilmente escuchados por Jungkook, y seguramente por todos lo vecinos -todavía no abrí la jodida puerta, ¡no sé quien es!, dios… - gracias a ese ultimo comentario no evito dejar salir una mini risa, puede ser un momento de mierda pero eran sus amigos -¡Oh!, es Jungkook-… ¿Qué te paso?…

Ese era Kim Taehyung y su dualidad era fascinante, un grandioso descubrimiento que había descubierto Jungkook durante todos los años que fueron amigos, pasar de una radiante sonrisa geométrica a una expresión tanto fría como seria era típico en su mejor amigo.

-Jungkook, ¿Por qué lloras?- volvió a preguntar mostrando su preocupación al ver los ojos llorosos del nombrado, y enojo por no obtener una respuesta rápida.

Entonces la poca sonrisa que formo en el rostro del menor se desvaneció.

-Es… e-es Yugyeom- contesto, pronunciando con un poco de dolor el nombre de la persona que aun quería.

-¿Pelearon fuerte?- dedujo extrañado, ellos casi nunca peleaban fuerte, pero era de imaginarse si su amigo llegaba con lagrimas en el rostro.

-D-De hecho.. el… e-el termino conmigo- dijo al fin.

Se formo un silencio de a penas unos segundos, segundos en los cuales Taehyung no tardo en rodear con sus brazos el cuerpo del pelimorado con urgencia, ambos tenían casi la misma altura por lo que no era complicado rodearlo en un cariñoso abrazo fuerte.

Y entonces Jungkook partió en llanto, era eso lo que necesitaba, un abrazo donde tenia que dejar salir todas las lagrimas, que se venían avecinando desde que, su ahora ex pareja, termino con el horas antes de llegar a la juntada con sus amigos.

En el momento que el mayor estaba listo para decir otra cosa, los otros individuos que se encontraban dentro de la casa, se acercaron al notar que Taehyung no había vuelto.

-Oigan tontitos, ¿Por qué se abrazan como si nunca se hubieran visto?- pregunto Seokjin, el mayor de todos, acercándose curioso hacia los dos menores.

-¿Esta todo bien?- esta vez pregunto Jimin, el rubio del grupo.

Tras la interrupción solo pudo separar a Jungkook un poco de tacto, pero lo suficiente para ser visto por sus otros dos amigos que pronto mostraron preocupación al notar la tristeza plasmada en el rostro de su menor, y antes de que lo atacaran con preguntas, Taehyung los detuvo.

⌈Hᴀᴘᴘɪᴇʀ⌋  •KookTae•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora