⸙͎Night Flower [YM] [By Ania] CAPS. FINS.

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VEINTIUNO

🎶...ℴ𝓉𝓇ℴ 𝒹𝒾́𝒶, ℴ𝓉𝓇ℴ 𝒶𝓂𝒶𝓃ℯ𝒸ℯ𝓇🎶

Comúnmente las personas consideran un ramo de flores como uno de los mejores obsequios debido al significado especial que hay detrás del mismo, existe un color especial para cada ocasión, ya sea rojo, amarillo, rosado, morado, naranja o incluso negro, la cuestión es saber elegir el correcto.

—Rosas blancas —susurró triste el pelinegro—. Su mamá dijo que le fascinaban esas flores entonces no entiendo el motivo de su rechazo  —continuó diciendo para sí mismo.

—¿Es por qué se las obsequio yo? —preguntó soltando un gran suspiro—. ¿No debería al menos ponerlas en agua? —Se levantó al terminar de revisar los informes que había traído su secretaria pero se detuvo un instante cuando una idea cruzó por su mente.

—Quizás deba entregárselo yo mismo —susurró mordiendo su labio inferior—. Debo volver a pedirle disculpas —sentenció tomando su saco para ir camino a casa ya que probablemente Jimin se encontraría preparando la cena antes de encerrarse en su habitación lo restante de la noche.

Yoongi llevaba tres días seguidos dejando sobre el mesón de la cocina un pequeño ramo de rosas blancas con una tarjeta que decía "Lo siento, Jimin" pero no había recibido algún tipo de respuesta por parte del omega ya que al amanecer encontraba el ramo en la misma posición dándole a entender que ni siquiera fue tomado entre sus manos.

—Escogeré las más bonitas para ti porque lo mereces —musitó con su vista fija en la carretera—. Sé que aún hay solución —susurró tratando de confiar en sus propias palabras.

Su mente formuló un sinfín de pensamiento positivos para alentar sus acciones y así no darse por vencido por nada del mundo, demoró alrededor de diez minutos escogiendo las rosas pero la felicidad con la que había llegado a su hogar fue reemplazada por una de miedo al no hallarlo en la cocina.

—Jimin, Jimin... —llamó el alfa mientras subía las escaleras para dirigirse a la habitación del omega pero antes de tocar se dio cuenta que la puerta estaba medio abierta.

—¿Jimin? —susurró asomando su rostro pero no hubo respuesta.

El alfa decidió ingresar a la silenciosa habitación notando que ni siquiera en ese pequeño lugar percibía el aroma del omega, continuó observando hasta que por su mente cruzó la idea de dejar el ramo de flores sobre el escritorio asegurándose así que Jimin lo vería pero al acercarse unos papeles provocaron tristeza y preocupación en su interior.

—¿Acta de divorcio? —susurró con un ligero temblor en sus labios—. No, aún existe solución para... —El sonido de la puerta principal alarmó al pelinegro que de inmediato salió de la habitación cerrando despacio la puerta de madera.