⌈Hᴀᴘᴘɪᴇʀ⌋ •KookTae•

⇢𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐²⁵

Jungkook empezó a abrir sus ojos poco a poco al sentir leves toques húmedos sobre sus labios, sintiéndose raro al principio, pero pronto sonrió al notar que eran besitos dejados por Taehyung, quien estaba despierto a su lado.

－Bello durmiente－ escucho su armoniosa voz grabe, logrando que se sonrojara un poco, ya que nunca fue despertado de esa forma tan cariñosa, sintiéndose tan afortunado, algo que solo su amigo podía lograr.

La primera imagen de Taehyung era esplendorosa, con aquella singular sonrisa y hermosos ojos color avellana.

－Tengo que ir a ensayar dentro de un rato－ aviso empezando a acariciar los pelos morados del menor con cariño.

－Ñoo…－ se quejo como niño pequeño mostrándole un sonoro puchero, empezando a tirar del brazo de su amigo pidiendo que volviera a la cama －nos duérmanos un ratito más, ¿si?…

Esa tierna imagen solo pudo complacer al mayor, quien no podía más con la ternura de Jungkook, además de estar completamente a sus pies, aquel puchero era todo.

Jungkook era todo para el.

－Tengo que ir, pronto habrá un campeonato importante, no puedo fallarle a Jimin, ni a nuestra racha ganadora－ presumió y explico, agarrando los cachetes blanquecimos apretándolos con cuidado para luego reír, era muy tierno.

Aun con aquella información, el menor con toda la fuerza que poseían sus poderosos brazos, alzo al castaño colocándolo en su regazo, mientras el mismo se acomodaba mejor contra el respaldar de la cama.

Pero antes de que Taehyung pudiera reclamar, beso con sus labios los contrarios para callar cualquier palabra, uniéndolos en un cariñoso, pero húmedo beso, con movimientos lentos y deseo, felices a primera hora de la mañana por probarse tentadoramente.

Taehyung se quiso dejar llevar, pero pronto cuando sintió aquellas posesivas manos sobre su cintura, empezando a moverlo sobre aquel miembro mañanero, que al parecer tenia ganas de saludarlo, supo que debia parar o sino jamás saldría de la cama.

－Jeon Jungkook, son las ocho de la mañana－ le aviso el mayor separándose de un jadeo del beso －p-por favor…－ pronuncio, no sabiendo porque causa en particular suplicó, a veces no se entendía.

Odiaba dejarse llevar, pero debia ser fuerte, aunque le fuera inevitable tener bajo suyo al hombre más ardiente del mundo llamado también Jeon mejor amigo Jungkook, sabia que por esta vez debia resistir.

－¿Me estas pidiendo que pare o que siga?－ pregunto con la típica voz ronca al despertar.

Pero cuando menos lo pensaron ambos empezaron a moverse con leves gemidos de por medio, aprovechando que estaban semidesnudos por la noche anterior, en este caso Jungkook completamente en cuero, por otro lado Taehyung con una camisa y unos bóxer.

El castaño estaba a nada de mandar a la mierda todo cuando a sus oídos llegaron los gruñidos satisfactorios del menor, no había algo más efímero que los gemidos perfectos de Jungkook.

－E-Eres muy… muy cachondo, Jeon－ le dijo al menor mientras se mordía el labio siguiendo con el tortuoso movimientos sobre aquel potente falo, el cual crecía cada vez más bajo suyo.

－Puedo serlo, pero veo que tu también tienes un problema y te encuentras igual de cachondo, cariño…－ hablo divertido moviéndose lentamente, llevando el mando de aquel esplendoroso culito.

Taehyung jadeo cuando sintió las manos de Jungkook comenzar a acariciar su cintura hasta adentrarse bajo la tela de su bóxer para masajear sus nalgas tocando directamente su piel caliente.

－Es inevitable, tu también lo quieres, Tae－ dejo un suave beso en su pecho sobre la tela del pijama －voy a hacer que te corras sin siquiera tocarte ahí abajo y créeme, vas a rogarme…